"Todo se divide con criterios ¨¦tnicos"
Haris Silajdzic, de 52 a?os, se retir¨® en enero del Gobierno por entender que se utilizaban m¨¦todos totalitarios. Ahora trabaja para crear un partido de centro.
ENVIADO ESPECIAL El ex primer ministro de Bosnia, Haris Silajdzic, ha cambiado su solemne despacho oficial ende Sarajevo, la capital bosnia, por otro convencional en un edificio de oficinas desde el que prepara el lanzamiento de un nuevo partido pol¨ªtico de centro.
Perdido el rango, pero no la relevancia -a juzgar por la ristra de peticiones de entrevistas period¨ªsticas-,el ex primer ministro bosnio se conforma con un secretario personal, una administrativa y un guardaespaldas. Es pausado y lac¨®nico, y mantiene un aire caracter¨ªstico de estar permanentemente abrumado.
Pregunta. ?Por qu¨¦ abandon¨® usted el Gobierno?
Respuesta. Porque este sistema est¨¢ empezando a parecerse a una mala copia del sistema antiguo. Bosnia se merece poder elegir la democracia despu¨¦s de todo lo que ha pasado. Creo que la democracia es inherente a Bosnia. Por nuestra situaci¨®n y nuestra historia somos un pa¨ªs de disidentes, con esp¨ªritu de vanguardia, al que no se puede enjaular.
P. ?El partido gobernante no es democr¨¢tico?
R. Ya no. El Partido de Acci¨®n Democr¨¢tica (SDA) lo fue en un comienzo. Pero una formaci¨®n en cuyo comit¨¦ ejecutivo tiene usted a generales, polic¨ªas, sacerdotes, empresarios..., no puede ser un partido democr¨¢tico.
P. ?C¨®mo son sus relaciones con el presidente Alia lzetbegovic y con el nuevo primer ministro, Hasan Muratovic?
R. Normales con los dos.
P. ?Est¨¢ organizando su propio partido para concurrir a las elecciones de este a?o?
R. Estoy trabajando en ello. Ser¨¢ un partido de centro, democr¨¢tico, cuyo objetivo es la reintegraci¨®n de Bosnia-Herzegovina. Subrayo lo de la reintegraci¨®n porque lo que est¨¢ sucediendo sobre el terreno es lo contrario: la partici¨®n. En la Federaci¨®n [de los musulmanes y croatas de Bosnia] no existen cantones, sino, de hecho, dos territorios nacionales. Mi objetivo es la libertad y la democracia, y ¨¦sos ser¨¢n los rasgos principales de mi partido.
P. ?Libertad y democracia no son conceptos excesivamente gen¨¦ricos como para basar en ellos el programa de un partido?
R. Es cierto, pero de momento no tenemos otros mejores. Los llamados partidos democr¨¢ticos han abierto muchos campos de concentraci¨®n en Bosnia. Los acuerdos de Dayton ofrecen realmente la posibilidad de reintegraci¨®n del pa¨ªs.
P. ?Puede precisar?
R. Me refiero a la vertebraci¨®n social, econ¨®mica y pol¨ªtica de este territorio. Ahora, todo se est¨¢ dividiendo con criterios ¨¦tnicos.
P. ?Son posibles, en las condiciones actuales de Bosnia-Herzegovina, unas elecciones medianamente representativas?
R. Son posibles, pero depende de c¨®mo se controlen y de la libertad real de los medios informativos. A pesar de los desplazados, los refugiados, el censo, creo que en este momento se pueden hacer. La libertad de informaci¨®n es muy importante para las elecciones. Aqu¨ª existen los llamados medios estatales, al servicio d¨¦ uno o dos partidos, y algunos otros de ¨¢mbito muy reducido. Yo, por ejemplo, no he tenido oportunidad de explicar en la televisi¨®n estatal los motivos de mi dimisi¨®n al frente del Gobierno, a pesar de haberlo sol¨ªcitado.
P. ?Cree usted que el Partido de Acci¨®n Democr¨¢tica representa una amenaza totalitaria?
R. Porque apuntan claramente esas tendencias es por lo que decid¨ª no formar un nuevo Gobierno.P. ?Se aplican satisfactoriamente los acuerdos de paz que se firmaron en Dayton?
R. En una buena medida s¨ª, pero es muy importante saber si nos dirigimos hacia la integraci¨®n o hacia la desintegraci¨®n del pa¨ªs. Ahora todav¨ªa estamos al comienzo.
P. ?Funciona o funcionar¨¢ la. federaci¨®n con los croatas?
R. La federaci¨®n entre croatas y musulmanes no existe. Llevamos dos a?os de disoluci¨®n continua de los acuerdos de Washington que la crearon. Es obvio que los dirigentes croatas no la desean. Y tambi¨¦n lo es que aumentan estas mismas tendencias en el liderazgo bosnio.P. ?Puede ser m¨¢s expl¨ªcito en ese tema?
R. Ya he dicho lo suficiente.
P. ?Croacia y Serbia tienen ambiciones territoriales en Bosnia?
R. Ellos dicen que no, pero lo que vemos sobre el terreno es justamente lo contrario.
P. ?Cree usted en el modelo constitucional acordado para Bosnia, con una entidad croatomusulmana y otra serbia?
R. Yo creo que puede salir adelante, pero hace falta muy buena voluntad de las partes. El modelo puede ir mejor¨¢ndose con el tiempo. Pero lo aut¨¦nticamente importante es que no haya pretensiones territoriales sobre Bosnia.
P. En una entrevista con este diario el a?o pasado se mostr¨® muy pesimista. Ahora deriva hacia posiciones idealistas.
R. Es usted quien debe decidir si soy un idealista o si s¨®lo doy esa impresi¨®n.
Un historiador ambicioso con impecable pedigr¨ª
Haris Siladjzic anunci¨® su renuncia a formar un nuevo Gobierno el 21 de enero pasado. A partir de entonces, todos los denuestos cayeron sobre el hombre que acompa?¨® al ahora enfermo presidente Alia Izetbegovic durante las negociaciones de Dayton, en noviembre de 1995. "Dictador", para el peri¨®dico Dnevni Avaz, ¨®rgano oficioso del partido gobernante, Acci¨®n Democr¨¢tica (SDA, nacionalista musulm¨¢n). "Caprichoso" y "ego¨ªsta", seg¨²n Izetbegovic. "Colaborador de los extremistas croatas en opini¨®n de dirigentes del SDA. O simplemente demasiado ambicioso.La radio y la televisi¨®n estatales amplificaron las acusaciones contra este historiador de pedigr¨ª impecable -hijo del muft¨ª de la mayor mezquita de Sarajevo, musulm¨¢n, estudioso en Egipto y Estados Unidos-, que a los ojos de muchos bosnios, y en especial de los sectores m¨¢s liberales de la capital, represen ta una concepci¨®n moderna del Estado y la defensa a ultraza de una sociedad multi¨¦tnica. Silajdzic -varias veces divorciado, seductor y amigo del buen vivir- ha defendido siempre una Bosnia de ciudadanos, al margen de sus creencias o su lugar de nacimiento. Sus convicciones pol¨ªticas le han granjeado el apoyo abierto de Gobiernos occidentales.
La salida de Silajdzic del Gobierno, al que sirvi¨® como titular de Exteriores antes de ser primer ministro a comienzos de 1994, estaba cantada desde hace m¨¢s de un ano, a medida que se acentuaban sus divergencias con el ala m¨¢s radical del partido de Izetbegovic y al que pertenec¨ªa.
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