El rey

M¨¢s de 2.000 personas abarrotaron y aplaudieron en pie a este gran artista que es Julio Bocca. Y es que el bailar¨ªn argentino ha sabido escoger su repertorio. Lamentablemente, el p¨²blico espa?ol no ha logrado verle en su fase actoral y en ballets neocl¨¢sicos de argumento. Aun as¨ª, el programa que ha ofrecido dentro del ciclo de ballet organizado por el Ayuntamiento de Madrid refleja su capacidad prism¨¢tica y su gran talento para cambiar tanto de estilo como de formato.Ahora, el chico de Buenos Aires puede sumar a todo esto otro m¨¦rito: el apoyo a los j¨®venes artistas de ballet de su. tierra. La peque?a agrupaci¨®n tiene un sentido de dar oportunidad para destacar, madurar y manifestarse a una veintena de muchachos y muchachas que apenas. han culminado sus estudios. Entre ellos abunda el talento y la buena t¨¦cnica, sobre todo, en las mujeres. Gran sorpresa la pujanza y rapidez de Estefan¨ªa Vallone, que da contrapartida a Bocca durante toda la velada.

Donizetti variations es la piedra angular pura de lo que se ha dado en, llamar la etapa italiana de Balanchine; la pieza se estren¨® concretamente en 1960 y no en 1961, como reza en el deficiente programa de mano. Balanchine hace un recuerdo estilizado de lo que dej¨® el rococ¨® en la t¨¦cnica acad¨¦mica: peque?os saltos sobre las puntas, r¨¢pidas bater¨ªas, brazos ligados y, sobre todo, un sentido musical alto y de continuidad.

Los Tangos es un buen ejercicio de estilizaci¨®n de los ritmos populares rioplatenses, y una buena estructura y colocaci¨®n de los n¨²meros independientes le concede a la pieza una cierta y agradable unidad. Finalmente, una suite del primero y el tercer acto de Don Quijote cerr¨® una agradable noche.

Don Quijote y su famoso pas de deux del tercer acto es una de las cartas de presentaci¨®n de Bocca a lo largo de su carrera. El bailar¨ªn conserva intacta su potencia y la posibilidad de redondear sus frases de giros m¨²ltiples con la facilidad que le caracteriza. S¨®lo esto mereci¨® la noche.