El Rey facilit¨® que Gonz¨¢lez y Aznar hablaran ayer

Todos con el Rey. Los dirigentes de las m¨¢s importantes instituciones espa?olas, de todas las fuerzas parlamentarias y de todas las comunidades aut¨®nomas acu dieron ayer al palacio de la Zarzuela para celebrar en tomo a la familia real el 20? aniversario de la coronaci¨®n de don Juan Carlos. Luego, todos conversaron con todos. Sin protocolo, sin formalismos, sin presencia de medios de comunicaci¨®n, la reuni¨®n se convirti¨® en un semillero para el di¨¢logo. Y el di¨¢logo se abri¨® paso incluso -con la mediaci¨®n del Rey- entre Felipe Gonz¨¢lez y Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, que no manten¨ªan una entrevista desde hace 10 meses. Don Juan Carlos distingui¨® con un efusivo abrazo a Adolfo Su¨¢rez y dispens¨® un ostensible trato distendido, con risas incluidas a Julio Anguita.

Cerca de 80 personalidades, desde el Gobierno de la naci¨®n casi en pleno hasta los m¨¢ximos directivos de las academias, se desplazaron a La Zarzuela para rodear a la familia real en una foto que entra?aba, adem¨¢s de un gesto afectuoso, un calado pol¨ªtico. No hubo discursos. Bastaba la imagen. Una foto de familia en la que estaban presentes desde Felipe Gonz¨¢lez hasta los dirigentes de UGT y CC OO, C¨¢ndido M¨¦ndez y Antonio Guti¨¦rrez, que hab¨ªan llegado juntos a La Zarzuela en el coche conducido por el propio l¨ªder ugetista; desde los presidentes de Catalu?a y Euskadi -Jordi Pujol -al que el Rey recibi¨® con un "enhorabuena"- y Jos¨¦ Antonio Ardanza, respectivamente- hasta el presidente de la Conferencia Episcopal, El¨ªas Yanes, y el jefe del Estado Mayor de la Defensa, Jos¨¦ Rodrigo Rodrigo.Eso s¨ª, el pr¨ªncipe Felipe se preocup¨®, por iniciativa propia, de apartarse un poco para que las c¨¢maras de los fot¨®grafos y los reporteros de televisi¨®n pudieran inmortalizar a quien hab¨ªa ca¨ªdo detras de ¨¦l la ministra de Asuntos Sociales, Cristina Alberdi, que a pesar de estar situada en un escal¨®n m¨¢s alto no pod¨ªa asomar la cabeza por encima del Pr¨ªncipe.

En el recibimiento a los invitados, don Juan Carlos salud¨® con un afectuoso abrazo, en vez de con un apret¨®n de manos como a todos los dem¨¢s, al ex presidente del Gobierno, Adolfo Su¨¢rez. Pocos d¨ªas antes, Su¨¢rez hab¨ªa subrayado en una entrevista en TVE que su agradecimiento al Rey es, infinito por haber confiado en ¨¦l como presidente del Gobierno, en una apuesta que entra?aba un riesgo para el propio reinado de don Juan Carlos.

Cordialidad

El Rey recibi¨® con cordialidad a Felipe Gonz¨¢lez, con un apret¨®n de manos y una palmada a Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, y dispens¨® una bienvenida con humor a Julio Anguita. Seg¨²n uno de los presentes, la conversaci¨®n fue as¨ª: "Oye, Julio, me tienes que explicar un d¨ªa eso de que una cosa es la corona y otra el monarca". "Cuando quiera", se avino el coordinador general de IU, con otra sonrisa. Luego, en el c¨®ctel, el Rey le coment¨® entre risas: "Hombre, lo que pasa es que cuando te veo te pones a hablar y hablar, y yo, claro, escuch¨¢ndote". "No se preocupe", terci¨® la portavoz de IU en el Congreso, Rosa Aguilar, "a nosotros nos pasa Io mismo cuando estamos con ¨¦l".En cuanto terminaron las fotograf¨ªas en el sal¨®n de audiencias del edificio Magnolia, Felipe Gonz¨¢lez y Jordi Pujol entablaron inmediatamente una larga conversa ci¨®n. Muchos de los asistentes ten¨ªan como centro de sus tertulias la posibilidad de que Javier Solana, que no estuvo presente por motivos de su cargo de ministro de Asuntos Exteriores, sea el nuevo secretario general de la OTAN.

Una vez terminada la reuni¨®n, y ya fuera del palacio de la Zarzuela, el presidente de Castilla-La Mancha, el socialista Jos¨¦ Bono, expres¨® su deseo de que Solana ocupe ese puesto, "para que de esa manera Felipe Gonz¨¢lez pueda m¨¢s f¨¢cilmente ser de nuevo el candidato socialista a la presidencia del Gobierno".

Gonz¨¢lez, adem¨¢s de mantener un intenso intercambio de opiniones con el grupo de presidentes de las comunidades aut¨®nomas m¨¢s afectadas por la sequ¨ªa, entabl¨® una animada charla con el presidente de Canarias, Manuel Hermoso. Al cabo de un rato, el Rey se acerc¨® a Felipe Gonz¨¢lez y le invit¨® a que le acompa?ara. La invitaci¨®n le llev¨® directamente al grupo donde se encontraba Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, Poco despu¨¦s Gonz¨¢lez y Aznar iniciaban una conversaci¨®n a solas que dur¨® cerca de 20 minutos.

Falta de comunicaci¨®n

Ni uno ni otro revelaron lo que hab¨ªan tratado. Quiz¨¢ porque, como relataba la semana pasada Adolfo Su¨¢rez en la entrevista rea lizada por The New York Times y publicada por EL PA?S, "uno desconf¨ªa del otro, y cada cual concede al otro muy poca credibilidad". Y Su¨¢rez lamentaba que no existiera hoy la comunicaci¨®n que ¨¦l manten¨ªa con Felipe Gonz¨¢lez, al que en un periodo de la transici¨®n recib¨ªa casi semanalmente en La Moncloa pese a sus diatribas en p¨²blico. En todo caso, Gonz¨¢lez y Aznar no se ha b¨ªan entrevistado desde que cenaron el 30 de enero pasado en casa del entonces presidente del Tribunal Constitucional, Miguel Rodr¨ªguez Pi?eiro. Tan solo hab¨ªan mantenido algunas conversaciones telef¨®nicas el verano pasado.Aznar aprovech¨® asimismo para dialogar durante casi un cuarto de hora con el presidente electo, de la Generalitat, Jordi Pujol.

Terminada la reuni¨®n, Pujol subray¨® en declaraciones a los medios de comunicaci¨®n que, si bien en estos a?os cada cual ha jugado su papel, "una parte importante del m¨¦rito recae en el Rey". El elogio del lehendakari Jos¨¦ Antonio Ardanza al ¨¦xito pol¨ªtico de estas dos d¨¦cadas no fue menor. En su opini¨®n, si la democracia no se hubiera consolidado, como se ha conseguido tanto en las comunidades aut¨®nomas como en la administraci¨®n central, "seguramente seguir¨ªamos en las trincheras, como en la clandestinidad".

El presidente de Castilla-La Mancha, Jos¨¦ Bono, fue m¨¢s gr¨¢fico: "Veinte a?os de historia democr¨¢tica y de libertad es la mejor tarjeta para avalar a la monarqu¨ªa constitucional espa?ola. El Rey hasabido conectar los intereses de la monarqu¨ªa con los intereses de Espa?a, y no s¨®lo supo encontrar el cauce para llegar a la libertad, sino que demostr¨®, el 23-F, que sab¨ªa defender ¨¦sa libertad".