Los serbobosnios dicen que la OTAN trat¨® de detener a MIadic a principios de mes
La OTAN intent¨® capturar al general Ratko Mladic en su cuartel general el pasado 6 de julio, seg¨²n el mando militar serbobosnio, usando como pretexto un control de armamento pesado. "Pero para hacerlo, como se vio ese d¨ªa, tendr¨¢n que pasar con sus tanques sobre la gente. Desde entonces han colocado puestos de control en todas las entradas y salidas del pueblo". El militar que habla en el centro de informaci¨®n del Ej¨¦rcito, en Han Pijesak, afirma que "no lo coger¨¢n, pero, en el peor de los casos, no lo coger¨¢n vivo".
Llueve torrencialmente y las goteras alcanzan hasta una sala presidida por una favorecedora fotograf¨ªa de Ratko Mladic el comandante en jefe serbobosnio, cuya busca y captura como presunto criminal de guerra ha sido ordenada por el Tribunal de La Haya junto con la del l¨ªder pol¨ªtico Radovan Karadzic. A pesar de la calma aparente, en el centro neur¨¢lgico de los militares serbios -un pueblo monta?oso de menos de cinco mil habitantes, a unos 70 kil¨®metros al noreste de Sarajevo- no se intenta ocultar que la situaci¨®n de los dos l¨ªderes serbobosnios ha alcanzado su masa cr¨ªtica.Lo anunciaba la llegada a la capital bosnia de Richard Holbrooke, el enviado del presidente Bill Clinton para las situaciones de crisis aguda en la regi¨®n. El diplom¨¢tico estadounidense, que ha retomado las riendas balc¨¢nicas, reiter¨® la insatisfacci¨®n de su Gobierno con el cumplimiento de los acuerdos de Dayton, sobre todo por los serbios, y anunci¨® que Washington utilizar¨¢ "medidas diplom¨¢ticas, econ¨®micas y militares" para desalojar del poder a Karadzic y Mladic.
Antes de viajar a Bosnia, el plenipotenciario norteamericano se entrevist¨® ayer en Bruselas con el secretario general de la OTAN, Javier Solana, y con el comandante supremo de las fuerzas de la Alianza Atl¨¢ntica en Europa, general George Joulwan, informa desde la capital belga Xavier Vidal-Folch. Preguntado por si Washington encabezar¨ªa una operaci¨®n comando para capturar a Karadzic y Mladic, Holbrooke respondi¨® que los acuerdos de Dayton autorizan al jefe de la lfor "a adoptar cualesquiera medidas que sean necesarias para que se apliquen" y que tiene la autoridad que necesita". Pese a asegurar que no pretende adivinar las intenciones de ¨¦ste, Holbrooke manifest¨® que EE UU y sus aliados mantienen una total "determinaci¨®n" de que Dayton se cumpla.
Ratko Mladic, sobre cuya salud corren todo tipo de rumores, permanece oculto la mayor parte del tiempo en un refugio antinuclear construido por el mariscal Tito en las profundidades de una monta?a vecina.
Guardia f¨¦rrea
El b¨²nker, en un paraje conocido como R¨ªo Negro, alberga desde el comienzo de la guerra el sofisticado puesto de mando y control del ej¨¦rcito serbobosnio. Acercarse al lugar, cercado por una guardia f¨¦rrea, "es imposible en las circunstancias actuales", explica la fuente castrense que habla con este enviado.Los incidentes del s¨¢bado 6 de julio, probablemente los m¨¢s serios de naturaleza militar desde que los aliados llegaran a Bosnia a comienzos de a?o, han sido descritos por la OTAN como una exhibici¨®n de fuerza despu¨¦s de que un helic¨®ptero de reconocimiento localizara tanques y blindados serbios desplegados en posiciones prohibidas por los acuerdos de Dayton, junto al cuartel general de Mladic.
Tropas estadounidenses se desplazaron a Han Pisejak y forzaron la reintegraci¨®n del armamento pesado a los almacenamientos previstos. Hasta aqu¨ª la versi¨®n aliada.
El mando serbio la desmiente y considera lo ocurrido como el primer intento de captura de su comandante en jefe. "En cuanto la gente se enter¨® del despliegue de la OTAN en R¨ªo Negro empez¨® a agolparse all¨ª y en las carreteras vecinas, rodeando los veh¨ªculos americanos para defender a Mladic. La situaci¨®n lleg¨® a ser tan cr¨ªtica que el general Milan Gvero, nuestro n¨²mero dos en la cadena de mando, tuvo que garantizar personalmente la seguridad del general brit¨¢nico al mando de la operaci¨®n".
A pesar de que la doctrina oficial considera que un intento de detenci¨®n de MIadic y Karadzic lo ser¨ªa "contra el conjunto del satanizado pueblo serbobosnio", su portavoz oficioso en Han Pijesak se mostraba ayer cauteloso sobre la reacci¨®n del ej¨¦rcito ante esta eventualidad. "Estarnos maniatados por los acuerdos de Dayton, cuya parte militar se est¨¢ cumpliendo en l¨ªneas generales y nosotros respetaremos hasta el final". Aparte, "los serbios perciben al Tribunal de La Haya como un instrumento pol¨ªtico de acusaci¨®n colectiva, aunque asegura que juzga s¨®lo conductas individuales. Al comienzo de la guerra se hizo una divisi¨®n entre v¨ªctimas y verdugos y seguimos siendo los verdugos".
Los militares serbobosnios, por oposici¨®n a sus l¨ªderes pol¨ªticos, parecen haber adoptado un perfil deliberadamente plano, que incluye una declaraci¨®n formal de neutralidad electoral: "El ej¨¦rcito no pertenece a ning¨²n partido, aunque varios han intentado implicarnos. Ninguno conseguir¨¢ tenernos a su lado en septiembre, incluido el partido gubernamental".
Su cautela aparente se extend¨ªa ayer al posible desenlace de las negociaciones entre EE UU y Milosevic sobre la suerte final de Karadzic y Mladic. "No sabemos lo que acordar¨¢n Milosevic y Ho1brooke, pero van a intentar usar las t¨¦cnicas m¨¢s sofisticadas para llev¨¢rselos. Al final se encontrar¨¢n con la oposici¨®n popular ( ... ) Los tanques tendr¨¢n que pasar sobre la gente, habr¨¢ muertos y los efectos de todo esto se ver¨¢n enseguida".
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