Los mapas de carreteras, a la basura
, Lo mejor que podr¨¢ hacerse con los mapas de carreteras ser¨¢ tirarlos a la basura. Cualquier coincidencia de sus indicaciones con las que aparecen en las carreteras ser¨¢ una ficci¨®n. El actual caos de pictogramas se quedar¨¢ corto con el que se avecina.Un forastero en Girona pensar¨¢, al observar las matr¨ªculas de los veh¨ªculos, que unos son de la capital y otros de otra provincia. O que sus propietarios se dividen entre partidarios del catal¨¢n o del castellano. Nada de eso es cierto. En realidad que unos vayan con el anagrama GE y otros con el GI no quiere decir nada m¨¢s que los primeros son viejos y la matr¨ªcula de los ¨²ltimos responde a la aplicaci¨®n de la toponimia oficial catalana a las matr¨ªculas de la provincia, adoptada hace unos a?os.
Pero adem¨¢s, si alguien se queda tirado en una carretera y dice "te llamo desde una gasolinera en el kil¨®metro 54 de la carretera GI-320", y no aporta alg¨²n dato adicional, es imposible saber si el percance ocurri¨® en una carretera de Guip¨²zcoa o de Girona, distantes entre s¨ª nada menos que 600 kil¨®metros.
Si se recurre al mapa tampoco ¨¦ste ayuda a desvelar el misterio. Antes se acostumbraba a identificar las carreteras principales del Estado en rojo, lo que no es mucha ayuda para el conductor, ya que poco le importa qu¨¦ instituci¨®n es la responsable de su conservaci¨®n y mantenimiento. En su mismo nivel de calidad ahora se encuentran otras muchas de color salm¨®n, lo cual significa que dependen de las comunidades aut¨®nomas. Las de color verde, ?son de mayor o menor rango?, y las de color. amarillo... ?Est¨¢n todas asfaltadas? ?Son municipales o provinciales?
Pero no acaba ah¨ª la Babel de los signos convencionales. La Junta de Andaluc¨ªa -como otras autonom¨ªas- est¨¢ actualizando el inventario de sus carreteras transferidas y procede a denominar itinerarios con nuevas siglas. La que une Sevilla con la Costa del Sol por Ronda se llamar¨¢ A-473, que resulta coincidir con las carreteras hist¨®ricas SE-401, C-432, SE-434, SE-441, CA-441, N-342 y C-339. Jes¨²s R. Izarzugaza, de la Direcci¨®n General de Tr¨¢fico, observa que esa misma carretera andaluza se solapa con otra auton¨®mica, la A-382 entre los puntos kilom¨¦tricos 72 al 87, por lo que en este tramo lleva la placa correspondiente al A-473, al ser ¨¦ste el itinerario principal.
El propio Izarzugaza, ponente en el XIII Symposium Nacional de V¨ªas y Obras de la Administraci¨®n Local, anot¨® cuando circulaba por la carretera C-415 de camino a la poblaci¨®n manchega que de pronto se llamaba C-412 sin que hubiera ninguna evidencia externa de que cambiaba de ruta. Cuando Castilla La Mancha actualice su inventario de carreteras volver¨¢ a cambiar de nombre: CM-XXX. Hay quien va m¨¢s deprisa: en 12 a?os de vigencia auton¨®mica, Castilla y Le¨®n llamar¨¢ a sus carreteras con una C, cuando empez¨® llam¨¢ndolas CL.
El rizo lo completa Ibiza, que ha bautizado a sus carreteras con una E (de Eivissa, en catal¨¢n), cuando esa letra se reserva a las que indican grandes itinerarios europeos, seg¨²n el Protocolo de las Naciones Unidas.
Para no ser menos, los mojones kilom¨¦tricos, carteler¨ªa de direcciones y se?alizaci¨®n van a su aire; las indicaciones de peque?as poblaciones tienen a veces mayor tama?o que la de grandes capitales o aeropuertos (la de Foronda en Vitoria), no existe proporci¨®n ni rango entre ellas... "Peor no podemos estar; eso indica por d¨®nde van los criterios de renovaci¨®n en este pa¨ªs", se lamenta el dise?ador Enric Satu¨¦, autor de la se?alizaci¨®n del aeropuerto de Sevilla y los museos Thyssen de Madrid y Pedralbes en Barcelona. "Habr¨ªa que tener en cuenta dos elementos: el dise?o de pictogramas y direcciones y su sistematizaci¨®n y coordinaci¨®n con todas las autonom¨ªas", dice.
Satu¨¦, como la mayor¨ªa de usuarios, se siente estupefacto cuando circula por una carretera siguiendo una indicaci¨®n y "de pronto, cuando esperaba la siguiente me doy cuenta de que me he desviado por donde no deb¨ªa". "Tan importante es el programa de aplicaci¨®n como el grafismo, pero ?qu¨¦ se puede esperar cuando se ven matr¨ªculas con la S del rev¨¦s? Todo esto es demencial", dice. En su opini¨®n, es necesario que se unifiquen criterios. "Esa educaci¨®n ?franquista? de mostrarse todo el mundo diferente... Como cuesti¨®n previa, deber¨ªa intervenir alg¨²n profesional con experiencia en el manejo del repertorio tipogr¨¢fico en funci¨®n de la legibilidad, el tama?o, y familia de las letras, as¨ª como su efecto psicol¨®gico sobre los usuarios, de manera que la rotulaci¨®n sea coherente y contribuya a que no se maten en las carreteras", asegura.
El dise?ador catal¨¢n atribuye a las se?alizaciones y pictogramas un papel fundamental de servicio a los conductores y usuarios. En su opini¨®n "debe facilitar su orientaci¨®n e informar de una manera clara, visible, segura e inmediata". Frente a este criterio destaca la subsistencia "absolutamente anacr¨®nica" de s¨ªmbolos como el de un tren de vapor para indicar un paso a nivel: "?Qu¨¦ indica, un museo ferroviario o un parque infantil?" O el de un se?or con sombrero en los sem¨¢foros para peatones. "Yo los miro y digo: '?se no soy yo', ?qu¨¦ dir¨¢ una mujer!".
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