Clemente env¨ªa a Caminero al banquillo
Espa?a recurrir¨¢ a la fuerza y la presi¨®n en el partido clave ante Rumania
La selecci¨®n espa?ola se juega el pase a los cuartos de final envuelta en mil pol¨¦micas, apretada por la necesidad de ganar y pendiente del resultado que obtengan Francia y Bulgaria. Entre todas las variantes hay una que se hace irremediable: el empate a dos o m¨¢s goles entre b¨²lgaros y franceses dejar¨ªa a Espa?a fuera de la Eurocopa. Mientras los corrillos se debaten en apuestas sobre la posibilidad del apa?o, casi nadie ha reparado en el enfrentamiento con Rumania. Sin embargo, el juego de la selecci¨®n no invita a pensar de manera optimista, a pesar de la condici¨®n de eliminado que tiene su rival. Y Clemente sigue fiel a s¨ª mismo. Fuerza y presi¨®n. Mantiene el tr¨ªo Alkorta, L¨®pez y Abelardo, Nadal entra en el centro del campo, Pizzi regresa a la delantera, ahora junto a Kiko... y Caminero, en el banquillo.En la v¨ªspera del partido volvi¨® a vivirse el ambiente agotador de otras jornadas. La conferencia de prensa de Clemente estuvo presidida por la tensi¨®n, por las disputas personales, por un cruce chabacano de medias palabras, desaf¨ªos y vedetismo. La presencia de los jugadores en las ¨²ltimas filas revel¨® la desorientaci¨®n que se advierte en Oulton Hall. Se hab¨ªan acercado probablemente porque se escenificaba un show, porque se anunciaban palabras gruesas y enfrentamientos d¨¦ Clemente y algunos medios informativos. Sin saberlo, los futbolistas defin¨ªan perfectamente el momento actual en la selecci¨®n. Del papel protagonista que les corresponde han pasado a la situaci¨®n de espectadores.
Ser¨¢ dif¨ªcil reponerse de la desintegraci¨®n actual. Incluso la figura de Goikoetxea, ayudante del seleccionador, anim¨® a la confusi¨®n. Goikoetxea confirm¨® que abandona su cargo. La decisi¨®n se interpreta como el distanciamiento definitivo entre Clemente y un hombre de su vieja guardia pretoriana. La noticia, conocida en la v¨ªspera de un partido crucial, desvela el estado de la selecci¨®n y su entorno.
Los conflictos y el descontrol presiden las horas previas al partido con Rumania. Sin embargo, nadie parece darse por enterado de las dificultades que presenta el encuentro. Aunque Rumania est¨¢ eliminada, nada de lo que ha hecho la selecci¨®n espa?ola permite pensar en la seguridad de la
wria. La mejor cualidad del equipo ha sido su capacidad agon¨ªstica, una constante en la era Clemente. Pero las condiciones actuales son peores que nunca. El juego ha sido malo, han faltado recursos futbol¨ªsticos, se ha vivido de dos rechaces -el gol de Alfonso y el despeje de Deschamps- y Clemente no ha encontrado el equipo que incluso le garantice el f¨²tbol que quiere. Nuevamente habr¨¢ cambios en la alineaci¨®n. En el entrenamiento de ayer, Clemente aline¨® a L¨®pez como lateral derecho, Nadal en el centro del campo, Kiko en la media punta, Manjar¨ªn en la banda derecha y Pizzi en la delantera. Seg¨²n las previsiones, salta la mitad del equipo o al menos se cambian sus funciones.
Caminero, autor del gol ante Francia, parece que ser¨¢ suplente, una medida arriesgada con un jugador de un oportunismo muy desarrollado en esta clase de torneos. La inclusi¨®n. de Nadal como segundo volante central, junto a Hierro, avisa de las intenciones de Espa?a: m¨¢s juego f¨ªsico, m¨¢s pelota larga, m¨¢s b¨²squeda de los rechaces en la frontal del ¨¢rea y m¨¢s atenci¨®n a las jugadas a bal¨®n parado. La receta ha resultado insatisfactoria por f¨²tbol y por resultados. Clemente considera que la presi¨®n y la fortaleza bastar¨¢n para desarmar a Rumania. El argumento se antoja pobre.
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