"Decir 'hay que echar al PSOE como sea' da votos al PP"
Este hombre es doctor en Filolog¨ªa Rom¨¢nica y profesor de Cr¨ªtica Literaria y Ling¨¹¨ªstica. Ha publicado cuatro novelas y dos libros de poes¨ªa. Ahora "toma notas" para otra novela. Es "de Gran¨¢". Tiene 52 a?os, cuatro hijos y est¨¢ divorciado. Este hombre se llama Felipe Alcaraz Masats, diputado de IU-IC, secretario general del Partido Comunista de Andaluc¨ªa (PCA) y miembro permanente de la comisi¨®n Ejecutiva de IU.Pregunta. Tiene usted fama de duro en el PCE...
Respuesta. Ja, ja, ja... No... Lo que ocurre es que, por una parte, yo soy muy fiel a las decisiones colectivas, porque creo que es el principio de que la de mocracia no se convierta en burocracia y de que no haya personalismos. Y, por otra parte, en Andaluc¨ªa tenemos la cultura de ver como punto de referencia, innegociable a determinados niveles, el programa. Tambi¨¦n, puede ser una t¨¢ctica el intentar dividirnos en duros y blando. Pero yo creo que hay un equilibrio bastante cristalizado, tanto en IU como en el partido.
P. El pr¨®ximo diciembre el PCE celebra su XIV Congreso, ?qu¨¦ diferencia habr¨¢ respecto al anterior?
R. Fundamental. En el XIII Congreso el debate gir¨® en tomo a la disyuntiva de disoluci¨®n o no del partido. Hoy esa disyuntiva est¨¢ superada y ahora nos enfrentamos a la necesidad de cumplir las funciones del partido que eran los de nuestra militancia en Izquierda Unida. Esa es de verdad nuestra estrategia. Y no es una careta electoral. Nuestra segunda funci¨®n es la de establecer la relaci¨®n con el movimiento obrero, porque somos parte de ¨¦l y fundadores de CC OO. Y todo con respeto hacia las dem¨¢s organizaciones, sin ¨¢nimo de apropiaci¨®n. Tambi¨¦n est¨¢ entre nuestras tareas la relaci¨®n con los movimientos sociales cl¨¢sicos y modernos, y la lucha ideol¨®gica y cultural. Eso es lo aprobado en el ¨²ltimo congreso, pero ha sido absorbido. por nuestra dedicaci¨®n a IU.
P. ?Tiene alg¨²n sentido un partido comunista en la actual sociedad espa?ola?
R. Nosotros hemos elegido un modelo singular de partido comunista. Se dec¨ªa que tendr¨ªamos que elegir entre el modelo sovi¨¦tico o el italiano. El tiempo ha demostrado que eso no tenia por que ser as¨ª. Vamos, que no hemos seguido ninguno de estos modelos. Cada vez que se nos defiene como comunistas, nosotros siempre a?adimos: comunistas espa?oles. Tenemos una especificidad hist¨®rica y cultural, sobre todo desde que en el congreso de Sevilla, en 1934, entran en la direcci¨®n Pepe D¨ªaz y Dolores Ibarruri. Una concepci¨®n absolutamente plural. Frente Popular, pacto por la libertad, reconciliaci¨®n nacional, creaci¨®n de Comisiones Obreras y de Izquierda Unida... ?stas han sido las dos grandes creaciones del PCE.
P. ?Y, no existe la tentaci¨®n de convertirlas en los brazos pol¨ªtico y social del PCE?
R. No, porque ya somos minoritarios en ambas organizaciones.
P. ?Minoritarios?
R. Si, s¨ª. Somos minoritarios en CC OO. Y, en Andaluc¨ªa, por ejemplo, somos minoritarios en IU. El PCA tiene 13.000 afiliados e IU tiene m¨¢s del doble. Otra cosa es que tengamos m¨¢s capacidad de convicci¨®n, m¨¢s capacidad de generar una argumentaci¨®n que unifique social y pol¨ªticamente... eso es otra cosa. Pero... lo de la correa de transmisi¨®n se empez¨® a cuestionar en los comunistas espa?oles hace muchos a?os. Nosotros, eso s¨ª, tenemos una pol¨ªtica respecto al movimiento obrero. Desde que se cre¨® el partido en 1920 pensamos que somos parte del movimiento obrero y creemos que sindicalmente tiene que organizarse pensando en las reivindicaciones concretas, pero que defender al movimiento obrero tambi¨¦n implica correlaciones de fuerza que tienen referencia electoral. Nuestra pol¨ªtica sindical tiene una matriz de cambio de la sociedad.
P. Pero hay quejas de la actual direcci¨®n de CC OO sobre la injerencia del PCE, y, especialmente, de los comunistas andaluces.
