Kohl y Chirac piden a Delors que vuelva a la pol¨ªtica europea como "cerebro de proyectos"

Vuelve el mito. El acuerdo pol¨ªtico para el regreso a la pol¨ªtica europea del ex presidente de la Comisi¨®n Jacques Delors est¨¢ ya sellado entre los principales l¨ªderes de laUni¨®n Europea (UE), ha sabido EL PA?S en fuentes diplom¨¢ticas. Faltan s¨®lo los detalles t¨¦cnicos: una fundaci¨®n p¨²blica para generar ideas y proyectos a medio plazo cuya presidencia se ofrece a Delors. El padrino de esta vieja idea, el canciller alem¨¢n, Helmut Kohl, ha tenido que vencer la denodada resistencia del presidente franc¨¦s, Jacques Chirac. Pretende ahora asociar a Felipe Gonz¨¢lez en alg¨²n proyecto similar.

La idea de esa fundaci¨®n empez¨® a germinar en 1994, cuando Delors renunci¨® a una tercera presidencia de la Comisi¨®n. Kohll y Fran?ois Mitterrand, deseosos de seguir contando con su iniciativa y empuje pol¨ªticos, fueron sus abanderados, pero decidieron esperar. Primero, para que Delors deshojara la margarita -optar o no a la presidencia francesa-; despu¨¦s, para que se aposentase la nueva Comisi¨®n de Jacques Santer.Pero el sucesor de Mitterrand, Jacques Chirac, se opuso f¨¦rreamente al proyecto. Los Quince recuerdan los ¨¢cidos comentarios de Chirac en la minicumbre del 9 de junio pasado en Par¨ªs. El flamante presidente atribuy¨® entonces las culpas de los problemas de la UE a "la burocracia de Bruselas" y se ensa?¨® con su s¨ªmbolo durante 10 a?os, Delors. "Nadie le contest¨®, porque era una cena en el El¨ªseo de la que Chirac era anfitri¨®n, pero el proyecto entr¨® en dique seco", recuerda un alto personaje.

Kohl no es un alguien que abandone sus proyectos. Adem¨¢s, la satisfacci¨®n por la elecci¨®n de su candidato Santer para la Comisi¨®n no le hac¨ªa olvidar la necesidad de enriquecer el tono prudente del nuevo ejecutivo con la audacia de Delors. Esper¨® a que Chirac, tras las pulsiones nacionalistas del inicio de su mandato, se decantase del lado del europe¨ªsmo. E insisti¨® en el proyecto, tanto por v¨ªa diplom¨¢tica como directa. Encontr¨® un aliado de escaso relumbre pero muy eficaz en el ministro franc¨¦s de Asuntos Europeos, Michel Barnier.

Barnier argument¨® que, para la pol¨ªtica interna francesa, Delors no era un enemigo de Chirac. Quedaba lejos su eventual candidatura, y su compromiso con los socialistas es m¨¢s de orientaci¨®n que de primera l¨ªnea. Adem¨¢s, la rebeli¨®n social de diciembre evidenciaba el peligro de una deriva populista anti-Maastricht. Que s¨®lo se puede combatir agrupando a todos los europe¨ªstas franceses, reforzando la entente francoalemana y dando nuevas perspectivas a la UE. Chirac asumi¨® estos argumentos y cerr¨® filas. con la idea de Kohl. El principal obst¨¢culo al retorno de Delors quedaba desbloqueado.

La fundaci¨®n se plantea como un organismo, posiblemente radicado en Par¨ªs, a medio camino de un think tank (una c¨¦lula de prospectiva, aunque sin solaparse con la existente en Bruselas) y de un gabinete de elaboraci¨®n de planes e iniciativas a medio plazo. Una de sus principales funciones es operar en el dise?o de "la complicidad de la sociedad europea", asunto en el que Delors se mostr¨® ducho en sus mandatos, creando grupos de sabios y otras redes p¨²blico-privadas para lanzar debates. El proyecto prev¨¦ dotarla de un reducido pero selecto n¨²mero de expertos y financiarla con cargo al presupuesto comunitario, es decir, con apoyo de la Comisi¨®n y respaldo del Parlamento Europeo.

Debates comunitarios

En los 14 meses transcurridos desde que dej¨® Bruselas, Delors ha realizado distintas actividades, como conferenciante y articulista, tambi¨¦n sobre cuestiones de pol¨ªtica interna francesa. Pero ha participado en algunos de los debates comunitarios sobre todo sobre la moneda ¨²nica, proponiendo completarla con un pacto de confianza para el empleo- y ha aceptado la presidencia del Colegio de Europa, en Brujas, semillero de especialistas en tem¨¢tica comunitaria. Si la puesta en pr¨¢ctica del acuerdo pol¨ªtico no tropieza con dificultades adicionales, Delors deber¨¢ concentrarse en esta nueva tarea europea. A hora es la Comisi¨®n quien tiene la palabra" como responsable de arbitrar los medios t¨¦cnicos de la nueva fundaci¨®n. Pese a sus distintos caracteres y estilos, a Santer y Delors les une una buena amistad, que se extiende a sus esposas.La creaci¨®n de esta fundaci¨®n y el encargo de la misma a Jacques Delors, aunque constituye un objetivo en s¨ª misma, es tambi¨¦n la primera piedra de un plan, a¨²n difuso, del canciller Kohl, que pretende asentar la construcci¨®n comunitaria en una "red de l¨ªderes de opini¨®n europe¨ªstas complementaria a la oficial". Cuenta con asociar a ella al presidente en funciones del Gobierno espa?ol, Felipe Gonz¨¢lez, a quien ha invitado para reunirse con ¨¦l pr¨®xima mente en Bonn.