Terenci Moix reedita en catal¨¢n 'El d¨ªa que muri¨® Marilyn' sin cortes de censura
A Terenci Moix no le ha sido f¨¢cil revisar a fondo su novela emblem¨¢tica El d¨ªa que va morir Marilyn (El d¨ªa que muri¨® Marilyn), considerada un hito generacional. La primera versi¨®n, que no lleg¨® a publicarse, la redact¨® en castellano cuando ten¨ªa 22 a?os, en 1965. En 1969 apareci¨® la versi¨®n catalana y fue un ¨¦xito que contribuy¨® a renovar la literatura catalana de la ¨¦poca. Ahora, 27 a?os despu¨¦s, Terenci ha querido reescribirla: ha hecho una revisi¨®n a fondo del lenguaje y ha restituido fragmentos que suprimi¨® la censura."La revisi¨®n del lenguaje", afirma Terenci, "Me ha permitido limar toda la ret¨®rica que hab¨ªa en el libro y tambi¨¦n recuperar lo que la censura me hizo quitar entonces. El personaje de Jordi Llovet, por ejemplo, se define ahora claramente como homosexual, mientras que en la versi¨®n anterior quedaba como una cosa rara, como algo muy ingenuo".
En efecto, para huir de ambig¨¹edades, Terenci ha a?adido esta frase al final del libro tercero: "S¨®c per fi un maricon que est¨¤ molt content de ser-ho" ("Soy por fin un maric¨®n que est¨¢ muy contento de serlo"). Se acabaron las medias tintas. "Es que antes quedaba como un angelito", se defiende Terenci, "y mi especialidad no es precisamente pintar angelitos".
En otra escena que suprimi¨® la censura, y que ahora recupera la nueva edici¨®n de Edicions 62, aparece un falangista en un meubl¨¦ que no se excita si una tal Lupe no le mea en las heridas. El final tambi¨¦n ha sido objeto de revisi¨®n por parte de Terenci, que ha querido apartar las ambig¨¹edades a las que le oblig¨® la censura.
La revisi¨®n ling¨¹¨ªstica ha permitido a Terenci cambiar los arca¨ªsmos entonces en boga por un lenguaje m¨¢s popular. "En aquella ¨¦poca", se?ala, "los escritores no escrib¨ªan, sino que iban a salvar la lengua. Y yo para eso nunca he servido. ?La lengua que la salve Coromines! ?O TV-3! Cuando empec¨¦ en catal¨¢n se escrib¨ªa para salvar la lengua y yo soy un escritor, no un redentor".
Babelia
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