Cuba endurece las medidas contra la prostituci¨®n inducida por la liberalizaci¨®n

Las autoridades cubanas est¨¢n cada vez m¨¢s preocupadas por el aumento de la prostituci¨®n en la isla. Ya nadie oculta que cada vez son m¨¢s las j¨®venes que de forma ocasional o profesionalmente se dedican a ejercer la prostituci¨®n en La Habana y Varadero, y que junto a ellas ha surgido una red de proxenetas, moteles clandestinos y peque?os traficantes de drogas que viven de las jineteras (prostitutas). Para combatir esta situaci¨®n, la Fiscal¨ªa General de la Rep¨²blica ha incrementado las medidas de represi¨®n contra estas actividades y ahora prepara una reforma del C¨®digo Penal que endurecer¨¢ las penas contra estos fen¨®menos delictivos asociados a la prostituci¨®n, as¨ª como contra la corrupci¨®n.

Dentro de esta estrategia de lucha centra la prostituci¨®n, el ministro de Turismo, Osinani Cienfuegos, se reuni¨® la semana pasada con los directores de las principales cadenas hoteleras y hoteles de La Habana y orden¨® lanzar una ofensiva contra las jineteras en todos los centros tur¨ªsticos. Como resultado, a partir del primero de diciembre, ninguna mujer cubana que sea o parezca jinetera a los. ojos de los porteros puede entrar en los hoteles habaneros, ni siquiera acompa?adas de un extranjero.En esta l¨ªnea, el fiscal general, Juan Escalona, anunci¨® recientemente que entre las medidas que se estudian est¨¢ aumentar las penas contra los proxenetas (10 o 12 a?os de c¨¢rcel), y tambi¨¦n crear una serie de "mecanismos de decomiso y confiscaci¨®n de lugares que se arriendan para el ejercicio de la prostituci¨®n". En la actualidad, cientos de personas en La Habana alquilan cuartos o casas a extranjeros y jineteras por cifras que oscilan entre 10 y 30 d¨®lares diarios (entre 1.200 y 3.600 pesetas). Sin embargo, este tipo de actividades no estaban expl¨ªcitamente contempladas en el C¨®digo Penal y, por ello, la lucha contra ellas se ha ejercido hasta la fecha de forma discrecional y s¨®lo en determinados momentos.

Fuentes oficiales se?alaron que ning¨²n art¨ªculo del C¨®digo Penal cubano contempla la prostituci¨®n como delito, pero s¨ª permite aplicar medidas de seguridad de hasta cuatro a?os de internamiento en una c¨¢rcel por "peligrosidad".

Por ello, hasta ahora, cuando la prostituci¨®n se ha desbordado en La Habana y las autoridades la han querido frenar, la pol¨ªtica ha consistido en limitar el acceso a las discotecas y hoteles, y efectuar redadas contra las jineteras en las zonas tur¨ªsticas.

La ofensiva se ha iniciado con el presidente cubano, Fidel Castro, ausente del pa¨ªs. Castro se encuentra de visita oficial en China, y ayer se traslad¨® a Shanghai, tras su estancia en Pek¨ªn, en la tercera etapa, de su viaje de diez d¨ªas, el primero que realizada en 35 a?os de relaciones entre los dos pa¨ªses comunistas.