14 escritoras cuentan en una antolog¨ªa la relaci¨®n entre madres e hijas
Relatos de Chacel, Laforet, Mart¨ªn Gaite y Matute y 10 in¨¦ditos
Para algunas de las 14 autoras que participan en Madres e hijas (Anagrama) escribir un relato sobre esa relaci¨®n signific¨® un reto. Laura Freixas opt¨® por una antolog¨ªa que s¨®lo incluye mujeres pese a las etiquetas sobre "sexismo" que pod¨ªan recaer sobre la obra. "La mera expresi¨®n literatura femenina pone inc¨®modo a todo el mundo. Es m¨¢s, se utiliza como equivalente de subliteratura", asegur¨® ayer la ant¨®loga en la presentaci¨®n del libro.
?Qu¨¦ hay entre una madre y su hija? Parte de la literatura contempor¨¢nea ha girado en torno al tema. Los relatos ya publicados de Rosa Chacel, Carmen Laforet, Carmen Mart¨ªn Gaite y Ana Mar¨ªa Matute, que han sido incluidos en Madres e hijas, as¨ª lo atestiguan. Las 10 autoras restantes, entre las que se cuentan Esther Tusquets, Almudena Grandes y Luisa Castro, trabajaron de encargo y expresaron visiones que van desde la rivalidad a la adoraci¨®n pasando por el amor y el odio.Para Josefina Aldecoa, madre de una hija y abuela de un nieto, fue extraordinariamente f¨¢cil redactar Espejismo porque "le doy muchas vueltas al tema, tanto que ya lo hab¨ªa tocado otra vez en Mujeres de negro". Su cuento refleja la ausencia de f¨®rmulas maravillosas en la educaci¨®n de los hijos y las mil maneras de equivocarse. Para Aldecoa, una de las razones por las que no se ha escrito m¨¢s sobre las relaciones entre madres e hijas se debe a "la posici¨®n de la mujer en el mundo, donde todav¨ªa hay pa¨ªses donde se considera algo negativo tener hijas. La figura del hombre ha sido preponderante y muchas veces a la propia mujer el hecho de parir un ni?o le ha parecido m¨¢s importante. Eso y el hecho de que no haya edipos y s¨ª rivalidad podr¨ªa justificar algunas ausencias literarias".
Variedad
A Soledad Pu¨¦rtolas, madre de dos hijos, escribir La hija predilecta fue un reto que le encant¨® asumir. "No lo dud¨¦ un segundo. Fue como un empuj¨®n. En dos de mis obras anteriores hab¨ªa tratado el tema de padres e hijos y esto era algo que deseaba hacer desde hac¨ªa tiempo. Reconozco que es un tema dif¨ªcil y que pesa mucho si no se quiere hacer una concesi¨®n. He inventado una madre que pod¨ªa expresar algo de lo que siento". Para la autora de La vida oculta, en esta antolog¨ªa tambi¨¦n pod¨ªan haber participado escritores. "La ant¨®loga cree que existen razones para hablar de literatura femenina, pero yo cada vez tengo menos claro lo de las clasificaciones. S¨ª creo que cuanta mayor variedad hay m¨¢s opiniones se expresan".
"El problema cuando se habla de literatura femenina es que no somos capaces de separar la realidad de los juicios de valor", -argumenta Freixas, ant¨®loga y editora de Madres e hijas. "La desvalorizaci¨®n de lo femenino existe en todos los ¨®rdenes. Para m¨ª la literatura no es asexuada. Hay una tendencia a creer que la mujer se incorpora al mundo actual sin matices y yo creo que no es as¨ª. Estamos feminizando la cultura".
Freixas reconoce que las mujeres, que son mayoritariamente lectoras de novelas, est¨¢n muy presentes en algunos campos, como el g¨¦nero er¨®tico, mientras escasean en otros como el ensayo y la cr¨ªtica. "Dominan totalmente en biograf¨ªas: son sujeto y autoras de la mayor parte", dice.
(Literatura femenina)
Primero se plante¨® como debate, luego fue un coloquio y al final se convirti¨® en una discusi¨®n entre Vicente Verd¨² y cuatro escritoras. La presentaci¨®n del libro Madres e hijas en la Biblioteca Nacional acab¨® en un agrio debate sobre si la literatura femenina tiene o no rasgos espec¨ªficos. Verd¨², que deb¨ªa actuar como moderador y fue provocador, levant¨® los ¨¢nimos de Laura Freixas, Josefina Aldecoa, Soledad Pu¨¦rtolas y Clara S¨¢nchez cuando asegur¨® que existe una literatura de mujeres como hay una literatura inglesa. "Es m¨¢s emotiva, m¨¢s espont¨¢nea, est¨¢ basada en un lenguaje m¨¢s directo, es menos reflexiva y est¨¢ m¨¢s falta de humor", asegur¨®, al tiempo que se mostraba admirador de un pu?ado de escritoras.La chispa salt¨® cuando Verd¨² a?adi¨® que a la hora de evaluar el producto masculino y femenino el resultado era claramente inferior por la parte de las mujeres. Le respondi¨® Soledad Pu¨¦rtolas, asegurando que cuando escribe siente "como persona". Le apuntill¨® Josefina Aldecoa, alegando que "al verdadero escritor s¨®lo le interesa el ser humano". Clara S¨¢nchez le record¨® una cita del siglo XVIII que aseguraba que no es veros¨ªmil atisbar rasgos de ingenio a seres que no los pueden tener como las mujeres y los criados. Y Freixas, defensora de la literatura femenina, asegur¨® que siempre que se produce "nos atribuyen una intenci¨®n feminista u oportunista".
La extra?a discusi¨®n concluy¨® como deber¨ªa haber empezado, con un an¨¢lisis de las relaciones entre madres e hijas. Las escritoras coincidieron en que las relaciones en tiempos pasados con sus respectivas madres fueron historias de silencio y que las actuales con sus hijas o hijos son mucho m¨¢s intensas.
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