Noche gloriosa de Arlauckas

El Real Madrid obtuvo una merecida victoria en la meca del baloncesto italiano. Gan¨® al Buckler (96-115) y alcanz¨® la segunda posici¨®n en su grupo. Las pocas esperanzas que albergaban los bolo?eses fueron dinamitadas por un hombre que firm¨® esta noche unas estad¨ªsticas estratosf¨¦ricas: Joe Arlauckas. El alero del Real Madrid destroz¨® la l¨ªnea de flotaci¨®n de la vieja Virtus. El primer tiempo del Real Madrid fue casi perfecto: 22 tiros de campo convertidos sobre 25 intentados. Semejantes n¨²meros, sirvieron para dejar claro que el Real Madrid estaba en estado de gracia.Obradovic dispuso de salida un emparejamiento singular: Santi Abad se encarg¨® de anular a la estrella del Bolonia, el alero croata Komazec, el ca?onero del equipo italiano. El entrenador-presidente Bucci intent¨® basar sus premisas ofensivas en el veterano Orlando Woolridge, un jugador mucho m¨¢s efectista que efectivo. M¨¢s a¨²n en estos d¨ªas, cuando est¨¢ en el declive absoluto de su carrera. El Real Madrid decidi¨® resolver la ecuaci¨®n con su receta habitual: juego interior. Frente al destrozo sistem¨¢tico realizado por el eje Arlauckas-Savic, la Buckler s¨®lo pudo oponer los destellos del antiguo jugador de la NBA. Pero la munici¨®n italiana era muy escasa para superar la contundente actuaci¨®n del Real Madrid.

Arlauckas emergi¨® como una fuerza de la naturaleza. Sus n¨²meros de la primera parte fueron perfectos: ocho de nueve en tiros libres y 12 de 13 en tiros de campo. El dominio absoluto del alero madridista propici¨®, adem¨¢s, el desconcierto en las filas bolo?esas. Bucci agot¨® sus dos tiempos muertos pero los hombres altos del Real Madrid prosiguieron su tarea de destrucci¨®n total. La ventaja m¨¢xima del Madrid en este periodo lleg¨® a los 21 puntos (35-56). De los 58 puntos que anot¨® el Real Madrid en el primer periodo, 38 fueron de Arlauckas. La, herida de la Virtus era mortal.

En la segunda mitad, la Buckler intent¨®, a impulsos, atajar su herida pero la noche era del Real Madrid. Los italianos se acercaron a una diferencia inferior a 10 puntos (70-78, m. 31); pero el equipo madridista estaba ayer en trance. Hubo tanta magia en el aire del palacio bolo?¨¦s que una acci¨®n habitual del base Pablo Laso (servir un alley-hoop a su compa?ero Arlauckas) el bal¨®n entr¨® a canasta valiendo tres puntos. La frustraci¨®n de los italianos era tan evidente, que hasta Wooldridge jug¨® los cinco ¨²ltimos minutos de partido sin sus habituales gafas. Arlauckas, mientras tanto, cerraba su actuaci¨®n impecable: 63 tantos, una cifra impresionante en el baloncesto europeo.

El Real Madrid arras¨® en Bolonia y la actuaci¨®n de su reci¨¦n renovado alero, record¨® a muchos una legendaria actuaci¨®n de otro jugador madridista frente a otro equipo italiano la, Juve Caserta, en una final de Recopa. Ayer, Arlauckas se disfraz¨® de Drazen Petrovic.