Deontolog¨ªa m¨¦dica

S¨ª a los informes m¨¦dicos periciales. No a las historias cl¨ªnicas indiscriminadamente, salvo que constituyan en si mismas el cuerpo del delito, como, por ejemplo, el caso de una negligencia m¨¦dica. Con esta postura resume Gonzalo Herranz, secretario de la comisi¨®n deontol¨®gica del Consejo General de M¨¦dicos, la postura de los facultativos respecto a facilitar historiales de sus pacientes. "El m¨¦dico est¨¢ obligado a cooperar con la justicia, pero tambi¨¦n a preservar la intimidad de su paciente", indica.El art¨ªculo 18 del c¨®digo deontol¨®gico de los m¨¦dicos recoge expl¨ªcitamente la obligaci¨®n del. m¨¦dico de "reservar" datos importantes de su paciente ante los tribunales de justicia en aras de no lesionar su intimidad. "Los jueces tienen que sosegarse", sugiere Herranz. "No deben dejarse llevar por su poder. Una historia cl¨ªnica puede erosionar innecesariamente la reputaci¨®n y el prestigio de una persona. Adem¨¢s, para la inmensa mayor¨ªa de los casos, un dictamen m¨¦dico es mucho m¨¢s l¨²cido que la historia cl¨ªnica".

En este sentido, Carlos Castilla del Pino se preguntaba en su carta: "?Qu¨¦ le importa a un juez, pongamos por caso, para dictaminar la responsabilidad o no de alguien en un accidente de tr¨¢fico, que ¨¦ste tenga tendencias homosexuales?". Sugiere un tema m¨¢s preocupante a¨²n, al afirmar que muchos jueces no justifican la negativa de los m¨¦dicos alegando que la Administraci¨®n no tiene inconvenientes en entregar las historias. Si esto es as¨ª, "alguien est¨¢ incurriendo en una conducta delictiva", afirma el psiquiatra.