La actitud de Clinton, condicionada por las elecciones
Consideraciones de car¨¢cter electoral se interponen en la decisi¨®n que el presidente Bill Clinton debe tomar antes de la media noche de hoy (seis de la ma?ana del mi¨¦rcoles en Espa?a) sobre la suspensi¨®n temporal del apartado m¨¢s controvertido de la ley Helms-Burton sobre el bloqueo econ¨®mico a Cuba. Pero su portavoz, Mike McCurry, respondi¨® ayer, cuando se le pregunt¨® sobre las represalias que preparan los europeos: "Diremos a nuestros aliados que se sumen a nuestro esfuerzo de arrojar el comunismo cubano al basurero de la historia, que es donde tiene que estar".La Casa Blanca teme que, si Clinton cede a las presiones del resto del mundo para atenuar los efectos de la pol¨¦mica legislaci¨®n, su posici¨®n como candidato a la, reelecci¨®n se ver¨¢ debilitada en los Estados en los que la comunidad cubana del exilio cuenta con un peso considerable, como Florida y Nueva Jersey.
Bill Clinton tiene de plazo hasta la medianoche de hoy para decidir si suspende el t¨ªtulo tercero (le la ley Helms-Burton, que prev¨¦ represalias contra los empresarios extranjeros que hagan negocios con antiguas propiedades de ciudadanos norteamericanos en Cuba.
La ley, que lleva el nombre de sus dos patrocinadores en el Congreso norteamericano, da al presidente el derecho de suspender esas medidas cada seis meses cuando considere que se ven perjudicados los intereses nacionales de Estados Unidos.
Clinton podr¨ªa citar las amenazas hechas por Europa, Canad¨¢ y M¨¦xico como una raz¨®n para retrasar la entrada en vigor del apartado tercero de la ley. Esos pa¨ªses han anunciado medidas para proteger a sus ciudadanos represaliados por la legislaci¨®n norteamericana. Canad¨¢ ha mencionado incluso posibles restricciones al turismo de ese pa¨ªs a EE UU, que supone una importante fuente de recursos para Estados como Florida.
Las consideraciones pol¨ªticas, sin embargo, parecen ser en estos momentos m¨¢s poderosas que las econ¨®micas. Florida y Nueva Jersey, donde los cubano-norteamericanos constituyen un importante foco de presi¨®n, son dos Estados claves para las elecciones presidenciales del pr¨®ximo mes de noviembre. Clinton necesita ganar en ambos para asegurarse la reelecci¨®n. Si el presidente suspendiese los aspectos m¨¢s duros de la ley Helms-Burton, los grupos anticastristas orientar¨ªan sus recursos econ¨®micos y su influencia en la opini¨®n p¨²blica a favor del candidato republicano, Bob Dole.
No obstante, en los ¨²ltimos a?os, de forma creciente, las elecciones en Florida las han decidido sectores sociales distintos a los cubano-norteamericanos. Clinton tiene que considerar adem¨¢s la casi un¨¢nime actitud de los medios de comunicaci¨®n y de grupos liberales en contra de la ley Helms-Burton. Pero no parece que, en conjunto, las fuerzas que act¨²an en contra de esa legislaci¨®n anticastrista sean suficientes para que el presidente abra una pol¨¦mica dom¨¦stica a menos de cuatro meses de las elecciones.
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