"Me dan m¨¢s miedo los tontos que los c¨ªnicos"

Joaqu¨ªn Sabina (?beda, 1949) ha presentado su nuevo disco, Yo, m¨ª, me, contigo. Como viene siendo habitual en muchas grabaciones de nuestra m¨²sica popular, han colaborado otros int¨¦rpretes cercanos al artista: Angel Rot (Los Rodr¨ªguez), Caco Senante, Pedro Guerra, Carlos Varela, Charly Garc¨ªa y Manu Chao (Mano Negra). El ¨¢lbum, con textos de gran calidad po¨¦tica, es brillante, barroco y sincero.Es un disco ecl¨¦ctico, aunque no disperso; se pasa con fluidez del vals peruano al rap, del bolero al rock and roll, de la rumba a la salsa. Hay un denominador com¨²n que Sabina proclama con osad¨ªa: "La voluntad de depredaci¨®n. No hay m¨²sica que uno no pueda usar si tiene suficiente cara dura y ganas de hacerlo. Yo utilizo todos los ritmos que actualmente se desarrollan en mi lengua. En el mundo. anglosaj¨®n no hay m¨¢s que rock and roll y rap. Hace 10 a?os nos gustaban los boleros, pero no lo dec¨ªamos. Ahora lo asumimos con naturalidad. Se acabaron los dogmatismos".

Tambi¨¦n es un ¨¢lbum caliente y h¨²medo, sarc¨¢stico y mimoso, canalla y tierno, sincero y mendaz, di¨¢fano y ambiguo, libertario, nocturno, vacil¨®n, muy americano, muy latino. El cantante se despacha a gusto: "Desde el punto de vista de los sentimientos, la comparaci¨®n entre Suram¨¦rica y Europa es demoledora. La piel sigue valiendo all¨ª m¨¢s que el traje, las gordas bailan de verdad, se folla de verdad, se r¨ªe de verdad, se pasa hambre de verdad, se aplaude de verdad... Todo es m¨¢s verdad, al contrario de lo que sucede en Europa, que es una representaci¨®n del tedio. Urge reivindicar la pasi¨®n".

Cuba

La canci¨®n Postal de La Habana, salsa desenfrenada, puede que no guste demasiado a castristas ni anticastristas. Cuba ocupa un espacio muy grande en el coraz¨®n de Sabina, al que no duelen prendas cuando habla de la situaci¨®n: "Podr¨ªa estar tres horas hablando mal del Gobierno cubano, a condici¨®n de que los otros se metan por el culo el bloqueo y la ley Helms-Burton. Para discutir de Cuba, primero hay que ir, porque no es como la pintan ni unos ni otros. Que les dejen en paz de una vez. Cuba es una islita que les lleva tocando los cojones 35 a?os, y eso no lo puede consentir el orgullo imperialista".Todo el mundo conoce sus convicciones izquierdistas. Y ¨¦l no se come la lengua al opinar sobre la situaci¨®n espa?ola: "Estos que han entrado ahora no saben muy bien ad¨®nde van ni lo que hay que hacer. Act¨²an con imprevisi¨®n temeraria y con total desconocimiento de lo que pasa a su alrededor. Est¨¢n imponiendo la cultura zarzuelera, a estas alturas. Me encanta ir a ver La verbena de la Paloma, pero no a todas horas todos los d¨ªas. Me dan m¨¢s miedo los tontos que los c¨ªnicos. Me puedo entender con un g¨¢ngster, pero no con un idiota. No es que les llame idiotas, que conste, pero me inquietan".

Muchas canciones de Sabina han entrado en la memoria colectiva y constan en el repertorio de las orquestas populares; otras, pura incitaci¨®n a la lujuria, son interpretadas por los amantes y los borrachos en plena madrugada. En Yo, m¨ª, me, contigo hay unos cuantos temas que pueden seguir ese camino, cosa que le enorgullece: "Me encanta ver a una pareja bailando y meti¨¦ndose mano con una canci¨®n m¨ªa. Me hace m¨¢s ilusi¨®n la memoria an¨®nima de las orquestinas que versiones gloriosas de m¨²sicos conocidos".

Este verano har¨¢ gira con Los Rodr¨ªguez. Otros amigos (V¨ªctor Manuel, Ana Bel¨¦n, Serrat y Miguel R¨ªos) tambi¨¦n se han aliado. Sabina dice: "Me dan envidia, pero a m¨ª en estos momentos el cuerpo me pide guerrilla m¨¢s que ir con los generales, que son los mejores. Siento necesidad de mentirme un poco y creerme m¨¢s joven de lo que soy, envejecer sin dignidad".