Las historias de 'La Bola'
, Las historias que cuentan los trabajadores de la Bola del Mundo cuesta creerlas. Parecen propias de La Bola, el peri¨®dico de Mortadelo y Filem¨®n. Esta cima se convierte en invierno en una trampa mortal. S¨®lo los monta?eros preparados pueden subir a ella sin peligro. Sin embargo, muchos lo intentan.
Hace tres a?os, un monta?ero muri¨® a las puertas de estas instalaciones cuyas ventanas son dobles. Esta persona, medio congelada, s¨®lo consigui¨® romper con los pu?os la primera ventana. No le quedaron fuerzas para reventar la siguiente. Meti¨® s¨®lo medio cuerpo. Adem¨¢s, nadie le vio porque la ventana que hab¨ªa roto estaba tapada por uno de los cientos de aparatos electr¨®nicos que se alinean en los pasillos del centro.
Hace dos a?os, dos monta?eros medio congelados llegaron al repetidor. Los trabajadores intentaron reanimarles con calor y bebidas alcoh¨®licas. Sin embargo, no reaccionaban. "Todos nuestros intentos eran que hablasen. Les golpeamos, abofeteamos y casi los emborrachamos. Despu¨¦s de varias horas de intentos, nos dimos cuenta que eran sordomudos", comenta el director, Joaqu¨ªn Rom¨¢n P¨¦rez. Francisco, uno de los guardias civiles que vigilan la Bola, lo explica: "Hemos encontrado much¨ªsimas personas perdidas. Hace un tiempo nos topamos con un pastor y todas sus ovejas muertas a escasos metros. El pasado d¨ªa 23 un chaval estuvo a punto de morir congelado. Le salvamos por poco", relata.
Cuando el centro fue inaugurado, en los a?os sesenta, sus responsables decidieron levantar tambi¨¦n una capilla. Hubo que buscar a un sacerdote para que la atendiera. Se eligi¨® al cura de Navacerrada, pero ¨¦ste no sab¨ªa esquiar. Cuando nevaba y la carretera estaba impracticable, se le bajaba a la espalda de un esquiador. Mario Morales, campe¨®n de Espa?a de esqu¨ª de fondo durante ocho a?os, fue la persona elegida para esta misi¨®n.
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