"La UE aumentar¨¢ las ayudas a los pescadores afectados por el amarre"

Hace un a?o por estas fechas, el ministro de Agricultura y Pesca, Luis Atienza, era centro de la actualidad ante los graves enfrentamientos producidos entre Francia y Espa?a por la costera del bonito. Este a?o, la costera se est¨¢ desarrollando en un clima de total normalidad y con importantes capturas. Sin embargo, Luis Atienza se ha convertido nuevamente en centro de pol¨¦mica tras el fracaso de la sexta ronda, de las negociaciones con Marruecos para la renovaci¨®n del acuerdo pesquero y ante la existencia de una flota que lleva amarrada desde hace cuatro meses.Pregunta. Cinco meses de conversaciones no han servido para lograr ning¨²n avance que, renueve el acuerdo pesquero, ?c¨®mo valora la actitud de Marruecos en estas negociaciones?

Respuesta. Para m¨ª, la actitud de Marruecos ha sido claramente decepcionante. Lo digo desde el pleno respeto a la soberan¨ªa marroqu¨ª sobre la gesti¨®n de sus propios recursos y del privilegio, incluso, de equivocarse. Pero creo que en estas conversaciones no han sido capaces de captar el escaso margen de maniobra que tiene la UE en el ¨¢mbito puramente pesquero. Han mantenido unas postura que, tanto por sus exigencias como por el m¨¦todo, conduc¨ªa a un bloqueo de las negociaciones. Frente a una posici¨®n de concesiones y, flexibilidad, Marruecos no ha hecho un solo movimiento en una actitud que no acabo de entender desde el punto de vista de sus intereses globales.

P. Aunque los responsables del sector han mostrado su apoyo a la Administraci¨®n, hay una sensaci¨®n general de que Marruecos ha tomado el pelo a Espa?a.

R. Es una actitud comprensible por parte del sector. Pero, por encima de esta situaci¨®n coyuntural, yo soy decidido partidario de potenciar e intensificar las relaciones de todo tipo con Marruecos para contribuir a su desarrollo. Todos tenemos inter¨¦s en avanzar en m¨²ltiples campos. Es la voluntad del Gobierno y espero que esta voluntad sea compartida por las autoridades de ese pa¨ªs, por encima de los recelos del pasado. Pero, est¨¢ claro que esa pol¨ªtica de intensificar las relaciones no se puede hacer sobre la base de una flota desguazada. Y, en este punto, nuestra posici¨®n va a ser muy firme en la negociaci¨®n pesquera. Es algo que deber¨ªa entender Rabat por la importancia que para nosotros tiene la actividad de la flota que faena en esas aguas. La pesca deber¨ªa ser un elemento de uni¨®n y no de desuni¨®n entre los dos pa¨ªses.

P. ?Qu¨¦ razones pueden, haber empujado a Marruecos para adoptar esta dureza?

R. Las relaciones entre la UE y Marruecos en los ¨²ltimos tiempos no han sido muy fluidas. Se han producido muchos recelos, muchas reticencias, acciones de la UE que no han tenido una gran receptividad por Marruecos y que han impedido avanzar en el acuerdo de asociaci¨®n , como se ha hecho, con T¨²nez o Israel. En este contexto, la pesca ha sido un reflejo claro del deterioro de esas relaciones.

P. ?Estima que la UE ha utilizado todos los medios a su alcance para presionar a Marruecos?

R. La UE ha mantenido una actitud correcta en el proceso negociador. Es probable que antes de la llegada de Emma Bonino [comisaria de Pesca], la Comisi¨®n transmitiera un mensaje equivocado a Marruecos, que entendieran que hab¨ªa una disposici¨®n a reducir la flota. Tras la llegada de la comisaria, la posici¨®n de la UE no ha admitido dudas.

P. ?Hasta qu¨¦ punto inversores comunitarios en Marruecos hacen que Bruselas no juegue todas sus cartas en favor de la pesca frente a la intransigencia de Rabat?

R. Hay importantes grupos inversores comunitarios en Marruecos, pero no veo que esos intereses puedan crear fisuras en el conjunto de los Quince. Hasta ahora no han existido diferencias entre los pa¨ªses miembros en este punto; todos han respaldado la actitud de suspender las negociaciones por la falta de flexibilidad de Marruecos.

P. ?C¨®mo es posible que Marruecos, un pa¨ªs que llama a las puertas de la UE para un acuerdo de asociaci¨®n del que est¨¢n pendientes docenas de miles de millones de pesetas, pueda apostar con tanta intransigencia?

