El obispo destituido por el Papa dice que nadie parar¨¢ la marea del cambio
El prelado Gaillot critica en Barcelona la pol¨ªtica vaticana
Ninguna estructura oficial podr¨¢ parar la marea que sube de las bases, y esta marea "introducir¨¢ profundos cambios en la Iglesia cat¨®lica". As¨ª lo afirm¨® ayer en Barcelona el obispo destituido de Evreux (Francia), Jacques Gaillot, aunque reconoci¨® que esa marea del pueblo fiel no lo tendr¨¢ f¨¢cil: la falta de libertad de expresi¨®n y la pol¨ªtica seguida por el papa Juan Pablo II de nombrar obispos conservadores para dejar bien atado su legado pontificio dificultar¨¢n, en su opini¨®n, el cambio necesario.
Pero el cambio llegar¨¢ de todas formas, a juicio del obispo disidente, incluido el acceso de las mujeres al sacerdocio, porque la Iglesia "ha sido creada pora responsabilizar y no para infantilizar". "La Iglesia debe acercarse a la sociedad, y su posici¨®n est¨¢ hoy terriblemente debilitada porque est¨¢ dominada por hombres, c¨¦libes y ya muy mayores" dijo. Jacques Gaillot se encuentra en Barcelona invitado por el foro Vida y Evangelio y el pr¨®ximo jueves pronunciar¨¢ una conferencia en la Iglesia del Pi de la capital catalana. Tambi¨¦n se. entrevistar¨¢ con el arzobispo Ricard Maria Carles. El s¨¢bado se cumplir¨¢ un a?o desde que, fue destituido como obispo de Evreux y destinado a una di¨®cesis inexistente de Mauritania. Desde entonces, su vida ha cambiado radicalmente. Vive en una casa de okupas en un barrio marginal de Par¨ªs, con familias pobres e inmigran es ilegales. Su labor pastoral consiste ahora en ayudar a estas gentes a encontrar trabajo y salir airosos de la persecuci¨®n, legal. En este tiempo ha escrito cuatro libros que han sido ¨¦xito de ventas y, sobre todo, ha alimentado el extenso movimiento de protesta que ha provocado su destituci¨®n, hasta el punto de que el Papa accedi¨® a recibirle a finales de diciembre sin condiciones a pesar de que el verano pasado, el entonces nuncio del Papa en Francia le hab¨ªa puesto tres condiciones: que fuera solo, que no hiciera declaraciones a la prensa y que reconociera sus errores. Gaillot explic¨® ayer que se hab¨ªa limitado a contestar que estar¨ªa encantado de entrevistarse con el Papa, pero no mencion¨® para nada las condiciones, En. diciembre, el nuevo nuncio del Papa en Francia, Mario Tagliaferri, que ten¨ªa entre sus misiones declaradas apagar el fen¨®meno Gaillot, se limit¨® a proponer dos fechas para la entrevista. Gaillot dijo ayer que la entrevista fue cordial, y no reconoci¨® errores ni se abstuvo de criticar las posiciones del Papa. Explic¨®, por el contrario, que est¨¢ negociando con la Conferencia Episcopal francesa su futuro estatuto. El quiere seguir trabajando con los excluidos y que se le reconozca una funci¨®n episcopal en este ¨¢mbito. "El problema no es que trabaje con los pobres. El problema es que soy obispo", ironiz¨®. En cualquier caso, no piensa renunciar, dijo, a ejercer la libertad de expresi¨®n y luchar por una Iglesia "renovada y pluralista". Ayer se mostr¨® convencido de que su destituci¨®n fue desencadenada por las presiones del Ministerio franc¨¦s de Interior ante el Vaticano, por sus cr¨ªticas contra la ley que regula el tratamiento de los extranjeros.
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