Severiano y Olaz¨¢bal llegan con mal pie a Saint Andrews
La 'armada' espa?ola acude al tercer Grand Slam con problemas f¨ªsicos
"Para ser recordado hay que ganar en Saint Andrews". La ¨¦lite del golf mundial tendr¨¢ la oportunidad de subrayar el aforismo de Jack Nicklaus -el jugador m¨¢s venerado del golf mundial- a partir del pr¨®ximo jueves (Canal +). Entonces, el Open Brit¨¢nico, el decano de los grandes torneos (1860) abrir¨¢ sus puertas a la 124? edici¨®n. El marco: el rancio Old Course de Saint Andrews (Escocia). Un escenario creado por pastores escoceses en 1522, convertido hoy en el gran santuario de este deporte. La armada espa?ola acude con Severiano Ballesteros y Jos¨¦ Mar¨ªa Olaz¨¢bal a la cabeza. Los dos masters no han querido rehuir la cita, a pesar de sus m¨²ltiples problemas f¨ªsicos. Ambos llegan con un curr¨ªculo en blanco: esta temporada el c¨¢ntabro s¨®lo ha ganado el Open de Espa?a, y el vasco no ha alzado los brazos. La prensa brit¨¢nica no les pierde de vista, pero se inclina por Nick Faldo -¨²ltimo ganador en Saint Andrews-, Nick Price -que defiende el t¨ªtulo-, Bernhard Langer y Greg Norman.La espalda sigue martirizando a Seve y el pie derecho tortura a Txema. Ballesteros, de 38 a?os, aterrizar¨¢ en Saint Andrews -donde consigui¨® en 1984 el segundo de sus tres t¨ªtulos- tras una nefasta actuaci¨®n en el Open de Escocia disputado esta semana. Ni siquiera pas¨® el corte. Tras el estr¨¦pito, el c¨¢ntabro se mostr¨® expl¨ªcito: "No estoy bien; he intentado mejorar mi juego, pero parece como si diera marcha atr¨¢s. Mi espalda no mejora y mi swing es espantoso. No estoy muy motivado y no tengo confianza en m¨ª mismo". Ballesteros tiene previsto tomarse un descanso al t¨¦rmino del Open Brit¨¢nico. Incluso no descarta pasar por el quir¨®fano. No para subsanar su maltrecha espalda, sino para arreglarse un pie: "Tengo un callo muy doloroso entre los dedos"
Sin obsesiones
A sus 29 a?os, Olaz¨¢bal sigue atenazado por su mal pie. El ganador del Masters de 1994 no ha podido siquiera competir desde el pasado 25 de junio, cuando se examin¨® en el Open de Francia. El jugador de Hondarribla se oper¨® el pasado 31 de enero de sus molestias en el pie derecho, pero a¨²n no est¨¢ recuperado. Su participaci¨®n en el British ha estado en el alero hasta ¨²ltima hora. El pie le sigue molestando. El vasco se ha acostumbrado a cargar todo el peso de su cuerpo sobre la pierna izquierda, lo que le ha originado una tendinitis en su rodilla izquierda. Para aliviar sus dolores ha sido tratado con corticoldes. "Estaba muy desmoralizado, pero tras el tratamiento me encuentro mejor", afirma el guipuzcoano. Saint Andrews puede indicarle la salida del t¨²nel: "No es un campo muy duro y eso puede beneficiarme. Saldr¨¦ a ver qu¨¦ pasa, sin obsesionarme, porque tengo mucho tiempo por delante para ganar el Open". Con los espa?oles maltrechos, Faldo ser¨¢ una de las grandes bazas europeas.
Las dos citas previas del Grand Slam se quedaron en Estados Unidos: Ben Crenshaw se adue?¨® del Masters, y Corey Pavin, del Open de EE UU. Faldo amenaza: "Estoy jugando con mucha presi¨®n, pero con ardor. Justo lo que necesitaba". ?El Open? "Llega en un momento id¨®neo y en un escenario id¨®neo". "El campo", agrega Faldo, "te obliga a ser muy vers¨¢til. Hay problemas a cada instante". El campo est¨¢ junto al mar y el viento es enrevesado. Cambia de direcci¨®n en cuesti¨®n de horas.
Nick Price advierte: "Es much¨ªsimo m¨¢s complicado de lo que cualquier aficionado pueda ser capaz de suponer". El zimbabuense a¨²n resguarda en su retina la edici¨®n de 1978. En la jornada final se arrim¨® al vencedor -el gran Nicklaus- y se top¨® con una lecci¨®n: "Dios m¨ªo, con todo lo que hab¨ªa logrado en su carrera, estaba llorando. Le o¨ª decir: 'Esto es Saint Andrews y para ser recordado hay que ganar aqu¨ª".
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