"Se puede enga?ar al cerebro para adelgazar"
Una se?al hormonal, derivada del estr¨®geno, es la responsable de indicarle al cerebro si ¨¦ste debe dar la orden de consumir o aumentar las reservas de grasa del organismo o, lo que es lo mismo, si se debe adelgazar o engordar. A esta conclusi¨®n ha llegado el bioqu¨ªmico Mari¨¢ Alemany, catedr¨¢tico de-Bioqu¨ªmica y Biologia Molecular de la Universidad de Barcelona, tras comprobar en ratas de laboratorio c¨®mo esta mol¨¦cula es capaz de provocar la reducci¨®n de su peso alrededor de un 20% en apenas dos semanas.Esta se?al, un cileato de estrona, es producida por el tejido adiposo blanco (tejido en el que se concentranlas reservas de, grasa del organismo) y circula por la sangre unida a, una lipoprote¨ªna hasta el hipot¨¢lamo, lugar en el que se halla el centro de control del hambre. Cuando las concentraciones de oleato de estrona son superiores a las habituales, el cerebro da la orden de quemar el excedente de grasa. Si son inferiores , indic¨® Alemany a este peri¨®dico, "el cerebro da la orden de activarlos mecanismos que conducen a la deposici¨®n de grasas" en el tejido adiposo.
Complementarias
Alemany estaba convencido de que no pod¨ªa tratarse de una prote¨ªna, como afirm¨® en diciembre del a?o pasado otro investigador, Friedman, de la Rockefeller University, cuando anunci¨® el descubrimiento de la leptina. "Hasta ahora", dice, "nadie ha comprobado que las prote¨ªnas puedan llegar hasta el cerebro". La leptina, o tambi¨¦n prote¨ªna OB, fue la primera se?al sobre control del peso corporal q ue fue identificada. Alemany considera ahora que ambas mol¨¦culas "podr¨ªan ser complementarias".La reducci¨®n de peso obtenida con el oleato de estrona afecta ¨²niciamente a los niveles de grasa y agua, mientras que los niveles de prote¨ªnas se mantienen estables. El peso se pierde muy r¨¢pidamente, "en tres o cuatro, d¨ªas"' y luego se mantiene estable inilientras se administra la dosis por v¨ªa endovenosa. Los resultados de la investigaci¨®n, pendientes a¨²n de publicaci¨®n, han generado una pala obtenci¨®n de un f¨¢rmaco capaz de reproducir el modelo fisiol¨®gico. La patente, a nombre de laboratorios Salvat, que ha financiado la investigaci¨®n, se entreg¨® en septiembre pasado.
Las consecuencias de este descubrimiento se traducir¨¢n en un f¨¢rmaco que aumente la concentraci¨®n de oleato de estrona en sangre con el objeto de que "el cerebro d¨¦ una orden equivocada" y active los mecanismos de eliminac¨ª¨®n de grasas. El nuevo f¨¢rmaco podr¨ªa estar listo en cuatro a?os, precis¨® Alemany.
El f¨¢rmaco se centrar¨¢ principalmente en casos de obesidad m¨®rbica. "Hoy sabemos que la obesidad no es una enfermedad, sino el s¨ªntoma que alerta de un desajuste fisol¨®gico explica Alemany. En este caso, matiza, el cerebro "puede estar dando una orden equivocada" que obliga al organismo a mantener por encima de lo recomendable sus niveles de grasa. Inyectando las dosis adecuadas, "se puede enga?ar" al cerebro e indicarle que debe reducir estos niveles.
El sistema de control del peso corporal es extremadamente complejo y sujeto a m¨²ltiples variables. De forma muy simplificada, se considera que en el hipot¨¢lamo se localiza el centro de control del hambre y que es a trav¨¦s del sistema nervioso perif¨¦rico como se activan los mecanismos que inducen a la deposici¨®n de grasa en el tejido adiposo o, por el contrario, se queman las reservas. Hasta estos recientes descubrimientos, se ignoraba si exist¨ªa alguna se?al que conectara el tejido adiposo con el hipot¨¢lamo.
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