La cartera digital del futuro
BILL GATESEl ordenador-cartera, asegura el autor, se usar¨¢ en la pr¨®xima d¨¦cada, sustituir¨¢ al dinero y proporcionar¨¢ informaci¨®n y comunicaciones m¨®viles.
Perder la cartera, o que se la roben a uno, nunca ser¨¢ una experiencia feliz. Menuda lata. Pero con la llegada del "ordenador-cartera", que preveo se haga popular en la, pr¨®xima d¨¦cada, al menos no se perder¨¢. necesariamente todo lo que hay en una cartera s¨®lo por perderla.El ordenador-cartera ser¨¢ un ordenador de bolsillo con una pantalla en color del tama?o de una instant¨¢nea que usted usar¨¢ en lugar de muchas cosas imprescindibles que lleva hoy encima -dinero, llaves, documento de identidad, tarjetas de cr¨¦dito, entradas-, as¨ª como de cosas que le proporcionan informaci¨®n y comunicaciones m¨®viles, como el reloj, los peri¨®dicos u otras lecturas, agendas de direcciones y citas, fotos, calculadora, tel¨¦fono port¨¢til y buscapersonas.
Si pierde el ordenador-cartera, reemplazar el aparato en s¨ª puede costar m¨¢s o menos lo que cuesta reemplazar una buena c¨¢mara ' -decenas de miles de pesetas, como m¨ªnimo-, as¨ª que no querr¨¢ per derlo.
Por otra parte, sustituir casi todo lo que llevaba en la cartera, desde el dinero hasta las fotograf¨ªas, ser¨¢ sencillo y barato porque la cartera s¨®lo contendr¨¢ informaci¨®n digital que puede localizarse, reproducirse o encontrarse en otro lugar.
Cuando hablo del ordenador-cartera, algunas personas expresan su preocupaci¨®n por la seguridad; otras quieren saber si alguien, fabrica ya el aparato.
?sta es la. situaci¨®n: lo de "ordenador-cartera" se refiere a un ideal, igual que la expresi¨®n "autopista de la informaci¨®n". Hoy ya hay aparatos de bolsillo que realizan algunas de las funciones del ordenador-cartera ideal, lo mismo que la Internet actual hace pensar en muchas de las caracter¨ªsticas de la autopista de la informaci¨®n definitiva.
Y los ordenadores de bolsillo de nuestros d¨ªas pueden evolucionar hasta convertirse en aut¨¦nticos ordenadores-cartera, al igual que es probable que la red Internet de hoy evolucione hasta ser la autopista ideal de la informaci¨®n.
Una vez que se alcance el ideal, ?qu¨¦ har¨¢ el ordenador-cartera por usted adem¨¢s de almacenar en forma digital todas las cosas mencionadas antes? "Mostrar¨¢ mensajes, horarios y calendarios y tambi¨¦n le permitir¨¢ leer o enviar correo electr¨®nico y faxes, consultar informes meteorol¨®gicos o de bolsa y echar partidas de juegos sencillos o complicados", escrib¨ª en mi libro Camino al futuro. "En una reuni¨®n, podr¨ªa tomar notas, comprobar sus citas, curiosear la informaci¨®n si se aburre o elegir entre miles de fotos f¨¢ciles de recuperar de sus hijos".
Para que su tama?o. sea peque?o, los ordenadores-cartera no tendr¨¢n teclados. Entender¨¢n las instrucciones habladas o las manuscritas. Un ordenador-cartera de gama alta podr¨¢ identificar su posici¨®n en cualquier lugar de la tierra a las se?ales emitidas desde los sat¨¦lites del Sistema Mundial de Posici¨®n.
Estas se?ales permitir¨¢n al ordenador-cartera indicarle la direcci¨®n (incluso oralmente) a cualquier destino, tanto si quiere retornar a casa o ir al servicio p¨²blico m¨¢s cercano ,en una ciudad extra?a.
Toda cartera debe contener billetes, y el ordenador-cartera no es una excepci¨®n. Pero el dinero se guardar¨¢ e intercambiar¨¢ de forma digital y no en papel. "Su cartera se conectar¨¢ con el ordenador de una tienda para permitir que se transfiera dinero sin ning¨²n intercambio f¨ªsico en una caja registradora", escrib¨ª. "El dinero digital tambi¨¦n se utilizar¨¢ en transacciones interpersonales. Si su hijo necesita dinero, usted podr¨ªa deslizar cinco d¨®lares de su ordenador-cartera al de ¨¦l".
