El Zaragoza resucita ante un Valencia desfigurado
Un Valencia desfigurado permiti¨® al Zaragoza resucitar cuando menos propicia parec¨ªa la situaci¨®n. Los aragoneses, que desde el 17 de diciembre no ganaban en partido de Liga, se reencontraron a si mismos y conquistaron un triunfo que esta temporada se cotiza a precio de oro en La Romareda para los locales. Enfrente se encontraron a un Valencia que vive excesivamente pendiente de Mijatovic. Ausente el montenegrino, los levantinos carecen de referencias ofensivas, de tal modo que los lanzamientos largos hacia G¨¢lvez se convirtieron en el ¨²nico recurso para llevar el peligro hacia las inmediaciones de Juanmi.El Zaragoza, temeroso por su situaci¨®n en la tabla y sabedor de la falta de soltura de su juego, no apost¨® esta vez por buscar el juego de apoyos y relevos que le caracteriza. Los balones largos hacia Rambert e Higuera, que desbordaban. por velocidad a la defensa fueron esta vez el arma y el resultado no pudo ser mejor para el equipo, que incluso pudo golear.
Una acci¨®n fortuita, que normalmente hubiera supuesto un grave contratiempo para el Zaragoza, cambi¨® el sentido del partido. La rotura de fibras de C¨¢ceres, a los 20 minutos, propici¨® la entrada de Nayim y que el equipo aragon¨¦s se adue?ara por completo del partido. La incorporaci¨®n del ceut¨ª anul¨® la superioridad del Valencia en el medio campo, permiti¨® a Higuera moverse con libertad y a su equipo encarar de forma decidida a Bartual,
Luis Aragon¨¦s, que carec¨ªa de elementos ofensivos en el banquillo, tuvo que mantener el sistema, controlando machaconamente el bal¨®n a la espera de que. su rival cometiera un despiste. Y s¨®lo en uno de ellos lleg¨® su ¨²nico gol. Fue el del empate, pero despu¨¦s acab¨® arrollando el Zaragoza con tres m¨¢s.
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