"Las palestinas ser¨¢n limpias y democr¨¢ticas"
Del fusil a las piedras. De las piedras a la autonom¨ªa y de la autonom¨ªa a las urnas. La asombrosa transici¨®n de la guerrilla al primer experimento democr¨¢tico palestino va, a plasmarse el s¨¢bado con la celebraci¨®n de las elecciones que deben crear un protoparlamento para el protoestado palestino del que Yasir Arafat se convertir¨¢ en un presidente con residencia al lado de Israel. Un proyecto que marcar¨¢ la culminaci¨®n de aspiraciones impensables hasta hace poco y coronar¨¢ m¨¢s de dos a?os de ardua labor para los pol¨ªticos palestinos y, menos visiblemente, el esfuerzo de un equipo (le tres expertos europeos.Uno de ellos es el espa?ol Antonio Bar Cend¨®n, un ac¨¢d¨¦mico de 46 a?os de edad que lleg¨® a Palestina en febrero de 1994 con l¨¢pices bien afilados. Y se embarc¨® en lo que se perfila como el experimento pol¨ªtico m¨¢s fascinante de la historia de Oriente Pr¨®ximo contempor¨¢neo. T¨¦cnicamente, Bar Cend¨®n forma parte de la troika de asesores que la Uni¨®n Europea despach¨® para preparar y realizar las elecciones. ?qu¨ª los tres se encontraron con un desaf¨ªo colosal. Los palestinos est¨¢n en el umbral de las urnas y de lo que se habla en Palestina es de la validez, legitimidad y alcances de las elecciones. Bar Cend¨®n pone la mano en el fuego.
Pregunta. ?Hay semejanza entre el proyecto que usted vino a dise?ar y lo que va a hacerse realidad esta misma semana?
Respuesta. Yo no vine a dise?ar un proyecto. Vine a asesorar a los palestinos en los temas de reformas para la formaci¨®n de su Gobierno local. Fue un trabajo de equipo y nos dividimos misiones. Yo asum¨ª el trabajo electoral.
P. ?Hay parentesco entre lo que se propuso en 1994 y lo que va a producirse el s¨¢bado?
R. La ¨²nica diferencia es que ten¨ªamos en mente 100 esca?os. Hoy hay 88.
P. Cuando se vino a vivir en Jerusal¨¦n ¨¢rabe, ?ten¨ªa alg¨²n modelo en mente?
R. Ning¨²n modelo real. Simplemente, la idea de obtener un sistema que asegurase una representaci¨®n suficiente de las minor¨ªas que permitiese legitimar su Gobierno y asegurar el proceso de paz.
P. ?Tendr¨¢ el resultado m¨¢s rasgos comunes con el liberalismo pol¨ªtico israel¨ª o con la idiosincrasia ¨¢rabe del resto de la regi¨®n?
R. Se acerca m¨¢s a la idiosincrasia ¨¢rabe que al sistema proporcional puro israel¨ª, que, debo decir, es excepcional, porque la mayor¨ªa de las f¨®rmulas proporcionales existentes en el mundo y los pa¨ªses europeos, por ejemplo, son f¨®rmulas proporcionales corregidas. Soy fan¨¢tico de las f¨®rmulas proporcionales.
P. ?Ofrecen estas elecciones garant¨ªa de libertad y limpieza?
R. S¨ª. Cualesquiera que hayan sido los problemas de realizaci¨®n del proceso electoral, estoy convencido de que las elecciones van a ser limpias, de que el ciudadano va a emitir su voto con toda libertad. Creo que el pueblo va a votar a candidatos en funci¨®n de su capacidad y que la dial¨¦ctica religi¨®n-laicismo no va a ocupar un papel. Aqu¨ª lo que va a ocupar un papel es la cuesti¨®n: ?Creamos un Estado palestino, o no? ?Lo creamos y qu¨¦ tipo de Estado vamos a crear? Tengo la impresi¨®n de que la conciencia del pueblo palestino no es la misma que existe en otros Estados que han optado por opciones islamistas.
P. ?Qu¨¦ conclusiones saca Europa de un ejercicio como ¨¦ste?
R. Que si este experimento tiene ¨¦xito puede animar a los pa¨ªses circundantes a seguir pasos similares, o sea, expresar que la democracia no tiene por qu¨¦ necesariamente poner en cuesti¨®n la estabilidad de sus sistemas,
P. El electorado, palestino parece bastante desmotivado. ?C¨®mo interpreta este s¨ªntoma de apat¨ªa?
R. M¨¢s que apat¨ªa es escepticismo. La gente desconf¨ªa por su experiencia. Los palestinos han sufrido una situaci¨®n de dominaci¨®n durante demasiado tiempo. Desconf¨ªan del poder. Y no es f¨¢cil, cuando se establecen unas estructuras pol¨ªticas nuevas, distinguir entre un dominador de otro. Para ellos la cuesti¨®n es, en parte, la misma: qui¨¦n domina, qui¨¦n manda, qui¨¦n gobierna.
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