Esto ser¨¢ muy ¨²til, puede que piense, pero si alguien pone sus manos en mi ordenador cartera, ?qu¨¦ le impide robarme el dinero y la informaci¨®n? Los ordenadores-cartera estar¨¢n protegidos por una contrase?a y hasta puede que sea preciso que reconozcan tina huella dactilar o una voz "impresas" para operar. Sin ella, el ordenador-cartera se negar¨¢ a facilitar dinero o informaci¨®n.
?Y los atracos? Un lector escribi¨®: "Me preocupan las implicaciones para la seguridad de personas a las que atraquen por la calle y se las obligue a vaciar sus cuentas bancarias o incluso a dar 200 d¨®lares a un ladr¨®n que las obligue a introducir sus c¨®digos de seguridad".
Podr¨ªa suceder. Sucede ahora. El papel moneda es un instrumento an¨®nimo al portador. Alguien puede robar dinero en met¨¢lico y gast¨¢rselo libremente, siempre que los billetes no est¨¦n marcados o registrados sus n¨²meros de serie. El dinero digital puede ser m¨¢s seguro. No necesita ser an¨®nimo.
Si alguien transfiere dinero digital no an¨®nimo, puede saberse f¨¢cilmente a d¨®nde se ha transferido. As¨ª podr¨ªa anularse cualquier transferencia -y la polic¨ªa tendr¨ªa una gran pista para poder resolver el delito-
Me preocupa m¨¢s la intimidad, porque la transferencia de informaci¨®n no siempre se puede anular. Alguien que pretendiera leer sus mensajes de correo electr¨®nico ajenos podr¨ªa apuntarle con una pistola. y decirle: "D¨¦me su ordenador-cartera y d¨ªgame la contrase?a".
Tendr¨ªa acceso a su informaci¨®n hasta que usted diera de baja su ordenador-cartera mediante notificaci¨®n a las autoridades, que emitir¨ªan una se?al para inutilizarlo. La capacidad para invalidar un ordenador-cartera le dejar¨¢ en mejor situaci¨®n que en la que hoy se queda cuando alguien invade su intimidad al robarle su malet¨ªn o su ordenador port¨¢til.
Microsoft trabaja en programas para una generaci¨®n de aparatos de bolsillo precursores del ordenador-cartera ideal. Prevemos que algunos fabricantes de equipos presenten aparatos de bolsillo que utilizar¨¢n estos programas, y suponemos que otras firmas de software desarrollar¨¢n aplicaciones para ellos.
Hace un a?o logramos un prototipo que nosotros y nuestros socios de hardw¨¢re decidimos no comercializar. Llegamos a la conclusi¨®n de que el equipo no era lo bastante barato y el programa no era lo suficientemente potente.
La gente no compra ordenadores de poca potencia. Es asombroso lo r¨¢pido que los ordenadores con microprocesador 486 se han quedado obsoletos. Eran lo ¨²ltimo hace un par de a?os, pero ahora se quedan fuera del mercado porque nadie los compra, ni siquiera a 800 d¨®lares (unas 100.000 pesetas).
Nos tomamos muy en serio esta lecci¨®n y retrasamos los planes de mandar nuestro programa para unidades de bolsillo.
Pasar¨¢ un a?o o as¨ª antes de que tengamos algo que combine adecuadamente un alto rendimiento, un precio razonable, bajo consumo y tama?o peque?o. Entr¨¦ tanto, otras empresas han presentado versiones tempranas de ordenadores de bolsillo, algunas muy interesantes.
Hasta1a fecha, el mercado ha sido peque?o, pero eso no significa que no haya un mercado enorme para un aparato que sea bastante mejor. Se est¨¢n apuntando montones de empresas y creo que habr¨¢ un gran mercado para los ordenadores-cartera, o sus precursores, en menos de cinco a?os. No s¨¦ exactamente qu¨¦ umbral de caracter¨ªsticas y precio har¨¢ que explote el mercado, pero estoy seguro de que se cruzar¨¢ ese umbral.
Bill Gates es presidente de Microsoft.
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