F¨¢tima

Ahora resulta que la Virgen de F¨¢tima no es la F¨¢tima de Espa?a, sino la de M¨¦rim¨¦e. Claro que F¨¢tima no est¨¢ en Espa?a, sino en Portugal, y que M¨¦rim¨¦e no era musulm¨¢n, pero ustedes entender¨¢n que estoy utilizando una licencia po¨¦tica. Me refiero a esa rara noticia de que en Ir¨¢n han empezado a reivindicar el santuario portugu¨¦s como lugar sagrado del islam, porque, seg¨²n un documental que pasaron por la televisi¨®n iran¨ª, quien se apareci¨® milagrosamente por all¨ª no fue la Virgen cristiana, sino F¨¢tima, la hija del profeta Mahoma.Los curas del pa¨ªs vecino andan, al parecer, bastante mosqueados con el asunto: tal vez teman que los fundamentalistas iran¨ªes les organicen una contracruzada para apoderarse del santuario. Sin embargo, a m¨ª me resulta delicioso este travestismo cultural de la Virgen de F¨¢tima, la cual dio mucho la vara en su momento con el comunismo (?no fue ¨¦sta la de los mensajes secret¨ªsimos?) y ha sido a menudo relacionada con el integrismo cat¨®lico. Qu¨¦ maravilla que esa Virgen restrictiva y partidista, esa escayola acaparada de manera sectaria por un grupo de fieles, pueda representar igualmente lo sagrado para otro amplio colectivo de personas. Y a¨²n quedan por aparecer budistas, judios, hind¨²es, s¨ªnto¨ªstas... Espero que todos ellos tambi¨¦n reclamen pronto la posesi¨®n moral del santuario.

La existencia de Dios resulta de por s¨ª bastante dudosa, pero lo que ya es una verdadera insensatez es pensar que existen varios dioses. Por esa invenci¨®n est¨²pida se ha matado y se mata, por esa obsesi¨®n fan¨¢tica el mundo se ahoga en sangre. Ojal¨¢ todas las v¨ªrgenes se convirtieran en la misma virgen y todas las divinidades confluyeran en el mismo anhelo com¨²n por lo sagrado. Eso s¨ª que ser¨ªa el verdadero milagro de F¨¢tima.