Las vict¨ªmas de delitos disponen de una creciente asistencia psicol¨®gica y jur¨ªdica
Un equipo de profesionales realiza una experiencia pionera en los juzgados de Madrid
Tres psic¨®logas, una abogada y una trabajadora social atienden en los juzgados de Madrid a las v¨ªctimas del delito o a los ciudadanos que reclaman ante los jueces.Prestan asistencia psicol¨®gica, encauzan jur¨ªdicamente las denuncias y orientan sobre las ayudas les posibles. El Servicio de Atenci¨®n a las V¨ªctimas (SAV), dependiente del decanato de los juzgados, es pionero en la Justicia espa?ola, al menos en la no transferida a las autonom¨ªas, y responde al auge reciente de la preocupaci¨®n multidisciplinar por las v¨ªctimas de los diversos delitos.
Junto al impacto del delito sufrido, el choque con el sistema judicial significa "una segunda victimizaci¨®n, a veces tan traum¨¢tica como la primera" afirma la psic¨®loga Blanca V¨¢zquez, de la cl¨ªnica m¨¦dico-forense de Madrid. "El SAV viene a cubrir ese vac¨ªo, porque el juez no suele ver inmediatamente a la v¨ªctima que a veces. requiere sobre todo atenci¨®n psicol¨®gica para tranquilizarse y asesoramiento sobre los servicios sociales utilizables, as¨ª como orientaci¨®n jur¨ªdica para encauzar su reclamaci¨®n", afirma esta experta.Frente a la vieja idea de que las v¨ªctimas s¨®lo quieren venganza, gana fuerza el criterio de que prefieren una reparaci¨®n justa. La experiencia del servicio de recepci¨®n a las v¨ªctimas, creado por el tribunal de Par¨ªs en los a?os ochenta, mostr¨® que la gente no es agresiva ni vengativa, sino que desea una reparaci¨®n. En Espa?a la reciente ley (diciembre de 199-5) de Ayuda y Asistencia a las V¨ªctimas prev¨¦ que Justicia e Interior implante oficinas en las sedes de los juzgados que lo necesiten.
Mientras tanto, hay experiencias municipales, como la de Barcelona. En Valencia, pionera en la mediaci¨®n que evita el pleito, funcion¨® durante meses un servicio a las v¨ªctimas vinculado a un solo juez y hoy existe una funcionaria que orienta al p¨²blico que acude a los juzgados, informa Francesc Bayarri.
El precedente m¨¢s similar al de Madrid funciona en el Pa¨ªs Vasco, programado y financiado por el Gobierno vasco., que tiene competencias transferidas, informa Aitor Guenaga.
La iniciativa de Madrid, que funciona desde marzo de 1995, tiene car¨¢cter multidisciplinano y se integra en la sede de los juzgados. Durante estos primeros meses han acudido una mayor¨ªa de mujeres (el 56,8 %). Las v¨ªctimas que m¨¢s acuden lo son de malos tratos (m¨¢s de un 20 % del total), estafas o enga?os (un 13 %), pleitos matrimoniales, (m¨¢s del 8 %), arrendamientos (casi un 7 %), delitos contra la libertad sexual (un 6 %) y problemas relacionados con las comunidades de vecinos ( un 4 %).
"Muchas personas acuden al SAV para que las asesoremos jur¨ªdicamente, pero a veces lo primero que necesitan es atenci¨®n psicol¨®gica primaria, aunque luego hacemos un seguimiento", explica Mar Calle, una de las psic¨®logas del grupo. "Luego hacemos un seguimiento de todos los casos". Mar Calle recuerda una mujer que pidi¨® asesoramiento para separarse de su marido: "Escuchamos atentamente su relato y observamos que el marido le hab¨ªa atado las manos y la hab¨ªa hecho objeto de agresiones sexuales. Ella no le daba importancia, por ocurrir en el matrimonio. Le informamos sobre la posible denuncia".
Mediaciones
En otra ocasi¨®n, se present¨® en el SAV una familia de la que hab¨ªa desaparecido un hijo hac¨ªa un a?o: "Gestionamos que le informaran. Llevaba muerto ocho meses. Entonces, se le orient¨® sobre la denuncia, para averiguar d¨®nde estaba enterrado y qui¨¦n era el responsable de silenciar su muerte".
La abogada Mar? Luz Hern¨¢ndez resalta un caso en el que el SAV cumpli¨® funciones de mediaci¨®n entre dos partes: "Fuimos a presentamos, como solemos hacer, al juez de guardia, y hab¨ªa en el juzgado un anciano con quien nadie sab¨ªa qu¨¦ hacer. Dec¨ªa que sufr¨ªa malos tratos de sus nietos. Y coincidi¨® que un mes despu¨¦s, sin saber nada, los nietos vinieron,. por las agresiones procedentes de su abuelo. Logramos que las denuncias se acumularan en un solo juzgado y mediamos para que las retiraran. Al mismo tiempo, enviamos al anciano a la junta municipal".
Algunas veces, la funci¨®n del SAV consiste en lograr que el juez reciba a la v¨ªctima, recuerda Hern¨¢ndez. Otras, en suplir la funci¨®n del fiscal. As¨ª, en una ocasi¨®n en que una mujer era repetidamente maltratada, para evitar que cada una de las sucesivas denuncias se saldaran con un juicio de faltas y una condena de cinco d¨ªas de arresto, el SAV promovi¨® la acumulaci¨®n de denuncias, para que la juez pudiera juzgar el caso por un delito continuado.
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