Inflaci¨®n controlada y empleo precario en Espa?a

La evoluci¨®n de la econom¨ªa espa?ola es, en opini¨®n de la OCDE, buena. Y:"at¨ªpica", ya que la "fuerte creaci¨®n de empleo precario, y mal, pagado en su mayor¨ªa, se ha visto acompa?ada por reivindicaciones salariales moderadas, "lo que demuestra quiz¨¢ una mayor flexibilidad del mercado de trabajo". El crecimiento de la producci¨®n deber¨ªa ser en 1996 "ligeramente superior a la media de la Uni¨®n Europea y la inflaci¨®n podr¨ªa ser conforme, en 1997, al objetivo del 3%"La OCDE se?ala que la recuperaci¨®n econ¨®mica en Espa?a, del 3,2% este a?o, es impulsada "por la inversi¨®n, y ya no las exportaciones netas". Para los dos a?os siguientes modera el optimismo, situando el crecimiento en el 2,9% en 1996 y en el 3,1% en 1997. La inversi¨®n deber¨ªa aumentar, dado que el grado de utilizaci¨®n de la capacidad productiva alcanza los niveles "m¨¢s elevados desde hace cinco a?os".

Moderaci¨®n salarial

El tiron productivo a generado empleo pero, a diferencia de anteriores ciclos econ¨®micos positivos, no ha empujado los salarios al alza. "Durante la primera mitad de 1995, el empleo ha aumentado a un ritmo del 2,2% y el paro ha descendido al 22,7%, frente al 24,3% de un a?o antes", dice el informe. Para 1997, prev¨¦ el 21,2%. Los empleos creados son, sin embargo, "pobremente remunerados, especialmente bajo contratos de aprendizaje, de trabajo a tiempo parcial y de trabajo temporal".En cuanto a la inflaci¨®n, la OCIDE constata que a mitad de 1995 se invirti¨® la tendencia sostenida a la baja y se alcanz¨® un 5,1% anual, debido al "vigor de la recuperaci¨®n" y a "factores transitorios", como el incremento de un punto en el IVA desde el 1 de enero. Si la pol¨ªtica monetaria sigue siendo restrictiva como hasta ahora, dice el informe, "se puede prever una reducci¨®n progresiva de la inflaci¨®n, que se establecer¨ªa en el 3% en 1997".

Prev¨¦ un incremento de las importaciones, con lo que "la contribuci¨®n exterior al crecimiento del PIB corre el riesgo de ser negativa" y la balanza de pagos, que deber¨ªa alcanzar el equilibrio en 1995, puede acusar a partir del a?o pr¨®ximo un fuerte d¨¦ficit, "en torno al 0,5% del PIB".

El cap¨ªtulo espa?ol del informe de previsiones concluye con una advertencia: "Pese a la amplitud del desempleo, las alzas salariales pueden acelerarse a medida que la recuperaci¨®n progrese, comprometiendo la prevista mejora en el mercado de trabajo".