Borrell gana espacio como candidato y arrecian las presiones sobre Gonz¨¢lez
La designaci¨®n de Javier Solana como secretario general de la OTAN desbarata los planes iniciales de la c¨²pula dirigente del PSOE para la designaci¨®n del candidato a la presidencia del Gobierno, que a partir de ahora pasa del "escenario A al B y al C", seg¨²n su propia terminolog¨ªa. Esto es, con la eliminaci¨®n de Solana como candidato a la presidencia del Gobierno, la direcci¨®n del PSOE tiene que pasar al siguiente nombre de la lista: el ministro de Obras P¨²blicas y Transportes, Jos¨¦ Borrell.Y mientras por un lado se perfila esta segunda opci¨®n, son bastantes los socialistas que creen que que ahora Felipe Gonz¨¢lez no puede negarse a ser el candidato de los socialistas a la presidencia del Gobierno. Es m¨¢s, las presiones para que Gonz¨¢lez se presente van a arreciar, sobre todo desde algunos ministros y a algunos presidentes de comunidades aut¨®nomas. Los miembros m¨¢s destacados de la ejecutiva, sin embargo, aseguran que no volver¨¢n a presionar a Gonz¨¢lez en esta direcci¨®n porque su l¨ªder les ha dicho por activa y por pasiva que ya no es candidato.
Otro de los nombres que est¨¢ bien visto entre las bases socialistas es el de Pasqual Maragall, alcalde de Barcelona, aunque desde la direcci¨®n se reconoce que ya no hay tiempo para preparar su candidatura, darle proyecci¨®n nacional y conseguir que los ciudadanos interioricen que es la propuesta de todos los socialistas para la jefatura del Gobierno.
Por todo ello, el secretario de organizaci¨®n del PSOE, Cipri¨¢ Ciscar, manifest¨® ayer en C¨®rdoba que la propuesta de Solana no afecta al proceso de designaci¨®n del candidato, ya que existe un calendario, cuyo plazo no ha comenzado a¨²n a correr, en referencia a la reuni¨®n de la Ejecutiva Federal del PSOE del pr¨®ximo d¨ªa 18.
En medio de todas las dificultades con las que los socialistas se enfrentan para las pr¨®ximas elecciones, a la que hay que sumar ahora la ca¨ªda del candidato previsto y catapultado en las ¨²ltimas semanas, ayer se transmit¨ªa un discreto clima de satisfacci¨®n entre los dirigentes socialistas consultados. Han hecho de la necesidad, virtud.
La raz¨®n no es otra que el PSOE y su Gobierno no es noticia ahora por esc¨¢ndalos, sino porque se ha puesto de manifiesto que en el orden internacional el Gobierno de Felipe Gonz¨¢lez sigue gozando de reconocimiento y prestigio, pese a todo lo que ha llovido en el ¨²ltimo ano y medio. Cipri¨¢ Ciscar manifest¨® ayer que la propuesta de Solana como candidato es consecuencia del "importante prestigio de Espa?a en el mundo". El portavoz del Grupo Socialista, Joaqu¨ªn Almunia, desde C¨¢ceres, se expres¨® en el mismo sentido.
Tambi¨¦n a partir de ahora, la opini¨®n p¨²blica escuchar¨¢ a dirigentes del PSOE pedir en alto al Partido Popular y singularmente a su secretario general, Francisco ?lvarez Cascos, que se retracte por sus declaraciones en el sentido de que no era cierto que fuera de Espa?a se pensara en Javier Solana, sino que todo era una operaci¨®n de los socialistas espa?oles con vistas a realzar su figura para su candidatura a la presidencia del Gobierno.
Aunque el presidente del PP, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, estuvo mucho m¨¢s discreto, tampoco mostr¨® su satisfacci¨®n total por la elecci¨®n de un espa?ol, sino que puso en duda la idoneidad de alguien del PSOE para el cargo por su pasado contrario al ingreso en la OTAN. En este apartado, el Partido Popular no recuerda, siempre seg¨²n el PSOE, que en el refer¨¦ndum de marzo de 1986 propugnado por los socialistas a favor de la permanencia de Espa?a en la OTAN, ellos pidieron la abstenci¨®n de los ciudadanos.
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