Voces, hipnosis y recompensas en una investigaci¨®n de dos a?os
Anabel Segura fue secuestrada en La Moraleja, la urbanizaci¨®n de Alcobendas donde resid¨ªa, el 12 de abril de 1993; un lunes festivo. Ten¨ªa 22 a?os. Ayer, la polic¨ªa buscaba su cad¨¢ver en la provincia de Toledo. En medio, han transcurrido dos a?os y medio de una laboriosa investigaci¨®n policial en la que se lleg¨® a controlar a 200 sospechosos sin ning¨²n ¨¦xito y a desechar otras 800 pistas.La polic¨ªa recurri¨® a estrujar al ¨²nico testigo de la captura, el jardinero del colegio Escandinavo, Antonio B., que a las 14.50 de aquel lunes vio de refil¨®n como se alejaba una furgoneta blanca en la que Anabel fue obligada a entrar por la fuerza mientras correteaba por la colonia Intergolf. Antonio fue sometido a una sesi¨®n de hipnosis para hurgar en su memoria y obtener alg¨²n dato que los investigadores pudieran aprovechar para resolver el caso. "Me hicieron mil preguntas, incluso me dijeron que dijese n¨²meros a boleo, creo que era para ver si consegu¨ªan la matr¨ªcula", declar¨® por despu¨¦s.
Los secuestradores llamaron a la familia en trece ocasiones, seg¨²n el portavoz de la familia, Rafael Escudero. La primera, dos d¨ªas despu¨¦s de la desaparici¨®n. En aquella comunicaci¨®n, los secuestradores reclamaron 150 millones para liberar a la joven. El padre, Jos¨¦ Segura N¨¢jera, director de Lurgi Espa?ola, empresa que construye naves industriales, ten¨ªa el dinero a punto tras hipotecar su casa y pedir ayuda a sus amigos. Pero la negociaci¨®n con los delincuentes no dio ning¨²n resultado positivo. No fue posible el canje.
Todas las estrategias siguientes fallaron: La familia contact¨® con empresas extranjeras especializadas en el pago de rescates mientras la Guardia Civil rastreaba Asturias o Toledo. Se emitieron las voces de los presuntos secuestrados, en un intento desesperado por obtener alguna pista definitiva. Tambi¨¦n hab¨ªa recompensa. Se ofreci¨® primero 15 millones y finalmente hasta 60 millones por una pista. Se dibuj¨® un perfil para poner cara a aquellas voces: unos 30 y 40 a?os y nivel intelectual medio. El cabecilla era autoritario, en¨¦rgico, agresivo, con trabajo estable y un fuerte desprecio por la polic¨ªa.
Manifestaciones
El secuestro moviliz¨® la solidaridad en Alcobendas, municipio al que pertenece La Moraleja. El 29 de noviembre de 1993 se celebr¨® la primera manifestaci¨®n por la liberaci¨®n de Anabel. En abril, al cumplirse el primer aniversario del secuestro, cerca de dos mil personas se colocaban en el pecho los lazos amarillos que habr¨ªan de simbolizar el grito de libertad para la secuestrada. Alfonso Segura, t¨ªo de la secuestrada, aprovech¨® esta concentraci¨®n para dirigirse a los secuestradores y anunciarles que la familia manten¨ªa el compromiso de pagar el rescate. Todo fue in¨²til.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.