Rusia y los Balcanes

UNA COMPLEJA, negociaci¨®n en Belgrado a cuatro bandas Estados Unidos, Rusia, Serbia Pale abri¨® ayer la puerta a una retirada de las armas pesadas de las milicias serbobosnias en tomo a Sarajevo, seg¨²n anunci¨¦ la, Casa Blanca. En un gesto de buena, voluntad la OTAN decret¨® una pausa en los bombardeos contra esas milicias. Bor¨ªs Yeltsin tambi¨¦n tuvo un detalle tranquilizador y se neg¨® a firmar el decreto Aprobado por la Duma para el levantamiento unilateral del embargo contralos serbios. La tensi¨®n entre los, occidentales y los eslavo s rusos y serbios baj¨® unos grados tras unos d¨ªas de constante subida. En paralelo a la- negociaci¨®n de Belgrado, Strobe Talbott, secretario de Estado adjunto norteamericano, intent¨® ayer en Mosc¨² convencer a las autoridades rusas de que los occidentales no desean que las diferencias sobre Bosni¨¢ terminen lesionando una relaci¨®n estrat¨¦gica important¨ªsima para la seguridad, mundial. El enviado especial de CIinton encontr¨® la comprensi¨®n de Andr¨¦i K¨®zirev, el ministro ruso de Asuntos Exteriores, que, a diferencia de Yeltsin, que la pasada semana acus¨® a la OTAN ?le expansionismo y evoc¨® la posibilidad de extensi¨®n de la guerra por todo el continente, reitera que Rusia no quiere volver -a una - situaci¨®n de "enfrentamiento total con Occidente.Pero. la moderaci¨®n de K¨®zirev., calificado de "ministro de la Desgracia Nacional" por el l¨ªder comunista Gennadi Zyuganov, no compartida por la mayor¨ªa de sus compatriotas. Los rusos sienten los bombardeos de la OTAN contra los serbios como la gota que desborda el vaso de su frustraci¨®n por lo que entienden como p¨¦rdida de su papel de gran potencia. En algunos- sectores militares y en los medios pol¨ªticos nacionalistas y comunistas se vive como un agravio a su dignidad.

El mi¨¦rcoles, uno o. varios. desconocidos dispara-, ron una granada contra la Embajada de Estados Unidos en Mosc¨². La autor¨ªa y el motivo de ese atentado son a¨²n- desconocidos, pero pocos dudan que est¨¢ vinculado con el aumento de la. hostilidad hacia Occidente. El calificativo de "genocidio" que el Gobierno -ruso aplica a los bombardeos, de la OTAN es disparatado. Si algo limita la eficacia militar de esas acciones, es, precisamente, la voluntad de la OTAN de no provocar bajas, civiles, lo que lleva a no atacar el armamento y los dep¨®sitos de municiones estrat¨¦gicamente colocados por el general MIadic entre la poblaci¨®n.

La credibilidad de. la ofensiva militar y diplom¨¢tic¨¢ liderada por Estados Unidos para conseguir la paz en Bosnia depende del cumplimiento de las exigencias de la ONU sobre el levantamiento del cerco de Sarajevo y la seguridad de otras ciudadanos. Pero una excesiva prolongaci¨®n de las acciones a¨¦reas no puede sino radicalizar a, los rusos. Yeltsin, que acaba de comenzar un nuevo periodo de descanso, podr¨ªa terminar firmando la propuesta de la Duma que ayer rechaz¨® rubricar sobre el levantamiento del embargo a Serbia. Tambi¨¦n podr¨ªa poner en cuesti¨®n la Asociaci¨®n para la Paz con la OTAN. Si se quiere intentar desactivar esa bomba, hay que buscar la complicidad de los rusos: darles m¨¢s informaci¨®n. sobre los planes de la OTAN, insistirles para que usen su influencia sobre los serbios para que retiren sus armas de los alrededores de Sarajevo, proponerles que se incorporen a 1 una futura fuerza de pacificaci¨®n... Parece que ayer se dieron pasos significativos en esa direcci¨®n.

Aun as¨ª no es seguro que logre eliminarse la sensaci¨®n de humillaci¨®n y de dependencia resto a Occidente que arrastran los rusos desde el hundimiento de la URSS, y que se est¨¢ convirtiendo en protagonista: de la campa?a para las elecciones legislativas rusas del 17 de diciembre. El comienzo de esa campa?a se est¨¢ caracterizando por las grandes expectativas de la oposici¨®n comunista y nacionalista y el anuncio de un mal resultado de los partidos liberales y reformistas. Tambi¨¦n por la presencia de generales en casi todas las listas. Mientras cunde el escepticismo respecto ala Presidencia el Gobierno y el Parlamento, el Ej¨¦rcito es la instituci¨®n que tiene mayor credibilidad,en la Rusia actual. Muchos rusos sue?an con. un hombre fuerte que restablezca el orden en el interior y el prestigio de- su pa¨ªs en el exterior. Habr¨¢ que ver si las urnas respaldan esta impresi¨®n mayoritaria.