Los Civiles bosnios secuestrados denuncian malos tratos tras ser liberados por los serbios
ENVIADO ESPECIAL Las autoridades serbias de Bosnia-Herzegosvina, bajo creciente presi¨®n internacional, decidieron liberar ayer a los 16 civiles, bosnios capturados los ol¨ªas de Navidad por partidas armadas cuando atravesaban llidza, un barrio de Sarajevo a¨²n bajo su control. Los tres primeros liberados relataron su calvario de nueve d¨ªas y aseguraron haber sido golpeados por sus captores. A ¨²ltima hora de ayer, fuentes bosnias denunciaron la existencia de otros tres nuevos secuestrados -un serbio, un croata y un musulm¨¢n-, tambi¨¦n a su paso por la ruta de Ilidza.
"Los turcos han empezado a cruzar Ilidza", fue la ¨²nica explicaci¨®n que recibieron los detenidos de sus captores. Los radicales serbios ulilizan la palabra turco para referirse en tono despectivo a los bosnio-musulmanes. Seg¨²n el relato de Adil Spahic, de 44 a?os; Ramo Dalac, de 48, y Mero Kurundzijc, de 53, las fuerzas de la OTAN quedan bastante malparadas. El 25 de diciembre los tres viajaban en un cami¨®n de una empresa textil de Sarajevo por la carretera de Tarcin en direcci¨®n a la capital bosnia. Iban en un convoy de siete veh¨ªculos escoltado por lfor (fuerza de la OTAN para aplicar los acuerdos de Dayton), aunque no pudieron precisar si por soldados franceses o ucranios.Al llegar al barrio de Hadzici polic¨ªas serbios de uniforme detuvieron el cami¨®n mientras el resto del convoy, incluida la escolta de lfor, prosegu¨ªa el camino. Los polic¨ªas les pidieron gasolina y fueron autorizados a continuar. Al llegar a llidza, fueron desviados por una ruta que pasa por debajo de un puente, donde les esperaban dos civiles y un soldado armados que les obligaron a subir a un veh¨ªculo sin distintivo alguno. Los secuestrados est¨¢n convencidos de que se trataba de una trampa preparada coordinadamente entre los controles de Hadzici e Ilidza. Les quitaron la documentaci¨®n, el dinero y los relojes, que no han vuelto a ver.
Fueron trasladados a un cuartel de polic¨ªa, donde fueron esposados. Durante dos horas esperaron en un pasillo. La gente que pasaba junto a ellos les insultaba. Durante el interrogatorio fueron golpeados en la cabeza y en la espalda. Pasaron los nueve d¨ªas en una celda de ¨ªnfimas dimensiones. Com¨ªan una o dos veces al d¨ªa, y s¨®lo pod¨ªan salir para ir al ba?o.
El mi¨¦rcoles fueron trasladados a la prisi¨®n de Kula, junto al cuartel serbio de Lukavica, donde vieron a otros detenidos. A las 10 de la ma?ana de ayer les llamaron por sus nombres, les dieron unas viejas chaquetas del Ej¨¦rcito yugoslavo, les introdujeron en un veh¨ªculo civil y les entregaron a los soldados franceses, que vigilan el aeropuerto.
Era el final feliz de la odisea de Adil, Ramo y Mero que se hab¨ªan atrevido a cruzar los llamados barrios serbios por primera vez en casi cuatro a?os. Hab¨ªan salido de Sarajevo por la pista del monte Igman, bajo control bosnio, y s¨®lo la presencia de los veh¨ªculos de lfor les decidi¨® a tomar la nueva ruta.
Miedo a morir
Los tres aseguraron haber temido por sus vidas durante el cautiverio y desmintieron las acusaciones de sus captores de ser, oficiales de la Armija bosnia. "He sido sastre toda mi vida", exclamaba uno. A juzgar por su aspecto ninguno es militar. Es aventurado afirmar qui¨¦n logr¨® la liberaci¨®n, pero no cabe duda que la presi¨®n de los medios de comunicaci¨®n de todo el mundo presentes en Sarajevo ha tenido algo que ver: tras casi dos semanas de secuestro, 24 horas despu¨¦s de trascender p¨²blicamente el caso, Ifor envi¨® a llidza a su n¨²mero dos, teniente general Michael Walker, quien se entrevist¨® con el alcalde serbio, y EE UU presion¨® al presidente serbio, Slobodan Milosevic, para que tomara cartas en el asunto.
El resultado est¨¢ a la vista: los 16 civiles est¨¢n libres y las patrullas de la OTAN han comenzado a moverse por llidza en contra de lo anunciado el mi¨¦rcoles.
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