Walesa impugnar¨¢ los resultados de las elecciones presidenciales polacas
ENVIADO ESPECIALEl comit¨¦ electoral de Lech Walesa anunci¨® ayer que impugnar¨¢ el resultado de los comicios, en los que el l¨ªder socialdem¨®crata, Alekander Kwasniewski, gan¨® por 650.000 votos, por entender que pudo cometerse un supuesto fraude a favor de ¨¦ste en alg¨²n colegio electoral, de la ciudad de Lodz. Otro argumento de la reclamaci¨®n es que el vencedor se inscribi¨® como candidato se?alando su condici¨®n de licenciado universitario, lo que no es cierto.
[La misma medida anunci¨® horas m¨¢s tarde la direcci¨®n nacional del sindicato Solidaridad, que hizo, llegar al Tribunal Supremo una demanda de anulaci¨®n de los comicios. En un comunicado, el sindicato asegura que Kwasniewski inform¨® al comit¨¦ electoral que pose¨ªa un t¨ªtulo universitario que no tiene, lo cual "puede haber influido en las elecciones", informa France Press.]
Privatizaci¨®n y nueva Constituci¨®n son los dos grandes espacios donde Lech Walesa y, sus eventuales seguidores, que intentar¨¢n reconstruir el bloque de derechas, luchar¨¢n por recuperar el terreno pol¨ªtico perdido el domingo, cuando el antiguo l¨ªder de Solidaridad result¨® derrotado en las presidenciales por el joven ex comunista Kwasniewski, que llevar¨¢ a Polonia al siglo XXI.
El presidente electo hizo el lunes por la noche un renovado llamamiento a la concordia, garantizando que las reformas continuar¨¢n y que no utilizar¨¢ su posici¨®n "para fortalecer a un sector particular del electorado".
Kwasniewski, que se instalar¨¢ dentro de un mes en el palacio Namiestnikowski, en Varsovia, sede de la jefatura del Estado, tendi¨® la mano al mito ca¨ªdo y pidi¨® a Walesa que contribuyese junto con ¨¦l a la b¨²squeda de las mejores soluciones para Polonia. El antiguo electricista de Solidaridad, que ha anunciado su intenci¨®n de reconstruir un bloque de derechas con el que disputar las elecciones legislativas de 1997, ha asegurado que no traspasar¨¢ personalmente los poderes a su rival.
Fin de la histeria
Apaciguado el ambiente de casi histeria en que la apocal¨ªptica pr¨¦dica anticomunista de Lech Walesa sumi¨® a muchos de sus conciudadanos en v¨ªsperas de la votaci¨®n, la rutina va reinstal¨¢ndose en las vidas de los polacos y de sus pol¨ªticos. Andrzej Olechowski, antiguo ministro de Exteriores del presidente derrotado, opinaba ayer que "nada sorprendente o malo va a pasar a corto plazo... el se?or Kwasniewski ha convencido en la presentaci¨®n de su reformismoLa misma tranquilidad han mostrado en sus mensajes de felicitaci¨®n al ganador los Gobiernos occidentales y hasta la Bolsa de Varsovia. El Gobierno que preside el tambi¨¦n ex comunista Jozef Oleksy se propone ahora acelerar la reforma de la seguridad social y la redacci¨®n de la nueva Constituci¨®n, territorios ambos empantanados por la oposici¨®n del a¨²n presidente Walesa.
Durante los dos ¨²ltimos a?os, Walesa vet¨® regularmente legislaci¨®n parlamentaria, bloque¨® presupuestos y envi¨® al Tribunal Constitucional toda disposici¨®n que no concordara con sus puntos de vista. Kwasniewski prometi¨® el lunes que la futura ley fundamental, ya casi completada y que sustituir¨¢ a otra confusa y hecha a toda prisa en 1989, ahondar¨¢ la democracia en Polonia y har¨¢ de este pa¨ªs de 40 millones a la puerta de Rusia un Estado definitivamente moderno.
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