"Nos preocupa mucho lo que sucede en Kosovo"

ENVIADO ESPECIAL, Kiro Gligorov recibe a EL PA?S en un gran despacho rectangular instalado en el ajado edificio del Parlamento de Macedonia, en el centro de Skopje. En el rostro del presidente y fact¨®tum de Macedonia -de 79 a?os- es bien visible la huella dejada por el atentado que estuvo a punto de costarle la vida en octubre de 1995 y le hizo perder la visi¨®n del ojo derecho.

Pregunta. ?Cree que lo peor para Macedonia ha pasado?

Respuesta. La situaci¨®n internacional de Macedonia es ahora m¨¢s clara y fuerte que antes. Formamos parte de pr¨¢cticamente todas las organizaciones internacionales, tenemos relaciones diplom¨¢ticas con la Uni¨®n Europea y tambi¨¦n hemos logrado posibles soluciones con todos nuestros vecinos [Serbia, Bulgaria, Grecia y Albania]. La cooperaci¨®n con ellos es nuestra prioridad pol¨ªtica. Se han levantado las sanciones contra Serbia y Montenegro y nuestras carreteras hacia Europa occidental est¨¢n abiertas. Grecia ha finalizado su embargo contra nosotros. Estamos en el Consejo de Europa y en la Asociaci¨®n para la Paz [patrocinada por la OTAN].

P. ?Espera la normalizaci¨®n de relaciones con Grecia?

R. Ignoro si se producir¨¢ muy pronto, pero la firma de un acuerdo provisional abre buenas perspectivas en todos los sentidos. Por nuestra parte, haremos todo lo que est¨¦ en nuestra mano. Las fronteras est¨¢n ahora abiertas de nuevo y la cooperaci¨®n puede desarrollarse.

P. ?Cu¨¢l es la situaci¨®n econ¨®mica de Macedonia?

R. Dif¨ªcil y compleja. A pesar de las dificultades objetivas de los ¨²ltimos cinco a?os, con una casi par¨¢lisis social, hemos ido privatizando, reformando el sistema bancario, avanzando hacia la econom¨ªa de mercado. Creo que tenemos el apoyo de las instituciones financieras internacionales. Nuestra divisa [dinar macedonio] es fuerte y estable y la inflaci¨®n est¨¢ controlada. La creaci¨®n de riqueza no es tan satisfactoria, depender¨¢ del capital privado, de los inversores exteriores y del apoyo que las instituciones internacionales est¨¦n dispuestas a prestar a Macedonia. El capital dom¨¦stico es virtualmente inexistente.

P. Los albaneses de Macedonia acusan al poder de mantenerles en un gueto ling¨¹¨ªstico, educativo, y laboral.

R. Todos ellos tienen garantizada la educaci¨®n primaria y secundaria en alban¨¦s e intentamos encontrar soluciones para facilitar su educaci¨®n superior. El problema principal es el bajo nivel de su ense?anza primaria y secundaria, por lo que sienten que no tienen la mismas oportunidades para acceder a la Universidad.

P. ?Terne usted la situaci¨®n en Kosovo?

R. S¨ª, estamos muy preocupados con lo que viene sucediendo. De vez en cuando tenemos contactos con Ibrahim Rugova, el l¨ªder de los albaneses en Kosovo [vecina regi¨®n serbia donde el 90% son albaneses], y siempre intentamos resaltar que lo m¨¢s importante es abrir un di¨¢logo con Belgrado. Desgraciadamente, hasta ahora no ha sucedido. La relaci¨®n de fuerzas en Kosovo est¨¢ cambiando a favor de los albaneses que creen necesarias actitudes m¨¢s radicales, que piden al m¨ªnimo un Estado independiente o bajo protectorado internacional. La ¨²ltima vez que habl¨¦ con el se?or Rugova fue hace 20 d¨ªas, tras su viaje a capitales europeas y a Estados Unidos. Mi impresi¨®n es que estaba decepcionado por la falta de apoyo para conseguir un Estado independiente. Le pregunt¨¦ por qu¨¦ no tomaba la iniciativa para dialogar con Belgrado y me dijo que la respuesta era siempre la misma: los albaneses de Kosovo deben respetar primero la Constituci¨®n y las leyes serbias.

P. ?Macedonia va a incrementar su cooperaci¨®n militar con Estados Unidos?

R. Sin duda. Ahora formamos parte de la Asociaci¨®n para la Paz y hemos establecido un memor¨¢ndum de relaciones bilaterales. Est¨¢ creciendo, principalmente en el terreno t¨¦cnico y la formaci¨®n de nuestros militares. No hay, por el momento, venta de armamento.

P. ?Son buenas las relaciones con Bulgaria y Albania?

R. Esencialmente lo son. Nos reconocemos mutuamente y con ambos vecinos mantenemos relaciones plenas.

P. ?Y con Serbia?

R. Acabamos de concluir [el mes pasado] un acuerdo de reconocimiento mutuo y establecimiento de relaciones diplom¨¢ticas a nivel de embajada. Es la oportunidad para ambos pa¨ªses de renovar los lazos econ¨®micos que exist¨ªan antes. Ayer se reanudaron las comunicaciones a¨¦reas con Belgrado, aunque durante el tiempo de las sanciones ha habido un intercambio cultural entre nosotros.

P. ?Habr¨¢ elecciones presidenciales anticipadas en Macedonia?

R. No est¨¢ previsto en la Constituci¨®n que haya elecciones presidenciales anticipadas. La funci¨®n presidencial es una especie de puente entre las instituciones y me propongo permanecer en mi puesto hasta el final [1999]. Es mi obligaci¨®n y no puedo traicionar a los votantes. Recib¨ª, cuando fui reelegido {en 19941, casi el doble de sufragios que cualquiera de los partidos m¨¢s votados en los comicios parlamentarios. Y, seg¨²n un sondeo reciente de Gallup-Macedonia, me apoya el 80% de los votantes, influidos seguramente por el atentado que sufr¨ª el a?o pasado.

P. Siete meses despu¨¦s de que casi consiguieran acabar con su vida, ?no hay ninguna pista sobre qui¨¦n perpetr¨® el atentado?

R. Hay numerosos indicios, pero ninguno que permita. presentar pruebas ante un tribunal. Probablemente haya una conexi¨®n con el exterior. Si alguien tiene la idea de hacer lo que hicieron, necesita a unos ejecutores dentro de Macedonia.