Nube gris

De un tiempo a esta parte hay algo en el ambiente social que no consigo entender con claridad. Me refiero a esa tenebrosa nube gris que oscurece todo el panorama de nuestra vida cotidiana, y que, por m¨¢s que lo intento, no acabo de ver tan negro.Las opiniones aparecidas en su diario en estos ¨²ltimos d¨ªas de mis escritores favoritos han colmado el vaso de mi incredulidad:

- Antonio Mu?oz Molina hace alusi¨®n al "derrumbe de, unos sue?os" en su recorrido por estos decepcionantes ¨²ltimos a?os de Gobierno socialista.

-Rosa Montero incita a la gente estupenda qu¨¦ a¨²n queda en el PSOE para que de una vez por todas rompa con estos "piratas".

- Maruja Torres dice que vamos camino de convertirnos en un pa¨ªs de "farfulleros".

Son frases que se repiten una y mil veces en los medios de comunicaci¨®n, en la calle, en el trabajo, etc¨¦tera, y es posible que lea as¨ª, pero yo no acabo de verlo. No quiero justificar nada ni contradecir a nadie, pero a m¨ª no me salen Ias cuentas a la hora de mover tanto pesimismo. No milito en ning¨²n partido pol¨ªtico. Acudo puntualmente a las urnas votando siempre por una opci¨®n de progreso, y es en eso con lo que puedo coincidir en las intenciones del PSOE. Por lo dem¨¢s, considero m¨¢s importante el bienestar de todos que el de un partido concreto.

S¨¦ que soy afortunado por conservar mi puesto de trabajo, y tiene que ser muy duro estar en paro, pero no entiendo el cabreo permanente de muchos de mis compa?eros que, partiendo de la nada, han mejorado notablemente su calidad de vida en estos a?os. En mis visitas al pueblo donde nac¨ª observo una mejora importante respecto a los a?os anteriores en infraestructura, colegios, ambulatorios...

No es bueno olvidar de d¨®nde venimos, y a m¨ª me parece un gran logro poder elegir libremente ser religiosa en un pa¨ªs aconfesional. Tampoco olvido que por fin el Ej¨¦rcito ha encontrado su sitio y, aunque se mueve, ya no hace ruido. Intuyo que asistimos a un nuevo ajuste de orden internacional m¨¢s solidario, y esto siempre lleva sus contrapartidas. A medio camino entre ?frica y Europa, ser¨ªa preferible acercarnos a las libertades para que todos podamos seguir expresando nuestras opiniones, incluidas las de aquellos que reniegan de estos a?os porque hoy ha amanecido nublado.

Tenemos una sanidad encidiada en otras partes del mundo, y acceso a una buena educaci¨®n; o sea, que a m¨ª no me salen las cuentas... No logro asimilar tanta informaci¨®n negativa y tanta decepci¨®n. Es palpable que durante este periodo se han cometido importantes errores. No creo que haga falta enumerarlos, pues para eso contamos con verdaderos profesionales, pero me resulta extra?o que las buenas noticias se mencionen de pasada y se carguen tintas de culpabilidad ante hechos que ni siquiera han sido analizados.

A veces me da la sensaci¨®n de que en esta obra que queremos levantar nos sobran arquitectos del derrumbe y nos faltan peones constructivos. ?Por qu¨¦ se nos presenta este pa¨ªs en sus peores momentos, cuando hist¨®ricamente nunca ha estado mejor? ?Por qu¨¦ el abuso de unos cuantos se utiliza para borrar de un plumazo los logros del trabajo de muchos...?-