289 muertos por un incendio en el metro de la capital de Azerbaiy¨¢n en plena hora punta
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Un total de 289 personas pereci¨® en el metro de Bak¨², la capital de la rep¨²blica de Azerbaiy¨¢n, a consecuencia, del incendio varios vagones, que se produjo el s¨¢bado por la tarde, en plena hora punta, en un t¨²nel entre dos estaciones del centro de la ciudad. Muchas v¨ªctimas murieron asfixiadadas o aplastadas y golpeadas a causa del p¨¢nico que cundi¨® en el interior del t¨²nel, donde el convoy se qued¨® parado. Otras personas murieron electrocutadas al asirse a cables de alta tensi¨®n o al pisar ra¨ªles en contacto con los cables. Entre los 269 heridos, 60 est¨¢n graves.
Aunque la hip¨®tesis de un acto terrorista no es descartable, habida cuenta de que en el ¨²ltimo a?o y medio se han producido dos atentados con bomba en el metro de Bak¨² a consecuencia de los que perecieron 20 personas, el ministro del Interior, Ramil Us¨²bov, la excluy¨® totalmente. y manifest¨® que el accidente se debi¨® a causas t¨¦cnicas. Seg¨²n la versi¨®n de la polic¨ªa local, el origen del incendio fue probablemente una chispa en un cable de un motor.Seg¨²n datos facilitados anoche, la comisi¨®n estatal investigadora tiene ya identificadas 232 de las 289 v¨ªctimas mortales, entre las que se incluyen 28 ni?os y 126 mujeres. Tres de los muertos eran personas que acudieron al tunel incendiado a rescatar a los pasajeros y perecieron asfixiados. No se descarta que la cifra final de fallecidos aumente ya que 60 de los 269 hospitalizados se encuentran en estado grave.
La cat¨¢strofe ocurri¨® en una hora punta, poco antes de las seis de la tarde, en un convoy atestado de gente que se desplazaba entre la estaci¨®n de Ulduz a la de Narim¨¢nov. Al parecer, el motor de uno de los vagones se incendi¨® cuando el tren se encontraba a unos 200 metros de la estaci¨®n de partida, y el maquinista par¨® el convoy: Casi de inmediato, un cortocircuito interrumpi¨® el suministro de luz en el t¨²nel, mientras el fuego se extend¨ªa por los vagones y el p¨¢nico cund¨ªa entre los pasajeros, que, sofocados por los gases y las llamas, trataron de abandonar el tren y huir en la oscuridad hasta la estaci¨®n m¨¢s pr¨®xima.
Gu¨¦nnadi Nikiferev, uno de los supervivientes, que viajaba en el primer vag¨®n, cont¨® que cuando el humo comenz¨® a extenderse, los pasajeros forzaron las puertas que se hab¨ªan quedado bloqueadas, y al abrirlas se precipitaron los unos sobre los otros. Una multitud de gente despavorida comenz¨® a correr por el t¨²nel en una lucha contra reloj y contra el humo, que provocaba v¨®mitos y asfixia. Los viajeros del segundo vag¨®n fueron menos afortunados que los del primero, seg¨²n contaba otro superviviente, ya que, al no poder forzar las puertas ni romper las ventanas, tuvieron que huir por el conducto de la ventilaci¨®n.
Pero los m¨¢s desgraciados fueron los viajeros que iban en fuero los vagones del centro del convoy, ya que vieron dificultada su salida por la confusi¨®n de la multitud presa del p¨¢nico.
Valent¨ªn Agu¨¦yev, portavoz de los bomberos del metro de Mosc¨², se?ala que el accidente pone de manifiesto el deterioro de las instalaciones p¨²blicas en los pa¨ªses ex sovi¨¦ticos, ya que los vagones en funcionamiento en el metro de Bak¨², que fue inaugurado en 1967, son particularmente inflamables.
Agu¨¦yev, al igual que la polic¨ªa, considera que el fuego pudo originarse en el motor y de ah¨ª propagarse por los vagones mediante el sistema de ventilaci¨®n. El portavoz de los bomberos recuerda que un accidente semejante ocurri¨® en Mosc¨² en 1987 cerca de la estaci¨®n de Paveletskaia. No hubo v¨ªctimas, seg¨²n dijo, porque el conductor dirigi¨® el tren hasta la estaci¨®n y todos los pasajeros salieron antes de que las llamas devoraran dos vagones en 12 minutos.
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