"Si saco un mal resultado, renunciar¨¦
Representante del ala m¨¢s nacionalista del socialismo catal¨¢n, Joaquim Nadal, alcalde de Girona, es desde ayer el nuevo candidato del PSC a la presidencia del Gobierno catal¨¢n. Tres a?os despu¨¦s de que Raimon Obiols que no volver¨ªa a medirse con Jordi Pujol en las urnas catalanas, el PSC cerr¨® ayer un largo proceso de b¨²squeda de candidato en el que hab¨ªan sonado con insistencia nombres del calibre de. Pasqual Maragall, alcalde de Barcelona, y Josep Borrell, ministro de Obras P¨²blicas.
Pregunta. Su partido llevaba casi tres a?os sin candidato a la Generalitat. Vaya lujo, ?no?Respuesta. El PSC ya tiene candidato. Lo que pas¨® antes es historia. Sin duda habr¨ªa sido mejor tener un candidato desde el mismo momento en que Raimon Obiols anunci¨® que no se volver¨ªa a presentar, pero me siento muy satisfecho del proceso seguido para mi designaci¨®n.
P. El PSC habr¨ªa preferido a Pasqual Maragall o a Josep Borrell. ?Se siente usted candidato por exclusi¨®n?
R. No. Yo creo que eso no, est¨¢ tan claro, pero en cualquier caso yo fui el primero que dijo que si Maragall quer¨ªa pasar delante, yo le dejaba v¨ªa libre y me apuntaba detr¨¢s de ¨¦l inmediatamente. Del mismo modo, ahora Maragall me dar¨¢ el apoyo que haga falta.
P. ?Qu¨¦ l¨ªmites le ha puesto su partido?
R. Ninguno. Si saco un mal resultado, yo ser¨¦ el primero en renunciar de inmediato.
P. Amplios sectores del PSC interpretan el relevo electoral de Obiols como el primer paso para su sustituci¨®n como primer secretario.
R. Obiols desaparece del cartel electoral porque ¨¦l quiere. Por tanto, deducir que esto es la antesala de un cambio en la c¨²pula del partido me parece prematuro. Hasta despu¨¦s de las elecciones auton¨®micas y las legislativas, o viceversa, el PSC no se plantear¨¢ ning¨²n cambio que afecte a la direcci¨®n.
P. ?Descarta, entonces, la posibilidad de convocar. un congreso extraordinario para replantearse el liderazgo del partido?
R. Hoy por hoy no se prev¨¦ tal hip¨®tesis. Y yo, a t¨ªtulo personal, nunca me he planteado ponerme al frente de la direcci¨®n del partido.
P. Obiols duda si integrarse o no en su candidatura. ?Le resultar¨ªa c¨®modo a usted tener a sus ¨®rdenes en el grupo parlamentario al m¨¢ximo dirigente org¨¢nico del partido?
R. La lista contendr¨¢ elementos de renovaci¨®n y rejuvenecimiento y, sin llegar a concretar un gobierno en la sombra, se?alar¨¢ posibles ¨¢reas de responsabilidad de gobierno. Pero todo esto se plantear¨¢ con posterioridad. Ahora justo acabamos de elegir al candidato.
P. ?Qu¨¦ quiere decir usted cuando reclama que el candidato debe tener las espaldas cubiertas y el horizonte despejado?
R. Cuando dije eso, hace ya tiempo, me refer¨ªa a la necesidad de que el proceso de elecci¨®n del candidato fuese por el camino que ha ido finalmente. Hab¨ªa dudas y reticencias que disipar. Hab¨ªa que aceptar al candidato con todas sus caracter¨ªsticas personales. Y hab¨ªa que promover el consenso, la unidad y la cohesi¨®n en torno a ¨¦l. Hasta hoy todo eso ha sido as¨ª, y espero que a partir de ahora, en la elaboraci¨®n, del programa, la confecci¨®n de las listas, la creaci¨®n del equipo de campa?a y la definici¨®n de la estrategia electoral, el partido siga respaldando mis propuest¨¢s.
P. ?S¨®lo lo espera? ?Acaso no. lo tiene asegurado?
R. Hasta ahora se han cumplido mis previsiones y cuento con que seguir¨¢n cumpli¨¦ndose.
P. ?Qu¨¦ activo electoral, aporta usted al PSO
R. No puedo hablar con una certeza absoluta sobre m¨ª mismo. Me gustar¨ªa aportar estilo directo, franqueza, car¨¢cter llano, capacidad de comunicaci¨®n, voluntad de trabajo enorme, ganas de ganar, expectativas de hacer un buen papel y, sobre todo, una idea muy altruista de mi condici¨®n de candidato.
