La oposici¨®n cree que una guerra en el PP gallego alimenta el esc¨¢ndalo sobre Cui?a

Una parte del PP ha desatado una batalla interna por la sucesi¨®n de Manuel Fraga como presidente de la Xunta de Galicia, que ha contribuido a alimentar el esc¨¢ndalo por las actividades empresariales de la madre del n¨²mero dos de los populares gallegos, Xos¨¦ Cui?a. Esa fue la interpretaci¨®n Pol¨ªtica difundida ayer reiteradamente por el PSOE y el Bloque Nacionalista Galego (BNG) durante la comparecencia del propio Cui?a ante el Parlamento aut¨®nomo para que explicara las sospechas de favorecer a empresas de su familia.

El considerado delf¨ªn de Fraga reconoci¨® que en los ¨²ltimos cinco a?os el patrimonio de las empresas de su familia ha crecido notoriamente, pero lo atribuy¨® a la "competencia profesional" y no a su propia influencia pol¨ªtica, que asegur¨® no haber ejercido nunca en beneficio personal.Cui?a, consejero de Pol¨ªtica Territorial y Obras P¨²blicas de la Xunta, se defendi¨® de los ataques que ha recibido por la actividad empresarial de su madre, Isolina Crespo, de 73 a?os, que es accionista de cinco sociedades que surten habitualmente de material de construcci¨®n a obras contratadas por el Gobierno aut¨®nomo, entre otras entidades, p¨²blicas y privadas.

Cui?a asegur¨® tenazmente que desde hace ocho a?os est¨¢, desvinculado de esas f¨ªrmas, aunque en una ocasi¨®n cometi¨® el desliz de referirse a ellas como "mis empresas", por lo que pidi¨® disculpas. Al final, el hilo de su intervenci¨®n se bas¨® en una retahila de datos sobre la evoluci¨®n econ¨®mica de las sociedades.

En ning¨²n momento el consejero neg¨® que desde que ocupa este cargo la facturaci¨®n de las empresas de su madre haya aumentado en m¨¢s de un 500%, ni que ¨¦stas atravesasen por dificultades econ¨®micas a finales de los a?os 80.

Sin embargo, atribuy¨® el cambio de rumbo a la habilidad de sus directivos (su propio hermano) para adaptarse al mercado. "Ning¨²n gallego podr¨¢ decir que se ha levantado un tel¨¦fono en mi entorno para pedir un trato de favor a estas empresas", declar¨® en tono solemne.

La oposici¨®n no dud¨® de la legalidad de la relaci¨®n con la Xunta de las empresas de los Cui?a, pero puso en duda la moralidad y la conveniencia pol¨ªtica de esas actividades. Gran parte del discurso del PSOE y el BNG se dedic¨® a aventurar cu¨¢l ser¨ªa le reacci¨®n de los dirigentes nacionales del PP ante una actuaci¨®n similar de un miembro del Gobierno socialista. "?Qu¨¦ dir¨ªan ?lvarez Cascos o Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar?", se pregunt¨® Miguel Cortizo, del PSOE.

Los socialistas aludieron al hipot¨¦tico inter¨¦s de la direcci¨®n, nacional de los populares por descabalgar al delf¨ªn de Fraga con t¨¢cticas de guerra sucia, el nacionalista Francisco Trigo le espetaba: "Ha sido su partido el que ha criminalizado la vida pol¨ªtica y ahora usted mismo es v¨ªctima de ello".

Cui?a acab¨® declarando que a ¨¦l le disgusta la utilizaci¨®n de la "guerra sucia contra el adversario pol¨ªtico". A la comparecencia no asisti¨® el presidente de la Xunta, Manuel Fraga, de viaje en Irlanda.