LO QUE LE FALTABA A LA REINA ISABEL
El hombre acusado por la polic¨ªa brit¨¢nica de merodear en los actos oficiales de la princesa Ana, hija de la reina Isabel II, ha amenazado a la soberana brit¨¢nica con tomar medidas si no le deja ver a su hija, aseguraba la prensa londinense el lunes. Jim Quinn escribi¨® en los ¨²ltimos meses dos cartas a Isabel II, en las que la acusaba de maltratar a la princesa Ana, y aseguraba que dar¨¢ "los pasos l¨®gicos a menos que [la reina] haga algo constructivo", seg¨²n el diario The Sun. "Ha reducido a Ana de ser la persona a la que m¨¢s respeto al papel de prostituta. Ha abusado de su propia hija. Ella necesita liberarse de su tortura; d¨¦jeme a m¨ª", reza una de las misivas. La Casa Real orden¨® el pasado jueves extremar las .medidas de seguridad en torno a la princesa. Quinn comenz¨® a obsesionarse con la ¨²nica hija de la reina de Inglaterra tras su frir un accidente de tr¨¢fico en 1992, cuando la escribi¨® para contarle lo bien que le hab¨ªan tratado en el hospital. Al recibir una contestaci¨®n de rutina por parte de la oficina de la princesa real que Quinn tom¨® como personal, pempez¨® a desarrollar su obsesi¨®n por Ana, a la que ha escrito m¨¢s de mil cartas y poemas. En la primera de sus composiciones, titulada James de las Monta?as, Quinn se imagina a s¨ª mismo cabalgando con la "princesa encantada Ana de las Monta?as... sobre un caballo m¨¢gico hacia la tierra de la eterna juventud". El incansable es critor tambi¨¦n envi¨® cartas al primer ministro brit¨¢nico, John Major; al presidente estadounidense, Bill Clinton, y al secretario general de la ONU, Butros Gali, comentando a todos ellos su amor hacia la princesa. El hijo del merodeador declar¨® a The Sun que su padre pidi¨® el divorcio de su esposa Mary despu¨¦s de 28 a?os de matrimonio para estar disponible para la princesa Ana.-
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.