La moda pronta espa?ola busca la 'bendici¨®n de Par¨ªs' tras conquistar el mercado interior
Las empresas rechazan las acusaciones de plagio y afirman que adaptan tendencias
Comprar, usar y tirar. La filosof¨ªa de la moda pronta la que cambia de un mes a otro ha acabado por imponerse. Sus mejores reclamos son el precio y la capacidad para responder r¨¢pidamente a lo que el mercado demanda. Mientras al pr¨ºt-¨¢-porter espa?ol naufraga por falta de industria, unas cuantas cadenas se han hecho en los ¨²ltimos cinco a?os con el 30% del mercado del vestido, con un volumen de ventas de dos billones de pesetas. Catorce de estas empresas estar¨¢n en el. Sal¨®n de Moda Intemacional de Pr¨ºt-¨¤-Porter que se inicia ma?ana en Par¨ªs.
"Es una oportunidad ¨²nica para nosotros. En 100 a?os de existencia de este sal¨®n es la primera vez que la moda pronta va a estar representada", asegura Gonzalo Sese?a, empresario del barrio madrile?o de Vallecas y portavoz del grupo cuya marca es Moda Centro. La aventura de Par¨ªs les costar¨¢ 70 millones de pesetas, un 40% de los cuales ser¨¢n financiados por el IMADE (Instituto Madrile?o de Desarrollo).El sal¨®n parisiense el m¨¢s visitado, seguido de Mil¨¢n, Francfort y Nueva York se realiza dos veces al a?o. En la ?ltima edici¨®n, en febrero de 1995, un 53% de los expositores fueron franceses y lo visitaron m¨¢s de 70.000 personas.
A Par¨ªs, unos van a exponer, y otros a supervisar las ¨²ltimas tendencias y estudiar nuevas v¨ªas para su penetraci¨®n en el mercado internacional., Cadenas como Zara, Mango o Blanco, tres empresas de ra¨ªces familiares, pioneras en el sector ele la respuesta r¨¢pida, acuden a estos eventos como visitantes. Prefieren dar a conocer sus creaciones a trav¨¦s de sus tiendas.
Un concepto nuevo como el de la moda para usar y tirar necesitaba una nueva estructura industrial capaz de surtir las tiendas en un tiempo r¨¦cord. El empresario gallego, Amancio Ortega, sabe que uno de los secretos del ¨¦xito de Zara consiste en no acumular stocks ni en las tiendas ni en las f¨¢bricas. "Producimos lo, que se pide y no m¨¢s", explic¨® Antonio Merino en nombre de Inditex, la empresa de confecci¨®n del grupo. "Tenemos un equipo de 40 personas que son las encargadas de visitar las ferias y de dise?ar nuestra moda. En 15 d¨ªas podemos poner en las tiendas cualquier prenda".
Los inicios de un emporio Amancio Ortega empez¨® fabricando batas de se?ora y abri¨® la primera tienda de Zara en La Coru?a en 1975. Cuatro a?os despu¨¦s se constitu¨ªa Inditex, SA, un grupo diversificado de compa?¨ªas cuyas actividades se desarrollan a escala intemacional. Su plantilla, supera las 6.500 personas y dispone de m¨¢s de 400 establecimientos propios en todo el mundo. Un contacto permanente con las tiendas -las hay en Portugal, Francia, Estados Unidos, Grecia, M¨¦xico y B¨¦lgica- les perimte conocer por d¨®nde van los gustos de sus clientes. Los establecimietos se abastecen dos veces por semana en funci¨®n de esas necesidades.
El emporio Zara genera un volumen anual de facturaci¨®n (le 174.000 millones de pesetas. En Europa s¨®lo les adelanta Benetton y en EE UU la cadena Gap. Son los l¨ªderes del sector y los m¨¢s reservados a la hora de facilitar informaci¨®n sobre sus empresas que no est¨¦ incluida en el dossier de prensa: "Nuestro objetivo es vender no vendernos".
