Clinton y el primer ministro japon¨¦s examinan el futuro militar de Okinawa
Entre un partido de golf y una cena con amigos en Malib¨², el presidente norteamericano, Bill Clinton, dedic¨® el viernes una hora al primer ministro de Jap¨®n, Ryutaro Hashimoto, con quien discuti¨® una soluci¨®n para el problema creado por la presencia de bases militares estadounidenses en Okinawa. Ambos dirigentes abordaron tambi¨¦n aspectos de las relaciones comerciales y de seguridad en Asia.Quiz¨¢ porque este encuentro en la playa de Santa M¨®nica (California) era s¨®lo preparatorio de la visita oficial que Clinton har¨¢ a Jap¨®n en abril pr¨®ximo, o quiz¨¢ porque el presidente norteamericano es sensible al eco que han encontrado las denuncias de Pat Buchanan contra el comercio con Jap¨®n, pero lo cierto es que la Casa Blanca no le quiso dar a esta reuni¨®n la importancia que a otras.
La entrevista ten¨ªa inter¨¦s sobre todo para Hashimoto, quien parece haber obtenido un compromiso de Clinton de actualizar el estatus de las bases militares en Okinawa, donde ha surgido un fuerte movimiento contra la presencia norteamericana tras la violaci¨®n en septiembre pasado de una joven japonesa por tres soldados estadounidenses. "He recibido una fuerte se?al del presidente Clinton de que Estados Unidos se toma en serio el asunto de Okinawa", dijo Hashimoto.
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