Will Eisner: "El c¨®mic debe servir para una mejor visi¨®n de la vida"

Will Eisner, uno de los m¨¢s importantes autores mundiales del c¨®mic, creador de Spirit en los primeros a?os cuarenta, y art¨ªfice de algunas de las mejores cr¨®nicas urbanas del g¨¦nero, ha alcanzado la edad de 78 a?os-"o eso aseguran los rumores" dice-, plet¨®rico de fuerzas, de ingenio y de creatividad, en plena forma f¨ªsica y con un cabal sentido del humor. Eisner, que lleg¨® a Gij¨®n para ser homenajeado en el 190 Sal¨®n Internacional del C¨®mic del Principado de Asturias, ha hecho gala desde su llegada a la ciudad de una sonrisa permanente.

Esta misma vitalidad se transmite a su obra: "El c¨®mic debe servir para que la gente tenga una mejor Visi¨®n de la vida, que es nuestro principal enemigo, porque estamos siempre en lucha permanente contra el paso del tiempo, siempre en el af¨¢n de sobrevivir y salir adelante".Este autor ha publicado 230 historias de Spirit y 13 novelas gr¨¢ficas, traducidas a multitud de idiomas, y durante 25 a?os ha hecho tambi¨¦n manuales mensuales para empresas y escuelas. En medio de tanta laboriosidad a¨²n encontraba ratos libres para descansar: "De vez en cuando me iba a dormir". Hoy vive en Florida con su esposa y mantiene una actividad creadora intensa.

Si con Spirit ("un luchador contra el crimen de clase media, una mera persona honrada que a veces se sorprend¨ªa a s¨ª mismo de lo que era capaz de hacer") Will Eisner se inmortaliz¨® como autor de personajes heroicos y muy populares, ahora sus preocupaciones tem¨¢ticas discurren por otros caminos. Admite que "el c¨®mic siempre necesitar¨¢ h¨¦roes", pero en su caso los impulsos de la creatividad le han llevado a reflejar en sus "novelas gr¨¢ficas" otras motivaciones que, siendo colectivas, son en cada caso ¨ªntimas e individuales y ligadas a los porqu¨¦s que han presidido la existencia humana desde el principio de los tiempos. "La condici¨®n del hombre", precisa, "su lucha para sobrevivir dentro de la sociedad; la diferencia entre el ser humano y el resto de los animales es que el hombre quiere saber el porqu¨¦".

La ciudad

Se trata, adem¨¢s, de obras claramente urbanas, como La avenida Dropsey, recientemente publicada en Espa?a, porque la ciudad ha sustituido a la selva como escenario de las grandes aventuras" y con un planteamiento siempre optimista, aunque no moralista "S¨®lo soy un observador que indica al lector cu¨¢l es la condici¨®n social para que ¨¦l saque sus conclusiones. Ni pretendo ni estoy capacitado para impartir moral. Eso es tarea de la Iglesia". Se corresponden, adem¨¢s, sus nuevos t¨ªtulos con el periodo de transici¨®n que vive en la actualidad la historieta: "Ha dejado de ser una novedad t¨¦cnica y le est¨¢ ocurriendo como ya pas¨® al cine cuando dej¨® de ser una innovaci¨®n. A partir de entonces su inter¨¦s empez¨® a centrarse en los contenidos, en la historia que narraba. Ahora pasa esto en el c¨®mic, en el que est¨¢ empezando a primar el texto sobre las ilustraciones. Yo me siento un escritor con im¨¢genes".No teme la competencia de los medios electr¨®nicos de comunicaci¨®n ni la inclinaci¨®n de las nuevas generaciones hacia la cultura audiovisual. "El texto impreso permite a cada lector un ritmo de lectura diferente y una sensaci¨®n de intimidad que no ofrecen los medios mec¨¢nicos. El c¨®mic seguir¨¢ existiendo dentro de 100 a?os".