Al calor de Zara surgieron otras muchas empresas. En los primeros puestos en lo que a venta se refiere se sit¨²a Mango, una cadena con 133 tiendas en Espa?a y 31 en el extranjero. Sus propietarios, los hermanos Andic, jud¨ªos de origen turco, empezaron vendiendo camisas en las ramblas barcelonesas. Ahora trabajan sobre una colecci¨®n inicial de primavera o invierno que se va renovando con prendas nuevas cada dos semanas. Est¨¢n comunicados por modem con todas sus tiendas lo que les permite conocer en cada momento lo que se vende y lo que hay que reponer en sus establecimientos de Taiwan, Puerto Rico o Israel. Mar¨ªa Antonia Piqu¨¦, del departamento de relaciones p¨²blicas, reconoce que sus clientes son mujeres de 16 a 40 a?os: "Gente que cambia de vestuario por temporada, que prefiere ir renovando su fondo de armario a comprar prendas muy caras que tambi¨¦n acabar¨¢n pasando de moda". "El ¨¦xito pasa por conjugar la relaci¨®n calidad-precio. Nuestro equipo de dise?o acude a ferias y pasarelas y se empapa de tendencias que luego transforman seg¨²n el gusto de la mujer espa?ola", dice Piqu¨¦. Una vez realizado el dise?o se cortan los Patrones de la prendas y se env¨ªan a f¨¢bricas que no son de su propiedad y que est¨¢n situadas en Espa?a, Portugal, India o Taiwan.
Una moda tan rabiosamente actual necesita renovarse d¨ªa a d¨ªa. Claudia Schiffer fue la temporada pasada la cara publicitaria de esta cadena. Claudia ha sido sustituida en los cat¨¢logos y en la publicidad de las marquesinas por Karen Ferrari. "Necesit¨¢bamos una imagen m¨¢s fresca", dice Piqu¨¦ se?alando a una jovenc¨ªsima inglesa rubia de ojos claros. Karen luce un inicio de colecci¨®n de invierno cargada de colores sobrios y de prendas no excesivamente lanzadas: chaquetas entalladas, pichis, chalecos y camisas de popel¨ªn. Los precios oscilan entre las 2.000 y las 10.000 pesetas.
El estilo Kate Moss y Johnny Depp
Lo que se lleva hoy ser¨¢ la prehistoria ma?ana. Bernardo Blanco, un empresario bilba¨ªno de 58 a?os, al que se puede calificar como el inventor de la moda r¨¢pida espa?ola, lo comprendi¨® enseguida. El fue el pionero en medio del desierto eh el que se mov¨ªa Espa?a en los, a?os setenta. Sus tiendas en la madrile?a calle de Vel¨¢zquez y en la Diagonal barcelonesa causaron furor en los a?os del franquismo. "En alguna ocasi¨®n tuvimos que cerrar las tiendas porque no cab¨ªa m¨¢s gente", asegura Bernardo Blanco junior y en alguna ocasi¨®n se hizo necesaria la presencia de la polic¨ªa para contener a las quincea?eras.Padre e hijo recorren ferias, asisten a los desfiles de Jean Paul Gaultier o de Armani y adquieren la ropa que les gusta en, la calle 8 de Nueva York o en la londinense Kensington. De vuelta a Madrid reproducen lo que han comprado "con algunas modifiCaciones", reconoce este empresario cle 28 a?os al que no se le caen los anillos cuando se- le habla de copias: "?Y qui¨¦n no?". Las ideas aportadas por las tiendas son tan importantes como la ropa que lucen actores y cantantes de moda entre las nuevas generaciones. Blanco reconoce que lo ¨²ltimo en moda para jovencitas son la pareja formada por Kate Moss y Johnny Depp y la actriz Drew Barrymore.
Trabajan con tejidos propios- "un 80% procede del mercado nacional y el resto lo importan de Corea"- En las perchas de una de las tiendas madrile?as cuentan con 15 en toda Espa?a) se ven pantalones de piel de serpiente o minivestidos el¨¢sticos en tejidos plateados. El p¨²blico del local lo componen, sobre, todo, mujeres menores de 30 a?os.
Babelia
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