"La independencia de los jueces est¨¢ a prueba de amenazas"
Joan Cremades, un valenciano de 45 a?os, es el presidente de la Audiencia Provincial de San Sebasti¨¢n desde hace m¨¢s de cuatro, Asegura que los jueces en Euskadi no tienen miedo ante las amenazas de ETA y su entorno y se muestra convencido de que la toga est¨¢ fabricada con un material resbaladizo: "Nuestra independencia est¨¢ a prueba de cualquier historia de amenazas o de invitaciones a la implicaci¨®n".Pregunta. ?Tienen miedo los jueces en el Pa¨ªs Vasco?
Respuesta. No. Adem¨¢s, cada d¨ªa hay m¨¢s estabilidad. Somos conscientes de que hay una tendencia clar¨ªsima hacia la normalizaci¨®n, que llegar¨¢ pese a quien pese. Es un proceso imparable.
P. ?Pueden verse condicionados los jueces en sus sentencias en Euskadi por tener que llevar medidas de seguridad especiales?
R. Nunca he pensada en ellas porque me asusta m¨¢s el hecho de Ilevar escolta, ya que me dar¨ªa sensaci¨®n de inseguridad. Creo que no tendr¨ªan por qu¨¦ verse afectados. Si nos amenazan es por nuestro trabajo y, curiosamente, aqu¨ª es m¨¢s gratificante porque recibimos palos de todos los lados. Por una parte, nos piden m¨¢s implicaci¨®n, colaboraci¨®n y complicidad. Por otra, te escriben carteles en los que se nos tacha de "perros". Nuestra independencia est¨¢ a prueba de cualquier historia de amenazas o de invitaciones a la implicaci¨®n.
P. Cuando un juez ve su nombre en unos carteles y se le amenaza, ?no le entran ganas de irse del Pa¨ªs Vasco?
R. Es un ser humano que no est¨¢ ajeno a la realidad social, un ciudadano del pa¨ªs donde est¨¢ trabajando. Y, en ¨²ltimo t¨¦rmino, es juez, un t¨¦cnico que tiene unas funciones muy espec¨ªficas que establece la Constituci¨®n. El tema de las amenazas a los jueces no puede ser diferente que el de las realizadas a los periodistas, a cualquier polic¨ªa o a cualquier ciudadano con un lazo azul.
P. ?Las amenazas que se han vertido contra el juez Justo Rodr¨ªguez le llevaron a pensar que deb¨ªa marcharse de Euskadi?
R. Se ha creado un gran equ¨ªvoco. Los acontecimientos han desvirtuado la realidad de lo que ha pasado aqu¨ª. Justo Rodr¨ªguez, desde el principio, quiso que la cuesti¨®n no trascendiera y nunca parti¨® de ¨¦l ninguna iniciativa para realizar una comisi¨®n de servicios. En otras instancias, y de forma precipitada, se realiz¨® esa oferta al magistrado de forma equivocada. La imagen incierta que se ha dado es que Justo Rodr¨ªguez tiene apariencia de pusil¨¢nime o cobarde cuando no es as¨ª.
P. Desde la consejer¨ªa de Interior se ha pedido a los jueces vascos sentencias m¨¢s duras contra el mundo de ETA.
R. Est¨¢ claro que en el Pa¨ªs Vasco la toga est¨¢ hecha de un material resbaladizo. Me creo la historia de Montesquieu de la separaci¨®n de poderes. Es necesaria una confrontaci¨®n entre el Poder Ejecutivo y el Judicial, pero nunca un enfrentamiento. La propia Constituci¨®n establece claramente la funci¨®n policial y la judicial. Lo que no se puede hacer como juez es proteger la seguridad ciudadana. Lo que ellos me presentan a m¨ª debo juzgarlo. Eso tiene que estar claro y cada uno debe asumir su papel.
P. ?A qu¨¦ cree que son debidas esas llamadas al orden a los jueces desde el Gobierno vasco?
R. Cuando desde un poder del Estado se pretende dar instrucciones a otro. poder del Estado es que falla la divisi¨®n de poderes. Existe entonces una p¨¦rdida de papeles o un asignar un papel a otro, con lo que aparecen palabras tan extra?as como c¨®mplice. La petici¨®n de penas m¨¢s duras es absurda porque estamos sometidos al principio de legalidad y al acusatorio.
P. ?Pueden existir jueces en las audiencias del Pa¨ªs Vasco que, por miedo, emitan sentencias favorables a los simpatizantes de ETA?
R. No detecto ahora eso. Si los hay, pues no nos favorecen a nadie. Si existen situaciones de ese tipo, merecen varios tipos de cr¨ªticas: la social, que se ejerce de manera m¨¢s o menos sana desde cualquier medio de comunicaci¨®n, y la disciplinaria, que ejerce el Consejo.
P. Las amenazas a los jueces en el Pa¨ªs Vasco han comenzado precisamente cuando ¨¦stos han empezado a juzgar delitos que est¨¢n relacionados con la violencia. En esta situaci¨®n, ?podr¨ªan llegar ¨¦stos a juzgar en alg¨²n momento delitos de terrorismo? R. Yo creo en el juez natural. Creo que el fen¨®meno terrorista genera una serie de problemas. Permite la creaci¨®n de legislaciones especiales, de tribunales como la propia Audiencia Nacional, y puede incluso generar elementos parapoliciales o situaciones como el GAL.
P. Una parte de la sociedad tiene la sensaci¨®n de que los j¨®venes violentos de KAS han estado actuando en las calles con cierta impunidad. ?Qu¨¦ responsabilidad tienen en ello los jueces?
R. Los jueces juzgan y hacen ejecutar lo juzgado y para eso hay que presentar al juez a esos j¨®venes autores de delitos. La sensaci¨®n de impunidad deriva a veces de una impotencia frente a la actuaci¨®n de grupos muy reducidos de gente que no tiene posibilidades de reinserci¨®n , porque ni tan siquiera est¨¢n insertados. Reconozco que puede haber sensaci¨®n de impunidad, pero la m¨¢quina de la Justicia no se para.
P. ?Qu¨¦ papel se les puede asignar a los jueces en un proceso de normalizaci¨®n?
R. El de ¨¢rbitro, el de protector de los derechos incluso de aqu¨¦llos que no los quieren y luchan contra un sistema de libertades.
P. ?Cree necesario un di¨¢logo con ETA para lograr la paz?
R. No lo s¨¦. No s¨¦ cu¨¢les son las consecuencias que puede tener hablar o no hablar en un momento determinado. Habr¨ªa que preguntarle al ciudadano vasco cu¨¢l debe ser el alcance de las negociaciones que puede haber, hasta d¨®nde se puede hablar y qu¨¦ es concretamente lo que se puede hablar.
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