"La prohibici¨®n de patentar genes dar¨ªa lugar a secretismos"
Craig Venter, fundador, presidente y director del Intituto de Investigaci¨®n Gen¨®mica de Rockville en Maryland (Estados Unidos), es el cient¨ªfico que ha secuenciado por primera vez todo un organismo vivo. Considera Venter que el proyecto del genoma parec¨ªa estar dominado por EE UU, y esto no le parece bien; "me satisface ver que est¨¢ comenzando a ser un proyecto democr¨¢tico internacional y a su vez coordinado. Cuantos m¨¢s cient¨ªficos y pa¨ªses participen, mejor para todos".Pregunta. ?Cu¨¢les son los beneficios del proyecto genoma para la humanidad y para las empresas?
Respuesta. Esperemos que las dos cosas vayan paralelas. La ventaja para la humanidad proviene del entendimiento de los procesos evolutivos. Comenzamos a entender realmente de d¨®nde venimos y c¨®mo se realiz¨® la evoluci¨®n. Para ello es importante que trabajemos con genomas de diferentes especies. Otro beneficio es el conocimiento de enfermedades, el desarrollo de nuevos m¨¦todos de diagn¨®stico y tratamientos para una gran variedad de enfermedades. Hace cuatro a?os, la industria farmac¨¦utica no estaba involucrada en la investigaci¨®n gen¨®mica. Ahora, todas las empresas est¨¢n implicadas de una forma u otra.
P. ?Cu¨¢ndo piensa que se notar¨¢n los beneficios?
R. Algunas aplicaciones surgen de inmediato al estudiar las enfermedades gen¨¦ticas. La investigaci¨®n que nosotros hemos estado haciendo no es gen¨¦tica, sino gen¨®mica. Mientras que la investigaci¨®n gen¨¦tica se ocupa de la b¨²squeda de tratamientos concretos de enfermedades, la gen¨®mica es el estudio del genoma completo, de su bioqu¨ªmica, es el entendimiento de todos los genes, sus respectivas funciones y las interrelaciones existentes en tre ellos. Todo esto nos permitir¨¢ encontrar soluciones para muchas enfermedades. No obstante, la gen¨¦tica corre un gran peligro: lo primero que se obtiene de su estudio son diagn¨®sticos, como, por ejemplo, ya existen para la enfermedad de Huntington o el c¨¢ncer de mama, pero sin conocer a¨²n alg¨²n tratamiento eficaz. La sociedad debe plantearse c¨®mo.proteger a las personas afectadas. En EE UU, la gente que da positivo en el test de esta enfermedad puede perder su trabajo o su seguro. No se puede predecir cu¨¢nto tiempo necesitaremos para encontrar tratamientos, pero por lo menos nos llevar¨¢ un siglo, hasta entender por completo el funcionamiento de todo el material que descubramos. La sociedad va a tener que encontrar la manera de digerir o desechar la informaci¨®n que se va obteniendo.
P. Por la escasa participaci¨®n de espa?oles en este congreso, se podr¨ªa pensar que en Espa?a no se le da mucha importancia.
R. Espa?a ha sido uno de los pioneros en iniciar el debate sobre los aspectos ¨¦ticos, como, por ejemplo, Grisol¨ªa.
P. Usted emplea una nueva estrategia para la secuenciaci¨®n gen¨®mica y avanza muy r¨¢pido.
R. S¨ª, tuve unas ideas de c¨®mo abordar el tema. A finales de los ochenta secuenci¨¢bamos cromosomas y tard¨¢bamos mucho en interpretar los datos. Ah¨ª se me ocurri¨® comenzar con los EST [expressed secuence tags]. Utilic¨¦ s¨®lo el ARN [¨¢cido ribonucleicol mensajero producido en el n¨²cleo. S¨®lo un 3% del genoma codifica para genes. Mi idea era emplear la c¨¦lula como un superordenador. Las c¨¦lulas saben encontrar el peque?o porcentaje que suponen los genes y las fracciones responsables de ¨¦stos. Adem¨¢s, comenc¨¦ a secuenciar genomas de microbios.
P. Los Institutos Nacionales de Salud (NIH), de EE UU, rechazaron en un primer momento sus m¨¦todos.
R. S¨ª, pensaban que mi modo de abordar el tema era imposible. Tuvimos que demostrarles que estaban equivocados; luego, todo el mundo se ha adaptando r¨¢pidamente, lo cual es muy positivo. Hasta entonces, no hab¨ªa ning¨²n genoma secuenciado. Cuando obtuvimos el primer genoma de bacteria, se vio que la informaci¨®n pod¨ªa ser muy ¨²til. Lo m¨¢s importante es que al tener m¨¢s genomas, la informaci¨®n nos da una nueva idea de lo que es la vida y su evoluci¨®n.
P. Usted gener¨® una gran pol¨¦mica cuando, por primera vez, trat¨® de patentar secuencias del genoma.
R. Esto no es del todo correcto, ya que ocurri¨® por orden de los NIH. Incluso si se hubiera logrado, yo no habr¨ªa obtenido ning¨²n beneficio. Y trat¨¦ de impedirlo. Cuando insistieron y quer¨ªan mi cooperaci¨®n, acced¨ª, con la condici¨®n de que anunciaran inmediatamente de forma p¨²blica lo que se propon¨ªan, porque consideraba que era un tema social que nos afecta a todos. Aunque yo fui quien luch¨® contra esto, todo el mundo me culp¨®.
El tema de patentar el material gen¨¦tico es muy importante y complicado. Su prohibici¨®n dar¨ªa lugar al secretismo. Algunos datos se ocultan por miedo a que se rechace su registro. Y no se obtendr¨¢n nuevos diagn¨®sticos y terapias sin alg¨²n tipo de propiedad intelectual. Por lo general, las compa?¨ªas, incluida la que yo fund¨¦, tratan de patentar todo lo que sea posible. Lo mismo ocurre en la industria farmac¨¦utica. Es una medida de defensa, ya que no saben qu¨¦ va a ser importante. La ¨²nica forma de obtener nuevos medicamentos en ausencia de la propiedad intelectual ser¨ªa que los financiara el Gobierno, lo que provocar¨ªa una tremenda subida de los impuestos. El actual sisterna no es tan malo. La l¨ªnea de HUGO me parece ingenua: no les gusta la idea de patentar ADN, porque creen que fomentar¨¢. el secretismo, pero, aunque resulte parad¨®jico, es exactamente lo contrario.
P. ?Cu¨¢ndo se terminar¨¢ de secuenciar el genoma humano?
R. Para conseguir acabarlo en los pr¨®ximos siete a?os, como pretenden muchos, habr¨ªa que secuenciar 500 millones de pares de bases al a?o. Lo m¨¢ximo que hasta hoy ha conseguido secuenciar alg¨²n grupo es alrededor de un mill¨®n. Para m¨ª, ya ser¨ªa una satisfacci¨®n si estuviese finalizado para el a?o 2007.
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