R. Posiblemente ha sido solamente un mal c¨¢lculo de las autoridades de Marruecos sobre hasta que punto est¨¢bamos decididos a defender la posici¨®n de nuestra flota, aunque nos lleve a un deterioro de las relaciones. que no deseamos en absoluto.

P. ?Definitivamente se incluir¨¢ la pesca como una parte m¨¢s en el acuerdo de asociaci¨®n con Marruecos?

R. No es posible avanzar en el acuerdo de asociaci¨®n si no se avanza en el acuerdo pesquero. En este momento, por razones de calendario, la pesca tiene que ser una parte m¨¢s de esas negociaciones globales con Marruecos, aunque formalmente no se incluya en un mismo acuerdo. Marruecos no puede pedirnos que respetemos sus exportaciones tradicionales al mercado comunitario y, a la vez, exigir un ajuste traum¨¢tico de la flota que opera en sus caladeros. Por otro lado, tampoco podemos plantear una reducci¨®n dr¨¢stica de las exportaciones de Marruecos al mercado comunitario y exigir mantener toda la flota en esas aguas.

P. ?Hasta cu¨¢ndo es posible mantener esta actitud?

R. Hasta el m¨¢ximo. No es posible ahora establecer un calendario; pero yo espero que, con la reanudaci¨®n de las negociaciones para el acuerdo de asociaci¨®n, se pueda retomar el di¨¢logo con bases constructivas. Habr¨¢ una s¨¦ptima ronda, aunque sea una negociaci¨®n paralela a los otros temas del acuerdo de asociaci¨®n. Corresponde a la Comisi¨®n definir ese proceso. Yo creo que ese compromiso final se podr¨ªa lograr dentro de los pr¨®ximos dos meses cuando se inicien las campa?as de exportaciones agr¨ªcolas de Marruecos.

P. ?Qu¨¦ suceder¨ªa si no hay avances en el acuerdo de pesca en este tiempo?

R. No va a ser posible un acuerdo de asociaci¨®n sin un acuerdo en materia de pesca. No se romper¨¢ la solidaridad comunitaria. Espa?a bloquear¨ªa el acuerdo si la UE no engloba las negociaciones, se provocar¨ªa un impass en las relaciones con Marruecos y un claro deterioro de las mismas. No es un chantaje. Las bases de la colaboraci¨®n deben tener en cuenta todos los aspectos y la pesca es para nosotros un elemento irrenunciable.

P. ?Cu¨¢les ser¨¢n las nuevas ayudas de la UE?

R. La UE revisar¨¢ algunas partidas para proporcionar m¨¢s apoyo a la flota tanto a corto como a medio plazo para adaptar y modernizar la misma. Con car¨¢cter inmediato, las ayudas especiales que debe aprobar la UE ser¨¢n para aumentar el montante de los subsidios a los trabajadores del sector de la flota amarrada. Corresponde a los servicios de la Comisi¨®n decidir la cuant¨ªa de esas ayudas complementarias, cuyo pago podr¨ªa adelantarse por la Administraci¨®n espa?ola para que su pago sea lo m¨¢s r¨¢pido posible. Eso es lo m¨¢s importante. Queremos un sector tranquilo y unido que pueda esperar sin prisas el retraso de un acuerdo.

P. Los diferentes acuerdos pesqueros est¨¢n suponiendo recortes progresivos de las posibilidades de pesca, ?qu¨¦ se ha hecho para adaptar esa flota?

R. Somos conscientes de que no hay salidas para parte de la flota fuera de esas aguas. Por este motivo, se han realizado importantes esfuerzos para lograr una reordenaci¨®n de ese sector.

P. ?Se han puesto sobre la mesa los datos t¨¦cnicos para justificar ese recorte?

R. La UE apoy¨® siempre el funcionamiento de una comisi¨®n cient¨ªfica mixta para investigar la situaci¨®n de los caladeros y someternos a un arbitraje. Marruecos no acept¨® esa oferta por lo que no tenemos datos fiables sobre los recursos. Nuestros datos nos permiten afirmar que no hay un problema de gesti¨®n de recursos.

P. ?Se ha contemplado el hecho de que casi el 90% de las aguas en discordia las reclama la Rep¨²blica ?rabe Saharaui?

R. El acuerdo tiene siempre una cla¨²sula que no prejuzga la soberan¨ªa definitiva, pero Marruecos es hoy por hoy administrador del Sahara. Es un asunto saIvaguardado por la UE desde el punto de vista jur¨ªdico.