Escohotado aboga por un discurso que estimule la responsabilidad ante el consumo de drogas

Los j¨®venes necesitan informaci¨®n sobre la droga para actuar con responsabilidad. Es lo que piensa Antonio Escohotado, autor de Historia elemental de las drogas, un recorrido por los tipos y aplicaciones de los estupefacientes desde la antig¨¹edad hasta nuestros d¨ªas. "Hablar de las drogas requiere un discurso lo m¨¢s apacible posible, desmitol¨®gizado, que estimule el sentido de la responsabilidad de los j¨®venes en vez del de la simple obediencia", dice el fil¨®sofo.

En Historia elemental de las drogas, Antonio Escohotado ha conseguido condensar las 1.400 p¨¢ginas de su Historia general de las drogas aparecida en 1989. "Me convenc¨ª de que hac¨ªa falta un texto menor, que fuese f¨¢cil de entender, y acercar el mundo de los estupefacientes al p¨²blico no especializado", argumenta el fil¨®sofo.La nueva obra, publicada por Anagrama, est¨¢ actualizada con datos sobre las drogas aparecidas hasta 1995 e incluye un ap¨¦ndice "con bastante morbo", seg¨²n Escohotado. Para no fomentar la total parcialidad en cuanto a la informaci¨®n que suele darse en los medios de comunicaci¨®n sobre el consumo y venta de drogas, el autor recopila m¨¢s de 150 titulares de sucesos en !os que polic¨ªas o funcionarios p¨²blicos se han visto implicados en el tr¨¢fico de drogas, a modo de respuesta al cap¨ªtulo dedicado a las reacciones que provoca la persecuci¨®n policial.

Novedades

La gran variedad de nuevos estupefacientes surgidos en esta d¨¦cada es, a juicio del autor, una de las caracter¨ªsticas del panorama actual del mundo de la drogadicci¨®n. "La sintesis qu¨ªmica promete mucho", asegura el fil¨®sofo. "Dentro de muy poco tiempo", augura el autor, "un porcentaje de qu¨ªmicos se dedicar¨¢n a la s¨ªntesis de drogas de dise?o y un porcentaje de agricultores al cultivo de plantas estupefacientes porque los pa¨ªses tienden cada vez m¨¢s hacia el autoabastecimiento".

A juicio de Antonio Escohotado, el negocio de la droga, ha aumentado de forma espectacular no s¨®lo gracias a la eficacia de los traficantes y a la cooperaci¨®n de algunos gobernantes, sino tambi¨¦n por la erosi¨®n del concepto "droga igual a rnuerte".

Detener el consumo no pasa por las campa?as contra la drogadicci¨®n, ya que, seg¨²n el autor, pueden funcionar como contrapropaganda". "La reacci¨®n de la gente joven puede ser la de pensar: 'Ah¨ª est¨¢ el tomate, hay que probarlas", argumenta.

El fil¨®sofo asegura tambi¨¦n en su libro que las drogas son un campo "potencialmente ligado a las Bellas Artes" por sus efectos estimulantes. "Es como tocar el piano con tus neuronas", argumenta.

Escohotado explica que su libro sirve para que la gente se del cuenta de que "tomar drogas no es una excusa para hacer el gamberro o encajar en el clich¨¦ de ser progre. Tomar drogas es un reto personal", puntualiza.