P. Las principales reticencias que su figura ha generado en sectores del PSC son debidas a su identificaci¨®n con el ala m¨¢s, nacionalista del socialismo catal¨¢n. Hay dirigentes preocupados por c¨®mo se desenvolver¨¢ usted entre el electorado obrero de origen inmigrante.
R. La gran aportaci¨®n patri¨®tica del PSC ha sido la s¨ªntesis entre el nacionalismo progresista, el catalanismo pol¨ªtico y las pol¨ªticas de corte igualitario. Si hay alguien que piensa que el catalanismo pol¨ªtico es excluyente de la liberaci¨®n social de la clase trabajadora y de su incorporaci¨®n a unos mayores niveles debienestar social, puede haber esas reticencias. Pero si es capaz de distinguir entre nacionalismo conservador, que concibe Catalu?a como un hecho inmanente, e inmutable, y catalanismo pol¨ªtico, que considera el hecho nacional omo algo cambiante y plural, no hay lugar para la reticencia ni laduda.
P. Usted ha propuesto reiteradamente revisar la Constituci¨®n y el Estatut para redefinir el marco de relaciones entre Catalu?a y el resto de Espa?a. ?C¨®mo deber¨ªa ser ese marco a su juicio?
R. Creo que es suficiente con el cumplimiento riguroso y maximalista de las previsiones del Estatut. El marco es el constitucional y el estatutario, y es dentro de ese marco donde una opci¨®n progresista de gobierno en Catalu?a ha de saber redefinir instituciones como, las diputaciones provinciales, los gobiernos civiles o los consejos comarcales. No se trata tanto de suprimirlas como de replantear su papel y adaptarlo a la realidad del Estado de las autonom¨ªas. Y esto mismo dicen, con otras palabras, el presidente Gonz¨¢lez y el ministro Belloch.
P. ?As¨ª, ya no cree necesario revisar la Constituci¨®n?
R. Hoy, tal como est¨¢n las cosas, no hace falta. S¨ª es preciso concluir el proceso de transferencias previsto en el Estatut.
P. El giro autonomista dado por el Gobierno socialista en los ¨²ltimos dos a?os, ?es fruto de la necesidad coyuntural de los votos de CiU o de una conversi¨®n sincera?
R. Creo que es la consecuencia de la asunci¨®n de las propuestas federalistas del PSC. Es m¨¢s, tal como est¨¢n las cosas, no hay en toda Espa?a nadie m¨¢s sinceramente convencido del hecho' nacional catal¨¢n que los m¨¢s altos dirigentes del PSOE.
P. ?No exagera usted?
R. En absoluto. Eso es as¨ª desde hace al menos tres o cuatro anos. Hoy no hay ning¨²n otro l¨ªder espa?ol que tenga tan claro como Felipe Gonz¨¢lez lo que debe ser la diferencia desde la igualdad que reclama Catalu?a.
P. Ese cambio de actitud del PSOE coincide curiosamente con el momento en que el Gobierno ha necesitado el apoyo de los nacionalistas catalanes...
R. No. El cambio se produjo antes de que el PSOE perdiese la mayor¨ªa absoluta. Antes de eso el PSOE ya hab¨ªa asumido las tesis federalistas del PSC. El apoyo de CiU al Gobierno no ha influido en todo esto, al menos dec¨ªsivamente.
P. ?Peca el PSC de complejo de supeditaci¨®n a los intereses del socialismo espa?ol.?
R. Creo que no. Como candidato vengo dispuesto a disipar, en la parte que me corresponde, todo tipo de complejos. Yo no tengo ning¨²n complejo al afirmarme como catalanista, no independentista y socialista, ni al decir que determinados sectores del socialismo han frustrado algunas expectativas del proyecto socialdem¨®crata al incurrir en pr¨¢cticas corruptas.
P. Los, pactos suscritos entre el PSC, IC y ERC en algunos ayuntamientos, ?pueden ser un ensayo para las elecciones auton¨®micas?
R. El c¨¢lculo sobre los pactos no se har¨¢ hasta conocer la nueva aritm¨¦tica parlamentaria; es decir, despu¨¦s de las elecciones, no antes.
P. ?Descarta de antemano pactar con alg¨²n partido?
P. Nada es descartable. Ni un pacto a la vasca [PNV-PSOE-Eusko Alkartasuna], ni a la madrile?a [PSOE-CiU], ni a la barcelonesa [PSC-IC-ERC].
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