"Muri¨® por no consentir injusticias"dice la madre de David Guerrerro

David Guerrero, el cabo de la Guardia Real tiroteado por dos atracadores al entrar en una hamburgueser¨ªa junto al estadio Bernab¨¦u, falleci¨® por su af¨¢n protector, seg¨²n dijo ayer su madre, Mar¨ªa Luisa, de 52 a?os. David, que, cumpl¨ªa su quinto a?o en el cuerpo como adiestrador de perros, "no consent¨ªa las injusticias", a?adi¨®. Por eso sus seres m¨¢s queridos creen que lo ¨²ltimo que hizo en su vida fue proteger a la cajera amenazada por el rev¨®lver de uno de los atracadores.

"Pienso que al entrar en ese local y ver un arma lo dijo algo, porque nunca se quedaba de brazos Cruzados al ver a un indefenso", cuenta su madre. Seg¨²n la versi¨®n de los testigos, David conmin¨® a uno de los atracadores para que dejase de apuntar a una empleada.Para sus allegados, David reaccionar¨ªa as¨ª en cualquier situaci¨®n. "Quiz¨¢s porque su propia profesi¨®n de adiestrador de perros le estaba curtiendo como un hombre de una naturaleza especial", apunt¨® ayer un compa?ero del cuartel de El Pardo.

. Su madre le describe como un hombre bondadoso, de car¨¢cter espont¨¢neo. "Todos le recordar¨¢n por su alegr¨ªa, por su forma de comportarse", relata Mar¨ªa Luisa mientras fija la vista en una fotograf¨ªa de su hijo desfilando junto a su perro Moncho. "En la Guardia Real [cuerpo que se ocupa en la seguridad del Rey] estaba en la gloria. En poco tiempo su gran coraz¨®n hab¨ªa conquistado a todo el mundo". La madre dice orgullosa: "El era feliz ahora". "Adem¨¢s hab¨ªa ganado hace poco una copa" -la se?ala con el dedo- "en un concurso de perros". La madre recuerda c¨®mo al principio David ten¨ªa miedo a los perros. "Se meti¨® all¨ª para superar ese temor y lo consigui¨®".

La mesura de las palabras de Mar¨ªa Luisa estalla cuando piensa en los autores. "A esos yo misma les mataba", dice con rabia. "Lo que han hecho no tiene perd¨®n", prosigue. "Que quede muy claro que pido la misma moneda para ellos". El padre de. David, Rafael, propietario de una droguer¨ªa en la calle de Alfonso X, dorm¨ªa ayer por la tarde tras una noche en vela. "?l s¨ª est¨¢ destrozado", dec¨ªa la madre.

David era igual de popular en su barrio,que en el cuartel.Sus compa?eros del regimiento de El Pardo le despidieron ayer en el cementerio con una emotiva salve. "Era una persona muy especial, que nos hab¨ªa dado mucha vida", explic¨® su comandante. En su calle, cerca de la glorieta de Rub¨¦n Dar¨ªo, le recuerdan por su enorme vitalidad. El propietario de un bar rememoraba ayer: "Era estupendo, cualquier cosa que diga de ¨¦l es poco".

David llevaba cinco a?os de noviazgo con Marisol. Su nov¨ªa -sentada, inm¨®vil, en un sof¨¢ de la casa- coment¨® ayer que confundi¨® los tiros con petardos.

Tras esperar un rato en el coche, entr¨® en el burger y le vio tumbado en el suelo. Al darle la vuelta se top¨® con la herida en el pecho. Marisol, David y dos parejas m¨¢s hab¨ªan pasado la tarde del s¨¢bado escuchando un concierto de jazz. Seg¨²n Marisol, a David le entr¨® hambre y decidi¨® parar frente al Burger King por si estaba abierto.

La secci¨®n de atracos de la Brigada de Polic¨ªa Judicial prosigue con la investigaci¨®n, del caso, Los agentes no se pronunciaron sobre una r¨¢pida resoluci¨®n de las pesquisas. "Todo sigue en curso, no podemos -a?adir m¨¢s", explicaron.