El presunto etarra Enrique Pagoaga tendr¨¢ permiso para residir en B¨¦lgica

El Gobierno belga tiene intenci¨®n de negar la concesi¨®n de asilo pol¨ªtico al presunto etarra Enrique Pagoaga Gallastegui, Peixot¨ªn, pero s¨ª permitir¨¢ que obtenga residencia legal en su territorio. As¨ª lo hizo saber ayer el Ministerio del Interior belga a la Administraci¨®n espa?ola.Esta postura es un regalo envenenado. Por una parte, logra dar la sensaci¨®n de que B¨¦lgica colabora con las autoridades espa?olas al negar el asilo pol¨ªtico al activista vasco y evita que se reproduzca una crisis como la desatada por el caso de los presuntos colaboradores de ETA Luis Moreno y Raquel Garc¨ªa.

Pero al mismo tiempo es una afrenta a Espa?a ya que, en lugar de expulsar a Peixot¨ªn, abre la v¨ªa para que obtenga documentaci¨®n de residencia legal en B¨¦lgica y, en consecuencia, en todo el llamado "espacio Schengen", lo que le permitir¨ªa entrar en Espa?a legalmente. De confirmarse esta opci¨®n, consagrar¨ªa a B¨¦lgica como el lugar al que han de acudir todos los ciudadanos espa?oles que se encuentran fuera del pa¨ªs sin documentaci¨®n legal y prefieren eludir las misiones consulares de Espa?a en el extranjero.

Enrique Pagoaga lleg¨® el domingo pasado a Bruselas con documentaci¨®n falsa -a pesar de que un portavoz del Ministerio del Interior belga lleg¨® a decir que estaba legalmente documentado- procedente de Venezuela v¨ªa Francf¨®rt (Alemania) y pidi¨® asilo pol¨ªtico asegurando que no puede entrar en Espa?a porque corre peligro su vida.

Tres opciones

El Gobierno belga tiene tres opciones: darle asilo, expulsarle del pa¨ªs por no tener la documentaci¨®n en regla o aplicarle la directiva sobre Libre Circulaci¨®n de Trabajadores en territorio comunitario. Esta ¨²ltima le permite obtener un permiso de residencia de seis meses que se convierte en indefinido si obtiene un contrato de trabajo. La tercera opci¨®n es, con toda probabilidad, la elegida por el Gobierno belga, que se apoya en que al no estar reclamado por la justicia espa?ola, Peixot¨ªn tiene derecho a residir y trabajar en el pa¨ªs.

Todo indica que es una estratagema legal urdida por los asesores legales del entorno etarra en B¨¦lgica, que hasta ahora han demostrado una soberbia capacidad, pero que estar¨ªa llamada a fracasar si no contara tambi¨¦n con el apoyo pol¨ªtico de los ministros belgas de Justicia y de Interior, los dos flamencos y muy presionados por la opini¨®n p¨²blica de esa minor¨ªa ling¨¹¨ªstica, claramente decantada en favor del activismo vasco.

El Gobierno belga tiene capacidad legal para negar a Peixotin la aplicaci¨®n de la citada directiva comunitaria. Bastar¨ªa para ello que considerara que su presencia en B¨¦lgica puede poner en peligro el orden p¨²blico. Una opci¨®n que seguramente no dudar¨ªan en utilizar Gobiernos europeos m¨¢s afectados que el de Bruselas por los problemas de terrorismo.