Bajo el terror
MANUEL VICENTNuestros padres nos engendra ron en los refugios bajo los bombardeos; nosotros nos enamoramos durante las manifestaciones contra Franco; nuestros hijos ligan en la calle con chicas de otra oficina cuando todo el edificio en el que trabajan es desalojado por un aviso de bomba. Son muchos los que deben su dicha a una tragedia. Lo ideal ser¨ªa conocer al amado o a la amada bajo un manzano como san Juan de la Cruz, o en alg¨²n otro lugar af¨ªn. a la delicadeza del alma; por ejemplo, en la cola de la exposici¨®n de Vel¨¢zquez; en, el intermedio de un concierto de Zubin Metha en el Auditorio, pero, tal como es t¨¢n los tiempos, es m¨¢s normal que los j¨®venes crucen la primera mirada de deseo en una concentraci¨®n contra el terrorismo o en la aglomeraci¨®n frente a las va llas que pone la polic¨ªa despu¨¦s de un atentado. He aqu¨ª un signo de modernidad. A causa de un aviso de bomba acaba de ser de salojada a media ma?ana toda la Torre Picasso: cuatro s¨®tanos, 43 plantas y un helipuerto. Una multitud de secretarias, ejecutivos, guardaespaldas, empleados, creativos y personal de limpieza ha permanecido dos horas en la explanada. Algunas sociedades de valores tienen la sede en este edificio. Cientos de yuppies y brokers han seguido haciendo Aegocio en la calle a trav¨¦s del te l¨¦fono m¨®vil con unos gritos que cerraban operaciones de miles de millones mientras los presidentes de consejos de administraci¨®n con el abrigo puesto compart¨ªan con chicas de contratos basura un bocadillo servido por una cafeter¨ªa cercana, y, sentados en hilera a lo largo de los pretiles y es caleras de los jardines, los ejecutivos y sus secretarias tal vez han creado unos lazos secretos que s¨®lo nacen bajo el terror o la risa. A nuestros padres el sonido de la sirena antia¨¦rea les despierta en plena vejez los fantasmas del amor. A mi generaci¨®n a¨²n le ex cita el sabor a almendra amarga que emanaba de los gas es lacrim¨®genos. Probablemente los j¨®venes m¨¢s modernos de hoy re cordar¨¢n en el futuro un negocio redondo o una gran pasi¨®n que naci¨® de un aviso de bomba.
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