R. Yo creo que eso se va disolviendo una vez que el debate se ha iniciado. No todos los comunistas tienen la misma posici¨®n en CC OO. Por lo tanto no hay injerencia. Lo que ocurre simplemente es que nosotros tenemos una pol¨ªtica, respecto al movimiento obrero, y tenemos derecho a expresarla. Y la expresamos. Y eso genera agrupamientos en el debate. Se confunde la autonom¨ªa sindical con la libertad en el debate. Da la sensaci¨®n de que hay miedo al debate. Y el debate es libre. Otra cosa es que no se respetaran los estatutos de CC OO. Pero eso no es as¨ª... Tambi¨¦n el PSOE se re¨²ne para orientar el debate en CC OO. Hay veintitantos miembros del PSOE en la direcci¨®n de CC OO y tambi¨¦n ellos se re¨²nen para ver qu¨¦ hacen... Adem¨¢s, que nosotros en Andaluc¨ªa nunca hemos acusado a la direcci¨®n de CC OO o de UGT de injerencia cuando nos han dicho que hay q ue llegar a un acuerdo con el PSOE o que hay que firmar los Presupuestos de la Junta... nunca hemos tachado esas cosas de injerencia. Ni nunca hemos tachado de injerencia que ciertos dirigentes de CC OO hayan dado la batalla por ser candidatos de IU. Cuando hay miedo al debate se inventan fantasmas como ¨¦ste.
P. Parece que ustedes est¨¢n cambiando su discurso, aflojando la pinza sobre el PSOE.
P. La sensaci¨®n que yo tengo no es que vayamos a cambiar de t¨¢ctica o estrategia, ni, que vayamos a moderar el discurso, sino que vamos a ir a un discurso en positivo. Es decir, que vamos a dar a conocer a fondo nuestro programa, nuestras soluciones, nuestra alternativas. Y todo eso sin prescindir de las denuncias, pero tambi¨¦n sin poner nuestras denuncias y nuestras cr¨ªticas en primer t¨¦rmino. IU tiene vocaci¨®n de Gobierno, y en Andaluc¨ªa intentamos gobernar en el 98, desde esa vocaci¨®n vamos a intentar explicar nuestro programa en positivo. Y en lo positivo est¨¢ el destacar los acuerdos a los que lleguemos con los socialistas.
P. ?Har¨¢n entonces m¨¢s hincapi¨¦ en lo que ofrece IU y no en lo que denuncia?
P. S¨ª, s¨ª, s¨ª... Y en ese sentido descargaremos a Julio de trabajo, porque, a veces, le dejamos que ¨¦l solo haga de bueno, de feo y de malo. El tiene que explicar nuestras propuestas en positivo y ya haremos otros lo que haya que hacer. Hay otra idea que tambi¨¦n nos preocupa. Decir simplemente que hay que echar. al PSOE como sea, decirlo as¨ª, que es lo que hemos venido diciendo hasta ahora en un discurso negativo, es darle Votos al PP. Yo no hablo de quitar al PSOE de forma destructiva, ni mucho menos. Lo que, hay que explicar a la gente es que el ciclo ha terminado y hay que sustituir al PSOE desde la izquierda. Y para eso, IU tiene que subir. Y tenemos que decir: ¨¦ste es nuestro programa y ¨¦stas nuestra soluciones de gobierno. Y demostrar, porque es as¨ª, que nosotros nunca hemos coincidido con el PP pol¨ªticamente.
P. Eso es un cambio de t¨¢ctica, o, por lo menos, de imagen...
R. No quiero hablar de cambios de imagen o de t¨¢cticas. Es... temple. Es el temple que nosotros. practicamos en 1986, en Andaluc¨ªa. Entonces Julio nunca hablaba en negativo. Otros lo hac¨ªamos para denunciar y criticar. Y nos dio resultados muy buenos electoralmente.
P. No cree que precisamente la radicalizaci¨®n del discurso es lo que hace que la subida de IU sea tan lenta?
R. La subida va a ser lenta siempre, aunque seguirnos subiendo. Solemos caer en una trampa y es que las encuestas nos dan mucha subida y, luego, a la vista de los resultados creemos que nos hemos estancado. No es verdad. Subimos, pero no tanto como dicen las encuestas. En las ¨²ltimas municipales tuvimos un mill¨®n de votos m¨¢s. El crecimiento no est¨¢ mal. Yo creo, adem¨¢s, que la palabra. sorpasso no es la adecuada. Pero, en fin... no cuestionamos el fondo. Yo no creo que en las ¨²ltimas elecciones hubiera discursos radicales. Quiz¨¢s un discurso en el que ha primado la denuncia y la cr¨ªtica, lo negativo.
P. ?Existe un clan andaluz en el PCE y en IU?
R. Ja, ja, ja... no, qu¨¦ va. Lo que pasa es que los andaluces, que a veces tenemos fama de simples y directos, tenemos una cultura de siglos que nos ha ense?ado c¨®mo tenemos que peleamos. Y nos ha ense?ado. la paciencia y la suma, la cultura de la unidad. No es que exista un clan, es que las diferencias solemos asumirlas, compartirlas e impulsarlas. Nosotros, los andaluces, supeditamos las diferencias a la unidad.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.