Falsa imagen

Despu¨¦s de ver en Televisi¨®n Espa?ola el pasado s¨¢bado d¨ªa 20 de abril el primer cap¨ªtulo de la promocionada serie Turno de oficio, 10 a?os despu¨¦s, en la que se describ¨ªa el ambiente de un juzgado basado en funcionarios adscritos al mismo en poses tan ejemplares como la lectura de un prestigioso diario deportivo, pint¨¢ndose las u?as o tratando sin la m¨¢s m¨ªnima educaci¨®n a las personas que requer¨ªan su atenci¨®n, nos vemos en la obligaci¨®n moral de invitar a los (suponemos que afamados) guionistas y director de la citada serie a visitar nuestro centro de trabajo, o cualquier otro ¨®rgano jurisdiccional de los que conocemos, para comprobar a cu¨¢ntos funcionarios judiciales sorprenden en actitudes an¨¢logas a las citadas anteriormente.Comprendemos que la imagen cutre y casposa con que son tratados habitualmente los juzgados y oficinas p¨²blicas en general en las emisiones televisivas y cinematogr¨¢ficas pueden ser ¨²tiles a sus responsables con vistas a dar una pretendida imagen costumbrista, pero es una imagen muy alejada de la realidad en producciones que pretenden reflejar, precisamente, la realidad actual y se quedan casi en la ¨¦poca de Bienvenido, mister Marshall, pero sin gracia.

Si los citados profesionales aceptan la visita expresa podr¨¢n comprobar por sus propios ojos c¨®mo 763 expedientes se tramitan solos o se consigue dictar 970 sentencias (ambos datos son correspondientes al juzgado cuyos funcionarios suscriben la presente carta y al a?o 1995) pint¨¢ndose las u?as, leyendo el peri¨®dico, etc¨¦tera.

Despu¨¦s Podr¨ªamos ponernos a hablar de los artistas que viven de las subvenciones del Estado (y por tanto pueden considerarse funcionarios), de la calidad de sus producciones y de nuestro m¨ªsero sueldo, pero ¨¦sa ser¨ªa ya otra historia. . Funcionarios del Juzgado de Primera Instancia n¨²mero 5 (familia) de