?Qu¨¦ hago con mi mala nota?

VIENE DE LA P?GINA 1Argumentan que hay alumnos con buena nota que renuncian a la carrera adjudicada. "Es cierto" cuenta la vicerrectora, "pero con eso ya contamos: siempre se ofertan m¨¢s plazas de las disponibles". Un alumno empe?ado en estudiar algo para lo que no le da la nota puede presentarse a la selectividad el a?o que viene. Siempre se le tomar¨¢ en cuenta la mejor de las notas obtenidas en cualquiera de las pruebas.

> Tengo nota, pero no me apunt¨¦. Puede pasar. Uno se da cuenta de que le gusta algo a ¨²ltima hora, o que olvid¨® una de las opciones para la que, a la vista del resultado de su examen, posee la nota m¨ªnima exigida. La vic¨¦rrectora, en este caso, es m¨¢s optimista: "Siempre que le d¨¦ la nota, es un caso a considerar. Ah¨ª s¨ª que recomiendo que reclame y que lo intente. ?ste es el caso de la Complutense, pero creo que en el resto de universidades tambi¨¦n obran de esta manera".

>Tengo nota para la privada. Las universidades privadas madrilenas a¨²n disponen de plazas. El precio var¨ªa seg¨²n las carreras y los centros. La media, unas 800.000 pesetas al a?o. Una soluci¨®n es estudiar primer curso en una universidad privada y luego intentar el salto a la p¨²blica. Para ello hay que aprobar todo el primer curso y, con el mejor expediente posible, apelar al decanato de la facultad en cuesti¨®n, bien en junio, bien en septiembre. Un tribunal decidir¨¢ cada caso, bas¨¢ndose en las notas y en los planes de estudio. Otra variante es estudiar en los centros adscritos, esto es, instituciones privadas cuyo t¨ªtulo est¨¢ convalidado con una universidad p¨²blica. La Compl¨²tense cuenta con seis de estos colegios, que vienen a costar, aproximadamente, de 30.000 a 60.000 pesetas al mes. Eso s¨ª, si uno, tras entrar en uno de estos centros, decide seguir en una universidad p¨²blica, tendr¨¢ que haber aprobado, al menos, tres a?os. La ventaja, que los planes de estudio son los mismos que los de la universidad a la que pertenece el colegio.

> Tengo nota para otra. Muchos estudiantes piensan que basta entrar en una carrera cualquiera para luego, al a?o siguiente, dar el salto autom¨¢tico a su preferida. Falso. Para entrar en la deseada se tendr¨¢ que competir con los que hagan la selectividad el a?o que viene en igualdad de condiciones. Es una opci¨®n muy utilizada: muchos alumnos estudian, con la intenci¨®n de no perder un a?o, un curso de algo que les da igual pero para lo que disponen de nota. Esto crea un efecto perverso de tipo domin¨®: alumnos que estudian algo que no quieren y que impiden, al ocupar, esas plazas, el acceso de otros que s¨ª que poseen vocaci¨®n.

>Tengo nota pero no salgo. Se dan casos en que, aun obteniendo la nota de exigida no se aparece en la carrera deseada. La reclamaci¨®n es pertinente. Si se trata de un error, se subsanar¨¢, seg¨²n los responsables universitarios. Para reclamar, hay plazo hasta el pr¨®ximo d¨ªa 13.