La Universidad de La Laguna ense?a a cultivar huertos ecol¨®gicos

No toda la actividad acad¨¦mica est¨¢ centrada en la impartici¨®n de clases, ex¨¢menes o las t¨ªpicas pruebas de laboratorio. En ocasiones, la vida en la naturaleza y la necesidad de buscar f¨®rmulas alternativas de subsistencia son motivo de ocupaci¨®n en las universidades.?ste es el caso del aula de la naturaleza de la Universidad de La Laguna, cuyos responsables llevan tiempo empe?ados en promover la creaci¨®n de huertos ecol¨®gicos para la autosuficiencia familiar. Una iniciativa cuyo objetivo es ense?ar a cultivar hortalizas y verduras en parcelas de 100 metros cuadrados mediante t¨¦cnicas ecol¨®gicas, con el fin de que esa producci¨®n sirva para la alimentaci¨®n de una hipot¨¦tica familia.

Carlos Castillo es el coordinador de este proyecto que este a?o ha durado unos tres meses y que est¨¢ abierto a todas las personas, sean o no universitarios. Para participar en esta iniciativa no hace falta tener conocimientos agr¨ªcolas. En las sesiones te¨®ricas y pr¨¢cticas se suministra la informaci¨®n suficiente para que, una vez finalizada la experiencia, los alumnos sepan manejarse por s¨ª solos en este tipo de cultivo.

Seg¨²n los estudios que sobre los huertos ecol¨®gicos se han elaborado, en una superficie de 250 metros cuadrados es posible producir 1.000 kilos de hortalizas al a?o y cubrir todas, las prote¨ªnas de origen vegetal y una tercera parte de las calor¨ªas que una familia normal consume. Otros informes son m¨¢s optimistas y se?alan que en 50 metros cuadrados se pueden producir legumbres y verduras para dos adultos y cuatro ni?os, con un esfuerzo de un d¨ªa y medio de trabajo a la semana. En Canarias, por su peculiar clima, est¨¢ comprobado que en 100 metros cuadrados se pueden sacar 1.000 kilos de hortalizas al a?o mediante la agricultura ecol¨®gica, basada en el reciclaje de desperdicios, la no utilizaci¨®n de pesticidas qu¨ªmicos o la reducci¨®n del uso de recursos ajenos a la granja, como los carburantes.

Seg¨²n Carlos Castillo, la finalidad ¨²ltima de estos cursos es que las instituciones p¨²blicas proporcionen parcelas en las zonas periurbanas para que aquellas personas con dificultades de empleo, e incluso en situaciones de pobreza, puedan realizar una actividad agr¨ªcola y garantizar su subsistencia. Canarias es una regi¨®n que, adem¨¢s de depender excesivamente del exterior en productos agr¨ªcolas y ganaderos, dispone de una de las mayores tasas de pobreza y paro de Espa?a, a pesar de que en los ¨²ltimos a?os se ha registrado un gran crecimiento econ¨®mico. Sin ser una panacea, los huertos ecol¨®gicos son una aportaci¨®n importante a la soluci¨®n de los mismos. Igualmente, esta actividad tiene aplicaciones terap¨¦uticas contra el estr¨¦s, crisis de autoestima o drogodependencias.

La universidad es una parte importante de la sociedad que no s¨®lo prepara a los futuros profesionales m¨¢s especializados. Los centros acad¨¦micos tambi¨¦n est¨¢n al servicio de los ciudadanos de a pie, e incluso de los m¨¢s desfavorecidos. Esta iniciativa lo demuestra, y su llegada a buen puerto depende de que las administraciones act¨²en para que su aplicaci¨®n sea efectiva en la vida diaria. Adem¨¢s, no es una idea nueva. En muchos lugares de Europa y en la Pen¨ªnsula, caso de San Fernando de Henares de Madrid, ya se realiza con ¨¦xito este tipo de experiencias.