Roma pretende que su crisis interna no afecte a la presidencia
Italia pretende que su crisis interna no contamine la presidencia semestral de la Uni¨®n Europea. Sus dirigentes argumentan, como eI secretario general de Exteriores, Boris Biancheri, que "la cuesti¨®n europea es la ¨²nica en la que todos los partidos est¨¢n de acuerdo". "El Gobierno ha recibido un mandato de todo el Parlamento [la aprobaci¨®n de su programa para el semestre, el pasado 5 de diciembre] y aunque haya cambio de Gobierno, que no lo creo, el que venga deber¨¢ ajustarse a ese mandato concreto", sostieneA este compromiso se refiri¨® el presidente de1a Comisi¨®n, Jacques Santer. "Lo que nos ocupa", dijo, "es que el programa de la presidencia sea ejecutado con continuidad y coherencia". No hay inquietud por un cambio de planes, sino por su aplicaci¨®n. Para el director del Tesoro, Mario Daghi, "el primer imperativo de la presidencia es mantenerla separada de los problemas internos". Pero, aunque aflorasen al mapa comunitario, sostiene, refiri¨¦ndose a los problemas economicos, "no la entorpecer¨ªan".
?Por qu¨¦? Daghi y el ministro del Presupuesto, Rainer Masera, argumentan con la bondad de los resultados econ¨®micos obtenidos: Italia no es tan patito feo de la coyuntura economica como se piensa. No frenar¨¢ el avance comunitario. Se apoyan en que el crecimiento econ¨®mico de 1995 se acercar¨¢ al 3% (fue del 3,4% en el tercer trimestre), de los m¨¢s altos de la UE. Y aunque el crecimiento se basa en las exportaciones, ¨¦stas "no son ¨²nicamente tributarias de la depreciaci¨®n de la moneda; pues han continuado en la segunda mitad de 1995, cuando la lira se ha apreciado", alega Masera. El d¨¦ficit p¨²blico baj¨® en los dos ¨²ltimos a?os desde el 9,5% del PIB hasta el 7,5% (en 1992 superaba el 11%), "la primera reducci¨®n significativa en los ¨²ltimos 20 a?os".
Sanidad y pensiones
Estos datos reavivan el inter¨¦s por acelerar el cumplimiento de las condiciones de convergencia para entrar en la moneda ¨²nica. El programa plurianual en vigor prev¨¦ que s¨®lo al final de 1998 se alcanzar¨¢n: esto significa que el pa¨ªs no acceder¨ªa al grupo, de cabeza el 1 de enero de 1999. Pero el dimisionario Dini sugiri¨® en el ¨²ltimo debate presupuestario adelantar un a?o el saneamiento de las finanzas p¨²blicas para incorporarse al n¨²cleo duro del euro. Masera lo cree "t¨¦cnicamente posible". Pero "implicar¨ªa entrar a saco en aspectos del Estado de bienestar como la asistencia sanitaria, algo muy dif¨ªcil tras el acuerdo que ya se logr¨® en 1995 sobre las pensiones", y requerir¨ªa "un consenso muy amplio de todos los partidos pol¨ªticos".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.